No te vayas

30 de noviembre de 2009












Afuera llueve y yo espero por ti, Selena…


Llueve fuertemente afuera. Un cielo gris plomo, unas nubes grandes y amenazantes nos amenazan con una lluvia sin fin que puede durar horas, días, semanas. Temo que pronto llegará el colapso y con él nos quedaremos sin energía, sin las comodidades a nuestro alcance. Pero sé qué hay cosas peores que eso. Escucho la lluvia que cae fuertemente sobre los pisos, sobre los techos, sobre la gente. Los gatos corren espantados buscando su refugio. Todos buscan guarecerse de semejante tiempo loco. En cambio, yo hago lo contrario. Miro al cielo, me amargo de no poder ver a Selena porque las estrellas son ocultadas por esas nubes terribles y recuerdo ese nefasto día, ese negro día en el que Selena partió de su casa para ya no volver. Y me pregunto: ¿tú también estabas huyendo, Selena? ¿De qué querías escapar? ¿Acaso fuiste a guarecerte en manos de esa pérfida? ¿Qué te hizo pensar ese negro cielo, esas nubes amenazantes, esa lluvia que se venía para instalarse para siempre ese día? ¿Qué sentías? ¿Qué creías? ¿Que te ibas a encontrar con una persona que te quería más que tu esposo, que tu familia? ¿Por qué aún debías escucharla? ¿Por qué tu ansiedad te llevó al arrebato y a querer solucionar todo? ¿Por qué una vez más creíste que tú debías solucionar por ti misma este problema que te planteaba esa cruel mujer? ¿Por qué esa lluvia no te hizo pensar en malos presagios? ¿Por que esas nubes no te detuvieron? ¿Por qué no pensaste que lo mejor era lo que dejabas en vez de creer que lo era tu destino? ¿Por qué no pensaste que cada día hay que vivirlo hasta lo máximo y como si fuera el último pero con cosas lindas y bellas, y no con problemas y con actitudes psicópatas de esa pérfida? ¿Por qué no pensaste en tu grandeza y no en la bajeza humana? ¿Por qué no te supiste querida por tanta gente? ¿Por qué aún le creías o le querías creer a esa mujer, por Dios, Selena? ¿Por qué no pensaste ese 31 de marzo lo que tú ya sabías, que eras la mejor, la más querida, la inigualable, la artista más entrañable? ¿Por qué fuiste a buscar ese nuevo y triste destino? ¿Por qué no pudiste pensar? ¿Por qué te dejaste llevar por el corazón siendo que a veces él nos juega una mala pasada? ¿En dónde quedó la famosa intuición femenina? ¿Por qué no lo consultaste con nadie? ¿Por qué no llamaste a tu familia? ¿Por qué al menos no les avisaste? ¿Por qué no reparaste en la preocupación de Chris? ¿Por qué no le confiaste a él o a alguien de tu familia lo que te pasaba, si es que te pasaba algo? ¿Por qué creíste que esa mujer con sus amenazas de destruirse o de destruir te iba a dejar mejor solución a tus problemas y a tus penas? ¿Por qué no reparaste en que si alguien se tenía que acercar era ella y no tú? ¿Por qué creíste que esto lo podías solucionar de la misma manera como cuando querías quedarte con Chris y tu padre se oponía? ¿Acaso no pensaste que tu familia te conocía y sabría que jamás te haría el daño que te hizo esa mala mujer? ¿Por qué tu enojo, tu preocupación, tu desesperación te encegueció, Selena? ¿Qué creías que podía buscar esa maldita mujer con sus amenazas? ¿No pensaste que ella no era Chris, no era tu padre, no era tu público? ¿No pensaste que una persona que extorsiona nada bueno puede querer, desear, hacer? ¿Por qué no hablaste con alguien, por qué no pediste ayuda, por qué no le confiaste a alguien lo que te ocurría? Y si lo hiciste, ¿por qué no te detuvo, por qué fuiste igual? ¿Por qué pensaste que esa mujer te quería más que tu público que te daba todo a cambio de nada, con su sonrisa, con su protección? ¿Por qué no pensaste en ese momento quién te puso en ese lugar en el que estabas, el que te hizo grande, el que te hizo tan querida? ¿Por qué no supusiste jamás que te podían lastimar de veras alguna vez?...

Estoy afuera en la calle mojándome y mucho. Siempre detesté mojarme, sobre todo mis pies. Me dejan descuidado, frío, sin protección. No me importa esta vez. Perdóname, Selena, por mis preguntas, por mis gritos, por mi desesperación en esta lluvia torrencial. Es que siento esa lluvia y me siento que ella me lleva a Corpus Christi ese nefasto 31 de marzo de 1995 y quiero detenerte a cualquier precio, de cualquier manera. Una vez más pienso en eso que me martiriza todos los días, que es querer volver el tiempo atrás, querer llegar justo a tiempo, correr a donde sea según la hora, y pararte, gritarte, hacerte recapacitar, tirarme frente a tu camioneta y dejarme atropellar, que tu atención se desvíe a otra cosa, a otra circunstancia. Que no pienses en aquello, que te alcance la lluvia, que te vea un admirador, que te vea Chris, que te vea tu padre, que alguien te detenga, que al menos no avances ese día, que sea ella la que se acerque y no tú.





Querría detenerte en el Days Inn, que me grites a mí, que intentes apartarme, que llames a la policía, lo que sea, para poder demorarte, poder lograr que ese cielo no me anuncie ese destino siniestro, que mágicamente se aclare ese día y que tú estés a salvo. Y yo … ¿Qué importa? No me importa estar preso, herido por esa mujer, atropellado, sin rumbo, sin destino. Lo único que querría es estar un instante, sólo un instante para darte una nueva oportunidad, una nueva vida, una nueva ilusión. Siempre me imaginé poderlo hacer antes de que se me acabara mi tiempo y volver a mi casa con la inquietud de qué sería de ti hoy … Recuerdo una gran película de terror dirigida por el maestro John Carpenter, llamada “El príncipe de las tinieblas”. Al final de la historia, el protagonista, luego de soñar una pesadilla, se incorpora y lentamente se acerca a un espejo y con mucho temor acerca su dedo a él temiendo que algo detrás de él hay. Y la película termina ahí, sin saber si hay verdaderamente algo o no … Yo también querría impedir todo, correr el riesgo de las consecuencias, llegar a mi casa y tímidamente acercarme al televisor o a la computadora, con la inquietud de saber qué sería de ti hoy, con qué me encontraría … Por ti correría ese riesgo, querría verte qué serías hoy con esa nueva oportunidad … Es curioso y nada casual. Esa película también habla de los viajes en el tiempo y de la posibilidad de hacerlo mediante taquiones. De hecho los protagonistas recibían mensajes de gente del futuro avisando que hagan algo para impedir lo que estaban viviendo en ese momento. La película es de 1995 hecha en Estados Unidos. Efectivamente, nada es casual…



Sigo caminando por la calle en plena lluvia y acaso encuentro una respuesta a por qué de mi necesidad de recordar todos los días a Selena, por qué necesito escribirle, recordarla, hacer lo que sea por su tributo, por todo lo que nos ha dejado. Cada vez que la veo, cada vez que la escucho, cada vez que percibo el enorme talento que tenía me niego a aceptar que no está entre nosotros, no puedo entender que se haya ido, que haya tenido ese destino, que tenga esta realidad. Sencillamente no puedo ni quiero aceptar. Cuando hablo de ella hay palabras que no pronuncio, hay imágenes que no puedo ver, pero el bombardeo mediático y sin filtro hace que más de una vez las haya visto y quede esa realidad en imagen marcada en mi corazón, en mi recuerdo, en mi alma … Y allí me pregunto: ¿cómo le hicieron esto a Selena? ¿Cómo la persona que perpetró esta locura puede dormir en paz? ¿Cómo semejante artista, semejante mujer ha quedado en el camino de una manera que no encuentro manera de explicarlo? ¿Qué nos queda después de esto? ¿En qué podremos creer? Si el mundo se quedó sin Selena por la obra de una persona que no tiene ni alma ni corazón, ¿qué nos queda a los demás, qué enseñanza le dejaremos a nuestros hijos, qué esperanza, qué futuro podremos tener? Y es allí que pienso en ti, Selena, saco fuerzas de donde no tengo y hago lo indecible para que todo el mundo te valore, para que todo el mundo sepa quién eras, para que el que ya te conocía no se olvide de ti jamás. Ahora es la tarea más difícil: luchar contra el paso del tiempo, contra el abandono, contra el olvido, contra los mensajes que nos dicen “Resígnate. Ya nada se puede hacer. Dejemos que el tiempo se encargue de hacer lo suyo. Lo hecho, hecho está. Cada uno tiene que seguir con sus vidas. ¿Qué podemos hacer? Recordemos a Selena en los aniversarios. Escuchemos su música cada tanto … Demos el homenaje cuando haya una fecha significativa…” No!! Definitivamente, me resisto a ello!! No lo puedo aceptar!! Selena tendría que estar con nosotros ahora. Selena tendría que estar disfrutando hoy de ser la mejor cantante latina y una de las mejores del mundo. Selena tendría que estar recorriendo el mundo con su voz, con su canto, con su sonrisa, con su carisma. Selena tendría que estar en un concierto cantando, bailando, saludando a su público, arengando a bailar, a cantar, a que la ayuden … sobre todo a que la ayuden ... Cada vez que la oigo decir “Ayúdame”, lloro. Lo hice desde la primera vez que la escuché sabiendo cuál era su destino … Selena debería estar feliz con su vida, con su esposo, con sus hijos, con su familia. Selena tendría que estar feliz con su destino cuando a los 8 años se le ocurrió cantarle viejas canciones a su padre, saber todo lo que le ha deparado haber hecho eso. Selena debería estar feliz viendo cómo su padre observa con orgullo cumplir su viejo sueño. Selena debería estar cantando en inglés y en español, y estar triunfando en ambos mundos: el latino y el anglosajón … Y ser conocida hasta en la India ... Selena debería disfrutar su destino de grandeza, de ser la única artista completa, que podía cantar cualquier tipo de música, cualquier tipo de canción. Selena debería disfrutar de su máximo sueño plasmado en Selena Etc. Selena debería ver cómo su propio sueño se materializaba con sucursales de su boutique en todo el mundo. Selena debería ver cómo las nuevas generaciones llevaban su nombre y usaban su ropa. Selena debería observar y sentir con emoción cómo todo el mundo la tomaba como ejemplo, cómo su figura era tomada como guía para toda la humanidad. Selena debería estar recorriendo los colegios para que los niños la pudieran ver, y sentir que ir a la escuela y aprender era una magnífica idea y una bendición. Selena debería estar alegrando al mundo y el mundo alegrarse de Selena. Tan simple como eso. Tan doloroso de no poder verlo hecho realidad hoy…



La lluvia me sigue golpeando pero yo no me quiero refugiar. No quiero guarecerme del dolor, de algo que me hiere, que lo llevo como carne viva. Siento la lluvia y siento el dolor de no tener a Selena, de no disfrutarla, de no poderla querer, de no poder decir lo que significa para mí … ¿Qué no daría hoy poder escribirle lo que significa para mí y tener la ilusión de que lo lea y de que se alegre? Sé que si estuviera aquí, me contestaría. Sé que si estuviera aquí sería ella quién me daría las gracias. Pero lo más importante sería verla hoy, verla triunfar, feliz, contenta, viviendo … ¿Cómo una mujer con tanta energía, con tantas ganas de hacer cosas, con tantos sueños, con tantos anhelos, con tantos deseos de vivir, con las ansias de realizar equiparable a veinte personas no esté aquí? ¿Qué me están queriendo decir?¿Que abandone, que no insista más, que escuche su música como si fuera una más, que no nos gane el dolor cada tanto, que ya no tiene sentido hacer algo por ella, que abandone, que deje, que la erosión del tiempo haga lo suyo? ¿Es eso lo que me quieren decir? ¿Dejaré que esa mujer enjaulada se salga con la suya? ¿Dejaré que sólo me queden de Selena fotos y recuerdos? ¿Pensaré que mi vida la puedo seguir normalmente sin ella? No, no lo aceptaré de ninguna manera!! No diré “Selena vive” como un mero formulismo, como una formalidad, del mismo modo como uno dice “Buenos días”. No, porque efectivamente, Selena vive … en mi corazón. Y mi corazón late por ella, vive por ella, le pertenece a ella. Por eso viviré cada día como si Selena estuviera aquí, haré lo que sea para que se difunda su obra, no me resignaré a la idea de que el mundo vea todo lo que hizo esta increíble artista con tan sólo y casi 24 años. Selena tendría que estar aquí. Yo me encargaré de que así sea, de que tenga siempre su sonrisa, de que su voz no se apague nunca, de que pongamos nuestros sentimientos a flor de piel a la hora de recodarla. Que cada día nos alegremos pero que también lloremos. Que sepamos que ese día tan feo y tan gris se llevó a una artista excepcional, única e irrepetible. Que ese día nefasto que presagiaba lo peor se llevó a ese ser tan hermoso que nunca podremos olvidar. Ese Amor que desplegaba Selena sólo lo podía desplegar ella, del mismo modo que sólo Selena podía cantar sus canciones. Porque Selena no era sólo una linda figura. Selena no era sólo una linda voz. Selena era algo increíblemente bello, un ángel que pasó fugazmente por esta Tierra tal vez para decirnos que Dios existe efectivamente. Sólo un ser como Selena puede dejar tantas certezas y ninguna duda…



Hace sólo un ratito que ha parado la lluvia. Parece que lo peor ya pasó. No es lo que siente mi corazón, mi cuerpo, mi alma. Tal vez porque todo ello le pertenece a Selena y mientras eso sea así, yo no bajaré los brazos, no me daré por vencido, no pensaré en imposibles, desafiaré el paso del tiempo, el destino, la vida, el mundo, las creencias. Vale la pena hacerlo, intentarlo. Se trata de Selena. Y movería hasta el universo con tal de arrancarle una sonrisa, para que viva en paz, para que esté con nosotros por siempre y para siempre. Para que ese cielo plomizo se transforme en un hermoso día de sol, de vida y de esperanza … con Selena … Con un mundo con Selena…
Selena … Yo jamás te abandonaré y siempre me tendrás aquí dándote mil abrazos y mil besotes, y teniendo la seguridad de verte muy pronto…



Simplemente te quiere con toda el Alma…



Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)















Cada noche, Selena…


Cada noche voy al Houston Astrodome y en una forma un tanto insólita ingreso, cuando no hay nadie, cuando se supone que no hay forma de poder entrar. Pero ya sé cómo hacerlo. No importa cómo ni creo que nadie pueda cuestionarme que lo haga. No busco lastimar a nadie. No vengo a hacer nada malo. No quiero alterar nada de lo que haya allí. Una causa noble me lleva allí. La noche, mi presencia y mi soledad están presentes allí buscando que algo suceda, que algo pase, que la magia se haga presente allí…

Entro sigilosamente a un estadio enorme, que está silencioso y vacío. Es curioso. Estás cosas me dan terror hasta de escribirlas. Estar tan solo a oscuras da un misterio que de pensarlo uno queda paralizado del temor. Pero nada de ello me sucede cuando estoy allí. Miro las estrellas, miro esas pequeñas luces de una ciudad que duerme y trato de revivir aquella noche memorable, aquella noche en la que Selena nos diera un magnífico concierto. Muchos dicen que fue el último, muchos dicen que el último fue el de Chicago. Otros hablan del de Calle 6. Otros aseguran que fue en San Antonio, en la Escuela de los Spurs … Poco importa eso. Tal vez lo más importante de aquel concierto del 26 de febrero de 1995 es que marcaba sin duda un antes y un después en la carrera de Selena. Una nueva era comenzaba a nacer. Hasta allí, Selena era la gran artista tejana en ascenso. Desde ese concierto Selena sería la gran estrella que iba a conquistar el mundo, en un año que sería definitivo, fundamental para que Selena se encaminara a ser la gran estrella internacional. Y como tantas otras veces Selena no defraudará. Estará a la altura de las circunstancias y nos ofrecerá un concierto sencillamente inolvidable. Y una vez más habrá que decir que aquel concierto no fue importante por lo que lamentablemente sucedió después. Fue importante por lo que significó en su momento. 65.000 personas marcaban esa realidad. Pero ese número frío no da siquiera la dimensión de lo que significa para muchos Selena. Selena era mucho más que eso, definitivamente. La gente la amaba, la quería, quedaba obnubilada por tanto Amor desplegado. Selena les entregaba todo y la gente lo recibía con total cariño y se lo devolvía con agradecimiento. Pocas veces una artista logra acaparar la atención del público no sólo con un par de hits, sino con su presencia, voz, carisma, personalidad, talento. Pocas artistas logran ser realmente queridas y que sientan la necesidad de expresarle su Amor, su necesidad de protegerla, de cuidarla … Ironías de la vida, aquello que con el tiempo quedó demostrado que Selena necesitaba aquel nefasto día, lo tenía en su público, nada más. Esa soledad que tenía Selena, ese Amor que necesitó ser expresado como nunca aquel nefasto día estaba en ese público que nunca, nunca la iba a abandonar, que siempre la iba a proteger de la maldad, del egoísmo, de la mentira, de la codicia, del dolor…

Estoy solo en ese estadio que en otras épocas lucía tan hermoso pero que ahora se me presenta como un monstruo silencioso, frío, distante, sin la expresividad que tenía en aquellas épocas en las que estaba Selena. Y es que por más lindo que sea el escenario, por más hermoso que sea el ámbito, por más que la música pueda gustarnos, si no está aquello que le da vida, que le da sentido, que le da alegría, ese Houston Astrodome no deja de ser un estadio más, un lugar más que podrá ser llenado una y otra vez por miles y miles de artistas, podrá ser adornado con sus mejores luces, podrá ser ambientado con las mejores interpretaciones, pero nunca será lo mismo si falta esa magia, ese Amor, esa espontaneidad, esa mujer que supo hacer del canto y de la actuación un arte. Una mujer que supo ponerse a la par de su público y hacerlo partícipe de la fiesta. Una mujer que se sabía la Reina pero que para tener el derecho de serlo tenía que brindarse a su público como él lo hacía con ella. Una mujer que hizo que su reinado tenía que ser revalidado todos los días, en cada actuación, en cada tema. Una mujer que para pedir a su público que la ayuden, que canten con ella, que estén animados y contentos tenía primero que hacer todo lo posible y más que ello para tener la autoridad para exigir. Y desde que esa mujer no está esa magia tampoco está ... Ese estadio no tiene el mismo brillo y esplendor, eso que no se logra ni con más público, ni con más promoción, ni con más fuego de artificio. El ángel no lo tienen todos ni se compra en ninguna tienda. Se nace con él, y se ejercita y muestra. Eso era Selena. Eso que nadie tiene. Eso que nadie tendrá jamás. Eso que tanto se extraña. Esa magia que desde 1995 se ausenta en el Houston Astrodome...

Miro las estrellas y no puedo evitar recordar esas imágenes de Selena cantando, deleitándonos, cautivándonos, moviéndose de un lado al otro del escenario, y un público que sólo gozaba con semejante presencia, con una artista que se sabía única e irrepetible… Miro a un costado y puedo ver ese cartel enorme que dice Selena que brilla frente a mí, y sólo añoro que ese cartel no se apague nunca, que ese cartel vuelva a iluminarse como preludio de una nueva actuación. Miro a otro lado y veo las puertas de entrada al Houston Astrodome y sólo espero que se abran, sólo espero eso. Sólo deseo y pido que se entreabran, nada más. Quiero tener esa secreta esperanza de que algún día salga ese carruaje, de que ella vuelva a aparecer. No pido que aparezca de la nada cuando nadie la vea. Quiero creer que estoy aquí anticipadamente siendo el primero en asistir a una nueva presentación de Selena en este lugar. Sé que puedo estar pensando en una quimera. No va a faltar que alguien me diga que la realidad es una ley que no se altera, es un mandato divino que sólo está para acatarse. A mí eso no me importa. Yo me refugio aquí para no creer en lo que me dicen, para no aceptar la cruel realidad, para no resignarme jamás, para creer en los milagros, para paradójicamente no creer que sea cierto lo que pasó … Algo tan divino como Selena de ninguna manera pudo haberse ido. No es aceptable eso para mí … El silencio es tan denso, que hasta puedo sentir el sonido de los grillos mezclados con unos pasos que me inquietan. Pero eso sólo me genera la esperanza de que algo puede suceder, de que algo va a pasar, de que aquello que tanto ansío se concrete…

Me incorporo y me atrevo a saltar hacia el campo de rodeo. Camino en la oscuridad y creo escuchar un ruido. Siento como si un carruaje caminara a mi alrededor y me acompañara. Escucho a alguien respirar y recuerdo a Selena deteniendo en esa noche mágica su canto de “Si una vez” dejando que sólo se escuche su respiración. Camino hacia el centro del campo dejándome llevar por ese recuerdo y buscando algún atisbo de aquel momento, esperando que haya un rastro, una huella, un eco de aquel instante. Muchas veces me pregunté si acaso Selena seguiría viniendo por acá reviviendo aquello, queriendo recibir aquel cariño, sentir aquella sensación. En ese ruido de carruaje que lo escucho diariamente creo sentirla cerca, y la busco y la busco, pero no la encuentro. Esa allí donde no puedo evitar estallar en llanto e impotencia. Grito, la llamo, espero una respuesta ... algo, una señal, que me indique una dirección, que me señale que Selena está allí, que jamás se fue del Houston Astrodome y que sólo espera el momento para ofrecernos algo más … Pasa un tiempo en el que sólo me quedo sentado mirando el piso sin decir nada, sin atinar a hacer nada. Cansado de estar así, trato de reanimarme, levanto fuerzas y me dirijo a un escenario que se ha montado allí para alguien que se presentará ese día. Me parece que es de una artista de la Disney, muy promocionada, pero no recuerdo su nombre. Llego a la plataforma y subo a ella. Camino unos pasos y vuelvo a mirar las estrellas y no puedo dejar de pensar en esa noche, en ese día tan bello. Puedo sentir el perfume de Selena en ese escenario. Puedo sentir su energía allí. Voy lentamente hacia un lado del escenario y me siento como si fuera Selena caminando en ese escenario interpretando “No me queda más”. Puedo sentir su emoción, puedo sentir su sentimiento a flor de piel en cada palabra, en cada estrofa, en cada verso. Puedo ver su cara, su sufrimiento, su lamento, su desazón. Y me emociona porque cada palabra suya, cada expresión, cada sentimiento expresado en su rostro me llega en lo más profundo del Alma. Porque yo le creo a Selena cuando sufre. Yo le creo a Selena cuando está contenta. Yo le creo cuando me manifiesta su enojo. Yo le creo cuando me transmite alegría. Aún hoy me estremece cuando me mira a la cara y me dice “canalla” en el video “La llamada” … Alguna vez Selena, en el Show de Cristina, explicaba esto: que cuando tenía que cantar una canción triste o alegre ponía énfasis en esos sentimientos. No hacía falta explicarlos. Porque decirlo es como descubrir un truco de magia. Y eso era parte de lo bello de Selena. A veces la exposición pública ante los grandes medios hacía que Selena tuviera que explicar algo que sólo los que la amábamos y le creíamos no necesitábamos escuchar … Lo sentíamos…

Sigo en el escenario yendo a un lado y otro moviéndome como Selena lo haría en ese Disco Medley que la haría famosa, que acaso hoy si estuviera entre nosotros lo recordaríamos como el inicio de su extraordinaria carrera musical entre los angloparlantes. Recuerdo cómo quedé impactado con semejante actuación, semejante movimiento, gracia y estilo, qué dominio del escenario y del público tenía. Y lo que más: qué claro lo tenía todo, qué condiciones tenía como cantante y como artista. A veces cuando veo que tantos artistas necesitan de asesores de imagen y musicales que le indican qué cantar, cómo vestirse, cómo presentarse, y ganar millones y fama con eso, recuerdo a Selena … Y me digo y reflexiono: ¡y pensar que si ella estuviera aquí no necesitaría nada de ello! Ella llegó hasta lo que fue simplemente siendo ella, auténtica, graciosa, chispeante, amorosa, pasional, increíble … Para vestirse no necesitaba a nadie: era diseñadora y con sus creaciones imponía un estilo que todos imitaban. Tenía “truquitos” que los había aprendido de chica: hacer saluditos personales, poner determinadas caras en determinadas circunstancias, decir tal o cual cosa en determinado momento del concierto, animar al público. Era sólo eso. Todos lo demás formaba parte de su “secreto”, de su misterio, de su magia, de su estilo … simplemente ser ella misma. Nunca interpretaba una canción de la misma manera, nunca eran iguales, todas eran particulares porque dependía de cómo Selena las interpretaba en aquellas ocasiones … Y allí vuelvo a recordar sus palabras en el Show de Cristina: para “calmar” a las señoras que se “escandalizaban” con sus atuendos, ella tenía que aclarar que una cosa era ella en el escenario y otra fuera de él … Sé que ella no pensaba así y eso se notaba cuando actuaba. Por eso cuando veo a esos artistas que necesitan reinventarse para seguir vigentes, pienso en Selena. Ella no necesitaba eso. Selena sólo se mostraba como era, algo que a ningún creativo ni asesor de marketing se le hubiese ocurrido … Y cuando pienso en ello entiendo por qué se la extraña tanto, se la busca tanto, se la espera tanto…

Camino para bajar de ese escenario y recuerdo a Selena descendiendo de allí luego de cantar “Como la Flor”. Recuerdo ese inicio memorable, la emoción cuando el público deliraba en el momento en el que ella, una vez más, retiró su micrófono y lo apartó a su costado, y esperó cómplicemente que el público acompañara la canción … Aún hoy puedo ver el recorrido de sus ojos, el mirar a cada asistente del concierto con total emoción hasta alzar su mano y dar su mejor sonrisa cuando se vio sorprendida por la cámara. Durante todo el tema Selena se movía y cantaba la canción con la sensibilidad de una mujer que se sabe querida y gozando como nadie de ese momento. Cuando ya sobre el final Selena anunció que, una vez más, habían quebrado el récord de asistencia de público y pidió un fuerte aplauso, dijo aquellas palabras que aún hoy resuenan una y otra vez en mis oídos: “Mil abrazos y mil besotes a cada uno de ustedes. Cuídense muchísimo y nos veremos muy pronto. Hasta luego. Chau. Buenas noches. Gracias”. Y aún retengo esa imagen de Selena saludando una y otra vez al público, mirando a los cuatro costados del enorme estadio. Y también retengo a Selena totalmente emocionada mordiéndose el labio en señal de no poder creer lo que estaba viendo. No poder creer el sentir y recibir tanto Amor. Puedo sentir en mi piel cómo se eriza su piel. Mientras camino puedo sentir la emoción, el júbilo, la satisfacción del deber cumplido, de sentir el cariño de su público, de haber logrado algo después de tanto tiempo y el desafío de encarar esa nueva etapa con la misma exigencia, esfuerzo y dedicación de siempre. Siento cómo Selena se iba de aquel escenario entendiendo que semejante despedida no sería una más. Sería el inicio de una largo recorrido a la fama en el que se enfrentaría con nuevos desafíos, tan o más exigentes que hasta ese momento. Siento cómo Selena no podía pensar en los obstáculos que tendría de allí en más, aunque supiera de ellos. Siento cómo Selena quería irse con esa sensación, ese sentimiento que no lo iba a olvidar jamás, que lo llevaría por siempre en su corazón…

Ya nuevamente en el campo, voy caminando alrededor de él y recuerdo aquella despedida. Yo no pienso ni siento que ese momento Selena lo viviera como tal. Selena tenía mucho por hacer. Tenía muchos planes, muchas ambiciones, muchas ganas, muchas ideas, mucha energía. Nunca pensaría en un final. Nunca pensaría en un retiro. Lo puedo sentir. Puedo sentir el palpitar de su corazón, la sensibilidad de sus ojos, el contener su llanto para mostrarse siempre sonriente y agradecida ante su público. Lo sé así. En esa noche tan oscura aún puedo percibir ese andar lento del coche y ese saludo interminable de Selena. Puedo escuchar el griterío y júbilo de la gente. Puedo sentir el Amor que le proliferaban. Puedo ver y escuchar cada palabra, cada gesto, cada alce de brazos tratando de al menos tocarla, de expresarle el Amor que le tenían. Puedo sentir el sentimiento de esa gente que veía en Selena su hermanita, su representante, su igual. Selena era suya definitivamente. Esa sensación jamás la habían experimentado. Jamás la habían sentido. Jamás la sentirán. Y por eso se lo expresaban de esa manera. Esa artista tejana había sabido condensar todos sus sentimientos, todas sus sensaciones, y por eso pusieron a Selena en ese lugar tan alto, ese lugar que Selena tanto agradecía y que por ello decía que jamás había que dejar de atender. Una vez más recuerdo cómo Selena en el Show de Cristina decía que cómo no iba a atender a su público si éste la había puesto en un lugar tan privilegiado. Ese público puso a Selena en un lugar al que nadie había llegado. No tuvo que pasar lo peor para que Selena ocupara ese sitial. Selena lo había logrado, lo había vivido, lo había sentido. Ninguna artista tejana había llegado tan lejos. Ninguna artista tejana lo logrará después. Es que la gente había adoptado a Selena y no quería nada a cambio. El público le entregó todo su Amor a ella, y el público no es de regalar tamaño sentimiento a cualquiera, aun en ausencia de aquella a quien se le ofreció todo, todo a cambio de nada, como lo había hecho Selena…

Llego a la puerta de entrada del Houston Astrodome. Llamativamente está entreabierta. Es como si siempre estuviera así, esperando que todos los días Selena pase por allí. Ingreso, llego hasta allí y puedo ver esa enorme tribuna enfrente, esa tribuna que tuvo la fortuna de verla por última vez. Me animo a treparme a ella y experimento la sensación de esperar que pase el auto por allí. Espero que se acerque Selena para saludar a todo el mundo y que cuando esté por retirarse advierta mi saludo y se vuelva sobre sus pasos para saludarme, para que todos nos llevemos su Amor y que ninguno se quede con las manos vacías … Espero su saludo, lo siento y se lo devuelvo alzando todo lo que puedo mis brazos, haciendo luego una reverencia y tomando en el aire su saludo para llevármelo a mi corazón … Cuando sé que ella se ha retirado, cuando el silencio invade nuevamente el lugar, cuando nuevamente la negrura de la noche cae ante mis ojos, recién allí me incorporo, lentamente me levanto y enfilo para la salida. No puedo evitar mirar una y otra vez hacia atrás, esperando algo más, que algo nuevo suceda, que algo me sorprenda y volver corriendo hacia allí. Sé que es una quimera. La realidad, como el paso del tiempo, es impiadosa. Yo me resisto a ello. No es que espera nada extraordinario. Ni siquiera sé qué esperar en ese lugar hoy. Tal vez espero que alguna vez no sea lo que hoy es, que todo fuera distinto, que la realidad fuera otra. Esperaría que Selena estuviera aquí, como quien espera que el mundo fuera un tantito mejor…

Ya estoy afuera. Creo que salí del mismo modo en el que entré. La verdad, no me di ni cuenta. Ahora que lo pienso … ¿no estaban las puertas abiertas? No lo sé. Miro hacia atrás y el Houston Astrodome luce enorme, oscuro, frío. Vuelvo dos pasos hacia atrás … Nada pasa … Por ahí creí ver una luz que se encendía. Por las dudas corro hacia atrás y vuelvo a asomarme para ver si algo sucede, si algo me perdí. Veo que hay algo que se mueve … Era personal del Astrodome que comenzaba a trabajar para ese concierto de alguien que no sé como se llama brindará ese día … Ahora entendí cómo había salido de allí … Tuve suerte que nadie me advirtiera. Pero ya no me importa eso. Sé que mañana será lo mismo. Y los siguientes días también. Y cuando la tristeza me embarga y la desesperanza se apodera de mí, allí, recién allí, miro de nuevo las estrellas. Y recuerdo de nuevo esa noche. Y vuelvo a deleitarme con recordar a Selena aquel día. Y nuevamente alzo mi brazo como buscándola, como si supiera con certeza que está allí, cuidándome, guiándome, protegiéndome. Sé que ella también está llorando pero con una mueca de sonrisa, con esa mordedura de labios como cuando se despidió aquel día. Ella también extraña, ella también espera volver. Ella sabe que todos la esperamos. Todos sabemos que nos encontraremos algún día…

No sabes Selena lo tanto que te quiero, lo tanto que te extraño … En realidad, sé que lo sabes. Pero cómo me gustaría demostrártelo…

Te quiere con toda el Alma y ofreciéndote mi corazón todos los días, te extraña…

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)











Sólo quiero agradecer a todos ustedes…


Woooow!!! Qué emoción!!! Gracias!!! Muchas gracias a todos!!! Es un honor para mí estar en esta 30a. Emisión de los Tejano Music Awards!!! Me da un no sé qué decir que para mí es un orgullo ser premiada por 23a. vez consecutiva como la mejor cantante femenina del año y aún me cuesta creer que lo haya logrado, porque sé que hay muchas cantantes tanto o mejores que yo que están triunfando en todo el mundo. Tal vez yo haya tenido la suerte de abrir el camino para que la música tejana sea conocida y valorada en la República Mexicana y en toda América Latina, pero sé que en todo caso he contribuido para que tantas cantantes y tantos grupos de nuestra raza sean conocidos y sean valorados como se deben. Que hayamos podido sacar tantos prejuicios sobre nosotros y que hoy seamos tan escuchados y tan solicitados en todo el planeta es un logro y un orgullo que hoy es para mí el premio más importante que me llevo de esta histórica premiación…

Yo quisiera aprovechar esta oportunidad para agradecer, porque más allá de que muchos consideren que me merezco tantos honores, tantas premiaciones, tanto reconocimiento, yo no hubiese llegado hasta donde llegué si no hubiese tenido a tanta gente a mi lado, a tanta gente que me apoyó, a tanta gente que creyó en mí, a tantos que me dieron aliento y tantos otros que me dieron una mano cuando la necesitaba, a tanta gente que me dio la oportunidad para que yo esté aquí. Porque el hecho de que hoy sea reconocida en todo el mundo, que haya gente aquí no sólo de mi país sino de México, de Puerto Rico, de El Salvador, de Venezuela, de Colombia, de Perú, de Argentina, de tantos hermanos latinoamericanos, no me hace olvidar cómo llegué a este lugar. Y por eso estoy aquí en San Antonio, Texas, que me dio tantas satisfacciones, que me dio todo su Amor, su calor, su cariño desde que tenía tan sólo 15 años, que siempre vio en mí un fiel representante de nuestra música, que siempre valoró mi esfuerzo y mi Amor a lo que hacía. Hoy para mí es un honor estar aquí, pues ya saben que sin ustedes aquí yo no soy nada…

Quiero agradecer en primer lugar a mi público, a mis fans, a aquellos que me dieron su cariño siempre, que no sólo aplaudieron mis canciones, que me ovacionaron en cada presentación, que me pidieron un autógrafo ante cada aparición en público, que siempre me manifestaron cariño y admiración, que siempre respetaron mi vida personal, que siempre me dieron aquello que más necesitaba, que era Amor. A ese público yo le debo todo. Le debo todo por tanto reconocimiento, por tantas ganas de protegerme, por tantas ganas de demostrarme gratitud y fidelidad. Aún me cuesta creer ver que tantas niñas tengan mi nombre, que tantas mujeres me tomen como ejemplo, que tantas jóvenes se quieran parecer a mí. Reconozco que no sé qué decirles a aquellas mujeres que tienen sus maridos y novios que se han tatuado mi imagen en sus brazos o en sus pechos, y menos aun cuando esas mujeres lo aceptan y me lo dicen ellas mismas con orgullo. ¡¡Es muy emocionante para mí que me quieran tanto!! Aún hoy recuerdo cuando vino aquel hombre de Los Ángeles a verme al Houston Astrodome en febrero de 1995 por un concurso que ganó porque su esposa lo hizo participar. A propósito … ¿se acuerdan de aquel concierto, no? … Como sea, hoy quiero decirles y confesarles algo: yo le debo prácticamente la vida a todo mi público. Porque a veces uno recibe tanto que no se da cuenta del verdadero valor de las cosas hasta que uno lo ve en un gesto, en una mirada, en una actitud. No ahondaré en detalles porque no quiero dramatizar, ni quiero que lloren por mí jamás. Pero un día que recuerdo muy bien, el 31 de marzo de aquel 1995, estaba por cometer una decisión de la cual me iba a arrepentir para siempre. Estaba por salir de mi casa esa mañana y alguien me llama. Casi ni lo escucho por el apuro que llevaba. De hecho para mí fue un ruido que no entendía de dónde venía y que tampoco detenía mi marcha. Ya había subido al auto y cuando estaba por partir rápidamente, alcanzo a ver que un niño llorando me toca el brazo con su manito. Lo vi muy triste. No entendía por qué. Vi a la madre detrás rogándole al niño que no me molestara, que no me detuviera. Enseguida me di cuenta de que eran vecinos míos a los que en pocos días los iba a ver, ya que les había prometido una comida con ellos. Le pregunté al niño qué le pasaba, por qué lloraba. Y el niño me dijo que como tenía una dolencia que hacía que tuviera que irse ese mismo día a Los Ángeles a seguir su rehabilitación, no podía irse sin decirme que no podía encontrarse conmigo ese día y menos aún irse de Corpus Cristi sin despedirse de mí … En ese mismo momento me olvidé de todo lo que tenía que hacer ese día, lo invité al niño a comer ese día, y me llevé a él y a su familia a Los Ángeles para que me vieran en el concierto que debía ofrecer al otro día allí. Y de paso lo dejaría allí para que siguiera su rehabilitación … Hoy comparto con ustedes ese momento porque entendí aquel día que si yo era alguien era por mi público. Y aunque tal vez esto les parezca exagerado, él haber tomado conciencia de ello ese día me salvó la vida, literalmente hablando. Y por eso jamás me olvido de agradecer a la gente que siempre me demuestra tanto y a la que le debo todo, el Amor, la fama, la gloria, mi vida…

Una vez más quiero agradecer a José Behar, porque vio en mí algo especial y porque siempre creyó en lo que podía ofrecer, siempre me apoyó, siempre difundió mi música, siempre habló bien de mí, siempre intercedió a mi favor. Aún hoy me tengo que disculpar porque la primera vez que me vino a ver aquí mismo en San Antonio yo no tuve mejor idea que no creerle que era el presidente de la Emi Latin. Me acuerdo que era allá por 1989. Él quería contratarme para su compañía y cuando se acercó a mí para decirme que quería hablar conmigo y me mostró su tarjeta, yo sólo dije, haciéndome la entendida: “¡Sí, claro!” y seguí firmando autógrafos como si nada … Menos mal que él siempre fue paciente conmigo, siempre me entendió, fue un soporte fundamental en mi carrera musical. Por eso aquel día su perseverancia hizo que esperara a mi padre y arreglara con él una reunión al otro día para firmar el contrato. Si hubiese sido por mí, probablemente ese contrato nunca hubiese existido. Tal vez sin José Behar yo no hubiese llegado tan lejos. Él hizo posible mi sueño de mi disco en inglés. Él fue quien guardó y escuchó mis primeros demos de mis canciones en ese idioma. Él fue quien pacientemente fue convenciendo a la Emi Central de permitirme hacer mi primer disco en inglés cuando yo tenía mis primeros grandes éxitos en español. Hoy a la distancia entiendo que los directivos de la Emi se mostraran reticentes con un disco que no se sabía si iba a tener suceso cuando yo tenía asegurado mi éxito en el mercado hispano, pero más valoro que José haya entendido que era tan importante para mí tanto cumplir mi sueño como tener éxito. Por eso aquí mismo en San Antonio, como cuando logré mi primer Grammy en Los Ángeles, siempre agradecí en primer lugar, luego de mi público, al señor Behar. Porque finalmente ese disco salió, tuvo una inolvidable repercusión, me dio el éxito mundial, hoy todo el mundo me conoce por ese disco y en la actualidad tengo éxito tanto en español como en inglés. ¿Qué más puedo pedir? ¿Qué más debería hacer para devolverle tanto agradecimiento? Hoy soy feliz viéndolo como presidente de la Emi Central. Es bueno que se premie al que se arriesga, al que es audaz, al que apuesta por alguien a quien uno cree. Porque gracias a gente como José Behar hoy se promueven nuevos talentos y no se busca que todos hagan lo mismo repitiendo las mismas fórmulas. Así tendremos asegurado que las nuevas generaciones de tejanos superen lo hecho por nosotros y dejen a nuestra raza en buenas manos, cada más talentosas e innovadoras…

Quiero agradecer a mi familia. Quiero agradecer a mi padre, que me haya dado la confianza en mí misma, que haya visto en mí un talento que desconocía y que nos haya inculcado a mí y a mis hermanos la disciplina, la constancia y la dedicación. Siempre me quedaron grabadas sus enseñanzas: él me enseñó que nada era imposible, que si uno tenía voluntad y creía en lo que hacía nada ni nadie nos detendría. ¡¡Y aquí estamos!! Gracias a él supe que si nosotros nos lo proponíamos podíamos tener un éxito seguro, podíamos cumplir el sueño familiar no sólo de ganar dinero sino de ser alguien en la vida, de ser un ejemplo para los demás. Nosotros fundamos Los Dinos, la Segunda Generación. Y sabíamos que ese éxito era el viejo sueño de mi padre, que por traer comida a casa tuvo que dejar su viejo anhelo de vivir por y para la música. Hoy él puede ver con orgullo cumplido su sueño, pero también puede ver cómo cada uno de nosotros pudo lograr cumplir sus sueños personales. Aunque les parezca increíble, toda mi vida quise ser diseñadora y si hoy puedo ver mi anhelo cumplido con mi boutique Selena Etc., fue gracias a nuestro éxito en la música, a nuestra perseverancia, en dar al público lo mejor de nosotros, en entender que nadie nos regalaría nada, que todo dependía de nosotros. Sé que no es fácil. Sé que más de una vez cuestionaron a mi padre porque me mandó a cantar desde muy chica, desde que sólo tenía 8 años. ¿Pero saben una cosa? Yo busqué ese destino. Yo les confieso que por esa época estaba celosa de mi hermano porque estaba aprendiendo a tocar el bajo y sentía que mi padre sólo le prestaba atención a él. Y a mí no se me ocurrió mejor idea que aprender viejas canciones de un libro que tenía él para que se fijara en mí. ¡¡Y vaya si acaparé su atención!! Si hoy todo el mundo me valora es porque mi padre advirtió primero mi potencial para cantar. Y créanme que él se obsesionó más por verme triunfar que por lograr dinero. Si todo hubiese sido por dinero, hubiésemos sucumbido ante el primer fracaso. Siempre fuimos una familia muy unida. Siempre nos movimos con los mismos valores. Eso nos permitió no caer como tantos que tienen éxito desde muy chicos. Nosotros siempre supimos que siempre había más para dar. Nunca creímos ni nos dormimos en la fama, pues ella, como el dinero, va y viene…

Quiero agradecer a mi banda, a Los Dinos. Saben que sin ellos yo no soy nadie. Y les agradeceré de la misma manera que siempre. Por eso les volveré a decir: “Cuando Los Dinos ganan, yo gano. Cuando ellos pierden, ¡¡yo no los conozco!!” … Bromas aparte. Saben que siempre les agradeceré que siempre me hayan mimado, que siempre me hayan tolerado, que siempre hayan entendido que, antes que nada, somos una banda, y que sólo trabajando en equipo se logran los grandes objetivos. Y antes de seguir pido disculpas que no los haya nombrado antes, cuando hablé de mi padre. Es que es difícil no hablar de Los Dinos sin hablar de mi madre, de mis hermanos y de mi esposo, como también me es muy difícil no hablar de mi padre cuando tengo que hablar sobre cuándo y cómo empezó todo. Yo le agradezco a A.B. porque siempre hizo lo mejor para que la banda tuviera los mejores músicos, las mejores canciones, las mejores melodías. Le agradezco que no se haya contentado con los viejos éxitos, que buscara innovar, que se rodeara de los mejores para superarse y sacar mejores canciones. Que haya buscado ayuda en nuestro amigo Pete Astudillo, que hoy está presente y que lo felicito por su éxito con su grupo, para hacer nuestras mejores canciones en español y que en las sombras trabajara noche y día para que yo tuviera los mejores temas para cantar. Aparte, ¡¡gracias a mi hermano conocí a mi esposo!! … Les agradezco a todos por permitirme tener mi carrera solista en inglés rodeándome de otros músicos y de otros productores, mientras ellos preparaban mi material para mi carrera en español. Por suerte entendieron que yo tenía todo el año ocupado en tantas tareas y que nadie se sentiría afectado por ello. Muy por el contrario, todos entendieron su rol y todos comprendieron que todos formábamos parte del éxito. No tengo palabras para agradecer a mi hermana, Suzette, y a mi madre. Yo sé que mi hermana no quería tocar la batería cuando era niña, pero como todos terminó amando lo que estaba haciendo y hoy sin su ayuda no sólo no podía seguir con mi carrera musical, sino con la de diseño: ella lleva adelante mis negocios en Selena Etc., y preside mi fans club. Mi madre siempre estuvo conmigo, fue la persona que escuchó mis alegrías, mis tristezas, mis más hondos sentimientos en los momentos más difíciles. Siempre estuvo a mi lado poniendo su hombro para que yo apoyara mi cabeza y le confiara todo lo que sentía, anhelaba y pensaba. Me ayudó en todo, me acompañó siempre. Sé que ella sería la primera persona que sufriría si algo me pasara por mínimo que sea. ¡¡Si recuerdo cómo sufrió aquel día del Astrodome cuando me lastimé el dedo!! Sé que a ella le debo todo, pues ella sacrificó todo por nosotros. Siempre dije que quería ser como ella, y ella es mi ejemplo para brindarme ante mi público. Ella dio todo a cambio de nada. ¿Cómo no hacer lo mismo yo cuando doy un concierto en el que el público pagó la entrada para verme, gastó su dinero en mis discos, esperó horas para verme? Ella es mi mejor espejo y guía … ¿Y qué decir de mi esposo Chris? Muchos con el tiempo valoraron lo que yo hice por su amor. Pero ustedes no saben lo él que ha hecho por mí. Él es muy calladito. A veces me gustaría que hablara más, que se abriera más ante todos. Pero sabe escuchar y hablar en el momento oportuno. Él ayuda silenciosamente. Él ante todo es un gran compañero y amigo, y saben que para mí eso es lo más importante: ser amigo antes que novio o esposo … Aparte, ¡¡hay que ser muy bueno para tolerarme!! Yo soy toda energía. Soy un torbellino al que nadie detiene. ¡¡Soy puro nervio!! Menos mal que está conmigo para aplacarme con su dulzura y su tranquilidad, Sin él no sabría qué hacer. Sé que cuento con él para toda la vida. Sé que soy el Amor de su vida, como él lo es para mí… Y gracias a él tengo lo más preciado, que son mis dos hijos…


Y me quedaría toda la vida aquí agradeciendo a tanta gente … No los pienso abrumar con tantas palabras, con tantos agradecimientos. Pero si yo estoy aquí es por todos ustedes. Si yo hoy soy conocida en todo el mundo, si hoy hay gente de tantos países, de tantas culturas diferentes, que me dan tantas muestras de cariño, Amor y agradecimiento es gracias a todos ustedes que antes que nadie, y cuando no era conocida, me dieron la oportunidad. Hay gente que me pregunta: “¿Cómo vas a los TMA, cómo sigues yendo al Show de Johnny Canales o a Padrísimo a cantar cuando tienes tantos compromisos, a tantas cadenas televisivas del mundo que te ofrecerían todo el oro del mundo para que le des un minuto para una entrevista, para que les cantes en vivo aunque sea una canción?”. Tal vez el que me pregunte eso no me conoce: toda mi vida seré agradecida por la gente que apoyó a Selena y Los Dinos. Toda mi vida tendré un minutito para aquel que me dio un espacio, una oportunidad, me dio su cariño, recorrió kilómetros sólo para saludarme, para agradecerme. La vida me enseñó a ser humilde y agradecida con aquellos que me dieron tanto sin siquiera conocerme, sin siquiera saber si yo podría colmar sus expectativas. El dinero va y viene. La fama también. Pero el Amor. El Amor queda para siempre. Muchos me manifestaron que les llegué el corazón y que jamás se olvidarán de mí. Ése es el mejor premio que me llevo. Y en estos premios que llevo ganados por tantos años consecutivos veo reflejado ese noble sentimiento. Así quiero que me recuerden. Así quiero que me tengan. Así quiero que me premien. Porque les confieso: siempre tuve miedo. Siempre temí fallar. Siempre temí que no me quisiera nadie, que cuando subiera al escenario no estuviera nadie para escucharme, o que hubiera pocos que me escucharan en silencio. Y ahora que veo que todo el mundo me quiere, sólo me queda devolverles todo el Amor recibido, entregarles todo mi cariño, agradecerles de por vida, porque me dieron lo que más quise, me dieron lo que yo necesitaba. Y yo quiero llevarlos en mi corazón por siempre, como también deseo que ustedes me lleven en los suyos…


Sé que por ahí difundieron un video casero dirigido a mi banda en el que yo decía que odiaba que dijeran que era la mejor, porque no me gustaba que dijeran la verdad … Yo no sé si soy la mejor, ¡¡pero cómo detesto mentir!!


¡¡Gracias, gracias a todos!! Mil abrazos y mil besotes. ¡¡Saben que nos veremos muy pronto!!

Cuídense muchísimo. Yo también lo haré. Y les prometo que seguiré dando lo mejor, ¡¡pues aún no he hecho ni la mitad de lo que me propuesto para toda mi vida!!


(Mi querida Selena: sólo quiero reflejar tu sentimiento, sólo quiero expresar tu pensamiento. Me gustaría que estuvieras aquí para decirme si está bien o no lo que he escrito … Me gustaría abrazarte fuertemente y decirte gracias por lo que me diste, aunque no te conocí … Siempre estaré aquí para recordarte con Amor…)


Te extraña, te quiere y te recuerda…


Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)











Yo querría tener en mis manos tu destino, Selena…


¡Cómo me gustaría tener en mis manos tu destino, Selena! ¡Cómo me gustaría poder hacer algo por ti! ¡Cómo me gustaría poder verte! ¡Cómo me gustaría verte vivir tu vida! ¡Cómo me gustaría verte vivir! ¡Cómo me gustaría verte después de tantos años de disfrutar de tus éxitos! ¡Cómo me gustaría poder ver Selena Etc. en todo el mundo distribuyendo tus creaciones y que todos las compraran! ¡Cómo me gustaría ver a niñas y a adolescentes constituir un ejército de Selenas vestidas como tú, bailando como tú, expresándose como tú! ¡Cómo me gustaría ver a hombres suspirando por ti y a mujeres admirarte! ¡Cómo me gustaría verte aquí, Selena! Cómo me gustaría poder hacer eso posible! ¡Cómo me gustaría certificar que lo imposible siempre es posible!

Quisiera poder tener en mis manos tu destino, Selena, no por mí. Porque yo no quiero ser dueño de ti, yo no quiero ser el dueño de tu destino. Yo quiero tener en mis manos la posibilidad de hacer algo, de poder hacer algo por ti. Porque yo no me resigno. Yo sigo pensando. Yo sigo queriendo creer. Yo sigo pensando que te debemos algo, que podemos llenarte de felicidad y que podemos verte alguna vez bien como se debe: viva, feliz, sonriente, satisfecha. Se te ha quitado lo más preciado y yo sólo quiero tener la posibilidad de devolvértelo. Te miro, te disfruto, te admiro, y por eso mismo quiero que estés aquí … El mundo te necesita, nos haces falta, necesitamos tu energía, tus ganas de hacer y de vivir. Yo no quiero que se pierda lo que nos dejaste, tu ejemplo de vida. Yo no quiero resignarme. Yo no quiero que triunfe la mentira, la falsedad, la traición. Yo quiero que estés viva, Selena, por favor!! Yo no quiero llorar, yo no quiero despertarme cada día sin saber que no estás entre nosotros … Por eso quiero tener en mis manos tu destino, para poder traerte aquí, como cuando uno toma a una paloma herida y la cura para después echarla a volar para que haga su vida, para que sea la forjadora de su destino, para que tenga la oportunidad de vivir su ciclo de vida, como todos. Yo sólo quiero rescatarte Selena, curarte las heridas y darte la oportunidad de que vivas, de que cantes, de que ames, de que tengas éxito, de que ganes, de que aunque pierdas en alguna oportunidad tengas la oportunidad de recuperarte. Quiero verte sonreír, quiero verte retirada en tu casa cuidando de tus animales, gozando de la vida, haciendo a los demás felices y tú siendo feliz!! Yo sólo quiero torcer este cruel destino…

Veo a mi alrededor y nada es lo mismo sin ti. Tu amor, tu voz, tu personalidad, tu áurea se extrañan, se necesitan … Escucho tus canciones, te veo en cualquier concierto y me convenzo de que tú, sólo tú, Selena, puedes cantar esas canciones. Tú, sólo tú, interpretabas como nadie tus melodías. No es lo mismo que esas canciones las cante otra. Ni la mejor voz, ni la mujer más linda, ni la mejor artista podrían interpretarla mejor. Las canciones que tú cantaste, Selena, las hiciste tuyas. Les diste tu color, tu pasíón, tus sentimientos, tu calor, tu estilo. Les diste algo que pocos logran expresar: sentimiento. Tú, Selena, has puesto como nadie emoción a cada tema, a cada palabra, a cada expresión. Sólo una persona que siente lo que transmite lo puede lograr. Y ni siquiera tus propias limitaciones en el idioma fueron en ti un impedimento para poder expresarlo. Es que el Amor no tiene idioma y tú lo demostraste acabadamente … Hay muchas cantantes que saben mejor que tú el español, Selena, y sin embargo no llegan a tener ni la capacidad, ni la pasión ni el sentimiento justo para expresar lo que cantan, lo que transmiten. Es que sólo tú, Selena, podías hacernos reír, hacernos llorar, emocionarnos con cada tema, con cada interpretación. Es que para llegar al corazón de la gente hay que tener Amor, ser genuino, auténtico, cristalino. Y eso eras tú, Selena … Y por eso se te extraña tanto. Porque los que saben lo que eras entienden que nadie podrá reemplazarte, que nadie ocupará tu lugar y que tampoco pretenden que venga otra cantante a ocupar tu trono. Sólo quieren verte a ti … Sólo tú alegrarías sus corazones…

Yo querría tener en mis manos tu destino, Selena, por ti, sólo por ti ... Querría tener la posibilidad de poseer el poder para verte cumplir tu sueño de cantar en inglés. Aún hoy me conmueve verte cómo te emocionaste allá por 1993 cuando pudiste firmar tu contrato con la Emi para hacer tu disco en ese idioma, como lo anunciaste a todo el mundo con orgullo, cómo deseabas poder realizar aquello por lo que tanto luchaste, por lo que tanto soñaste … Y te fuiste en el medio de realizar tu sueño, cantando en inglés, poniendo tu dulce voz en aquellos hermosos temas ... Yo sé que no pensabas en una despedida, yo sé que estabas poniendo tu energía en ese disco. Yo sé que estabas acostumbrando a tu público a que te oyeran en ese idioma. Yo sé que esperabas mucho de ti y de Los Dinos en aquel 1995. Yo sé que no estabas quieta. Yo sé que estabas en contacto con muchos cantantes para hacer tus canciones. Sé que tenías muchos proyectos, que tenías propuestas en el cine, en la televisión, en todos los medios. Comenzabas a asomarte al mundo y ese mundo comenzaba a verte. Ese mundo comenzaba a dejar de verte como la joven artista tejana que tenía un gran éxito en la región. Ese mundo empezaba a darse cuenta de tu talento, se daba cuenta de que no eras una artista más. Ya no eras sólo el centro de atención de los medios locales. Los grandes medios se acercaban a ti atraídos por tu éxito y asombrados por el magnetismo de tu presencia. Al momento de tu partida a todos les quedaba claro de tu capacidad y de tu potencial. Por eso quiero rescatarte, Selena. Para que no te quedes a mitad de camino, para que no te quedes sólo con tu cabecita asomada. Quiero que puedas dejar tu nombre bien marcado como esa artista bilingüe que acaparó con su voz, carisma, talento y presencia la atención de todos. Yo no quiero que sólo piensen que eres el mayor exponente del mundo hispano. Yo no quiero que te consideren sólo como la Reina de la Cumbia o como la Reina del Tex Mex … Sé que a ti te halagaría eso pero no te sentirías totalmente satisfecha con esos rótulos, con esos encasillamientos, porque siempre buscabas algo más, querías ser algo más, porque eras una cantante completa y versátil. Y tú eras la mejor y tú lo sabías. Yo quiero que te recuerden como la mejor artista del mundo. Yo quiero que todo el mundo te reconozca y se te ponga a tus pies…

Yo quiero tener la posibilidad de tener el poder suficiente sólo para traerte aquí, Selena. Sabes que si se me concediera un deseo, sólo pensaría en ti. Si se me diera todo el poder del universo sólo lo utilizaría para ti. Ni todo el oro del mundo ni toda la felicidad que pudiera tener en la vida me harían feliz sin ti: no sería completa mi felicidad sin tu presencia. Yo no puedo ser feliz completamente sin ti, Selena, sin verte aquí, sin sentirte que estás aquí. No importa si no te veo todos los días. No importa si no sé de tus pasos. No importa saber si ya ha salido tu último tema. No importa saber obsesivamente en qué andas. Importa sólo saber que estás por allí feliz, con tus amplias carcajadas, empleando tu energía de cinco vidas juntas para hacer todo lo que tenías pensado hacer. No me puedo olvidar de que siempre empleabas el tiempo libre para hacer cosas, para realizar lo que te habías propuesto, para pensar en nuevas ideas para tu vida artística y personal. Tanto tiempo tuviste que postergar para cumplir con tus sueños, tanto tuviste que esperar para hacer lo que tú querías que en cuanto el éxito te vino sólo pensaste en hacer y hacer cosas, en planificar tantas otras, en ir siempre por más. No querías quedarte quieta. No te lo permitías. Como tú decías, tenías muchas cosas en la cabeza, muchos proyectos, muchos sueños que cumplir. Por eso te permitías decir que para planificar en agrandar la familia, en tener hijos, en desarrollar una vida tranquila, hogareña y normal había tiempo. Tú querías poner en acción todo aquello que tenías en mente. Tú querías liberar aquello que estaba contenido durante toda tu vida. Aquello que luego quedó trunco … Tenías sólo 23 años!! … Yo sólo quiero que tú cumplas tu sueño, que tú seas el ejemplo de que no hay que conformarse con poco, que nuestros sueños son ilimitados y que nada impide poder cumplirlos. Que es bueno estar disconforme si apenas se logró parte de todo lo que uno desea genuinamente. Tus sueños eran ilimitados, Selena y pocos pudiste cumplir, y pocas oportunidades tuviste para intentarlo … Yo quiero tener todo el poder del mundo sólo para que lo puedas intentar, para que puedas sacarte todo lo que tenías pensado, para que tengas la oportunidad de ser enteramente feliz siendo tú misma…


Nada en el mundo me pondría más feliz que el poder verte y apreciarte como la mejor cantante del mundo. Que todo el mundo te viera como tal. Porque tú eras diferente, especial. Nadie tiene lo que tú tenías. Cuando uno ve que tantos artistas de tu generación han llegado y no tú eso me apena enormemente. Cuando veo los artistas que surgen ahora a la fama, eso me hace pensar en ti y me entristece. Y no es que piense especialmente en los otros artistas, más allá de sus reales virtudes. Sólo pienso en ti. Cuando veo la generalización de los premios Grammy al crearse los Grammys latinos, pienso en el Grammy que ganaste tú en 1994, cuando sólo había una categoría de premiación para los latinos. Y tú lo ganaste en cuanto fuiste nominada. Tu propio talento podía con todo … No puedo no pensar hasta dónde podrías haber llegado, cuántos desafíos tendrías que enfrentar y cuántos ganarías. Y no importa si algunas veces te tocaría perder. Lo más importante para mí es poder ver tu propia evolución, cómo se construía tu camino para convertirte en simplemente la mejor. Siempre me pregunté cómo sería la reacción de todo el mundo cuando saliera tu disco en inglés, cómo sería la reacción del público anglosajón, cómo lo tomaría el público hispano. Siempre me pregunté cómo hubiese sido realmente el disco “Dreaming of you”: ¿se hubiese terminado titulando así?; ¿cuál hubiese sido el tema principal?; ¿cómo sería el contenido definitivo del disco? Siempre me imaginé verte en enero de 1996 viendo la reacción del mundo ante tu disco y allí definir tu carrera como una artista consagrada mundialmente. Me hubiese gustado ver qué rumbo tomaría. Si seguirías siendo la gran artista latina o te convertirías en una artista angloparlante, o si harías las dos cosas al mismo tiempo. Y más allá de tu decisión, querría verte en esa instancia, querría verte en esa situación. Querría que ante mi sola mención de mis deseos hacia ti, Selena, éstos se hicieran realidad. Ya no quiero verte como una promesa mundial. Yo quiero verte como una realidad. Porque yo no dudo de que hoy, Selena, serías por lejos esa artista mundial tan querida, tan famosa, tan soñada. Yo querría tener todo el poder del mundo para que tú lo puedas vivir, para que certifiques que se ha cumplido o no aquello que tanto soñaste. Y que si no fuera así, siguieras intentándolo, siguieras soñando, siguieras volcando toda tu energía para hacer lo que tanto querías, lo que tanto anhelabas…

Yo sé que las verdaderas personas se demuestran cuando tienen el poder en sus manos … Se pueden transformar en personas muy peligrosas. Pueden ser personas impredecibles … Yo querría tener ese poder. Yo querría tener ese riesgo, ese desafío, esa tentación … para después sólo utilizarlo para ti, Selena. Y después, después desecharlo, tirarlo, dejarlo lejos del alcance de la codicia de todo el mundo, incluso de la mía. Yo sólo quiero tener todo el poder del mundo para darte la vida, Selena, para que tengas tu oportunidad, para que seas feliz, para que seas lo que quieras ser, para que seas lo que tengas que ser. Alguien te quitó esa oportunidad. Yo sólo quiero devolvértela. Y si pudiera lograrlo, no querría que me lo agradecieras. Ni siquiera querría que supieras de mi existencia … para no condicionarte, para que no pienses que tendrías que hacer algo para gratificación de los demás. Yo querría tener todo el poder del mundo para ver qué harías con tu vida. Cómo seguirías con tu vida artística. Si seguirías con tu canto, si te dedicarías a pleno con tu carrera de diseñadora, si te volcarías a tu carrera como actriz, si te retirarías de todo para dedicarte a tu vida doméstica con tu esposo, a tener hijos, a gozar con tus animales, a contemplar el paso del tiempo con felicidad gozando de cada minuto de tu vida, como lo has hecho siempre. Eso no tiene precio, eso es impagable. Y eso quiero que sientas, Selena. El poder que querría tener es para que tú vivas, para que tú aproveches el valor de estar vivo. Nadie más que tú merecía eso. Nadie más que tú sabría valorar esas cosas. Hay tanta gente en la vida que no valora eso. Hay tanta gente en la vida que no lo sabe utilizar o lo emplea para el mal. ¿Cómo puede estar el mundo tranquilo sin darte esa oportunidad? ¿Cómo no desear poder hacer algo por ti? ¿Cómo no poder querer tener todo el poder del mundo para que vivas? ¿Cómo no pagar el precio que sea para que tú aproveches la vida como pocos saben apreciarla? ¿Cómo no hacer algo para que vivas y sientas el Amor que sólo tú sabías dar, cómo sólo tú merecías recibir, cómo sólo tú merecías tener?


Yo sólo quiero tener esa posibilidad y no tengo ningún inconveniente en pagar el precio que sea ni correr los riesgos que tenga que correr … Todo sea por ti, Selena. Todo sea por lo talentosa artista que eras. Todo sea por tu voz. Todo sea por lo excelente persona que fuiste. Todo sea por ver a alguien que merecía como nadie ser feliz. Y ese alguien eras tú, Selena. Todo sea por verte recibiendo el Amor de todo el mundo. Todo sea porque te veas y te sientas la mejor. Todo sea porque lo que tenga que ser. Todo sea por tu Amor…


Y con mi puño de mi mano derecha en el pecho, con el dedo índice de mi otra mano apuntando al cielo y con mi corazón que te pertenece, sólo espero poder tener esa posibilidad, Selena. Yo no me resigno. Yo creo en los milagros. Para mí nada es imposible. Para mí tú eres la mejor. Y todo lo que haga por ti siempre será poco en agradecimiento por todo lo que tú has hecho para la felicidad de todo el mundo. Es hora de que todos hagamos algo por tu felicidad, Selena…


Te quiere por siempre y para siempre…


Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)













Mi corazón es tuyo, Selena…




Cada vez que te veo, Selena, cada vez que aprecio tus conciertos, cada día que me apresto a verte una y otra vez una sensación de vacío y de dolor se apodera de mi cuerpo y atormenta mi alma. Es que la sensación de alegría al verte en un video dura exactamente ese tiempo que duran esas imágenes. Sé que se puede vivir con esas imágenes, sé que puedo verlas una y otra vez … Sé que puedo vivir contento apreciándolas … ¿Pero sabes Selena? No alcanza. No. No alcanza. Es que faltas tú, Selena, faltas tú para darle vida, color y sentido a esas imágenes. Faltas tú para darnos esa alegría que nos falta. Falta tu Amor para sentirnos plenos y vitales. Ningún disco, ningún cd, ningún dvd podrá reproducir fielmente todo lo que has transmitido. Nada podrá reemplazarte. Es una quimera pensar que podamos buscar otra artista a la que podamos depositar el mismo cariño que podíamos expresártelo a ti. Porque nadie es como tú, Selena. Nadie puede interpretar ni transmitir los sentimientos como lo hacías tú. Y cuando uno queda subyugado por tu presencia nadie piensa en depositar la admiración en otro artista. Y cuando uno te ve en cualquier circunstancia nos falta el poder expresarte lo tanto que te queremos…

Por eso, mi querida Selena, me niego a pensar que te has ido para siempre. Te veo y no puedo creer que no estés. Siempre me levantaré con la esperanza de encontrarte y de decirte lo que eres para mí, lo que has generado en tantas personas. Sé que lo sabías. Sé que aun así te asombrabas ante semejante muestra de cariño. Sé que te emocionabas cuando masivamente tu público te expresaba todo su Amor. Basta con verte al final de aquel mítico concierto del Astrodome, en el epílogo del tema “Como la Flor”, y observar la expresión en tu rostro, el ver morderte los labios de emoción, el sentir tanto Amor. Sé que siempre lo buscaste. Sé que siempre lo quisiste. Sé que siempre lo necesitaste. Y el hecho de poder vivirlo y de sentirlo después de tanto esfuerzo, de tantos sinsabores, de tantas privaciones, de tantos padecimientos era la mejor recompensa. Tal vez no pudiste vivir plenamente tu niñez, gozar de tu adolescencia, tal vez no pudiste expresar todo lo que sentías en buena parte de tu vida. Tal vez hubieses preferido recibir Amor de otra manera. Pero ahora que veías lo que habías generado apreciabas que acaso no estuvo tan mal haber hecho ese recorrido. Que aquella decisión de mostrarle a tu padre cómo cantabas aquellas canciones fue una gran idea. Había cambiado tu vida, te la alteró. No hiciste la vida normal de tantos otros, pero supiste ganarte el Amor de mucha gente … Y ese Amor era lo que siempre habías querido recibir…

Y cuando recuerdo esa expresión, cuando retengo en mi mente esa imagen, ese rostro, esa emoción, yo no quiero que dejes de sentir eso. Yo quiero recrear todos los días aquellas manifestaciones de Amor y de cariño. Yo quiero que sigas recibiendo ese Amor. Yo quiero que lo sientas. Yo quiero que lo vivas. Yo quiero que sepas que no se te ha olvidado. Yo quiero que sepas que jamás se te olvidará. Yo quiero que sepas que eres la mejor. Yo quiero que sepas que no tienes reemplazante. Yo quiero que sepas que luego de tu partida más y más gente te ha descubierto y comenzó a admirarte aun en tu ausencia. Quiero que sepas que aún con el paso del tiempo sigues generando alegría, sigues provocando que la gente cante tus canciones, sigues generando admiración. Y tal vez por eso la gente te sigue llorando, te sigue buscando, te sigue extrañando … y sigue esperando que nada de lo que haya ocurrido aquel nefasto día sea cierto…

Y mientras tanto, ¿qué hacer por ti? ¿Se supone que ya nada podré hacer? ¿Se supone que sólo me queda escuchar tus canciones y dejar que el paso del tiempo haga lo suyo? ¿Dejaré que tu nombre sea uno más que ha pasado en este mundo y nada más? Si has dejado semejante huella en mi corazón, en mi vida, en mi Alma, ¿me quedaré sólo observándote y seguir mi vida como si nada? ¿Permitiré que esa realidad de un tango que dice “tus ojos se cerraron y el mundo sigue andando” me resigne a llorarte y a mirar con desesperanza este mundo? No, mi querida Selena. No se han cerrado tus ojos y el mundo jamás seguirá andando sin ti. Y si es necesario, ofreceré mi corazón para que eso sea posible. Porque mi corazón es tuyo. Y te lo ofrendaré todos los días para que estés aquí con nosotros. Para acompañarte y para que nos acompañes. Para que nos alegres y estés contenta. Para que sepas que nunca estarás sola. Para que sepas que tienes todo nuestro Amor…

Por eso, mi querida Selena: ten por seguro que jamás te abandonaré, jamás dejaré de quererte, de admirarte, de estar contigo siempre, para acompañarte siempre. No importa si no podré verte nunca. No importa si el fruto de mi esfuerzo y de mi dedicación no tenga su recompensa ni me de la posibilidad de verte, de decirte lo que yo siento por ti. Importa sí que todo lo que haga por ti sea una muestra de Amor y de agradecimiento a todo lo que nos has dejado para que estés siempre en nuestras vidas, para que tu ejemplo de Amor, de dedicación y de esfuerzo viva en cada uno de nosotros. Mi corazón es tuyo, Selena, sólo tuyo. Donde quiera que estés quiero que lo sepas, no por mí, que nada importa, sino por ti, para que sepas que siempre estaré contigo y para que nunca, nunca estés sola…

Mi corazón es tuyo, Selena. Te lo entregué el primer día en que te vi, en el que pude apreciarte como artista, como cantante, como mujer. No habrá nadie como tú, porque tú eras totalmente personal en el escenario. No te dejabas llevar por lo que ejecutivos o asesores de marketing pudieran decirte qué era lo que el público quería o le gustaba. Tú, Selena, sabías mejor que nadie lo que sentía tu gente, pues tú eras uno de ellos. Por suerte nunca necesitaste cambiar de imagen para ser más vendible para el gran público. Por suerte nunca tuviste que ser artificial, banal, dejar de ser auténtica para que el gran público te aceptara. Por suerte, Selena, tú te expresabas en el escenario tal cual eras en tu vida todos los días. Y el público te aceptó tal cual te mostrabas, y siempre te quiso y te creyó. Por suerte, Selena, siempre mantuviste ese espíritu, ese Amor, ese esfuerzo, ese profesionalismo que tuviste desde cuando tenías que ir de pueblo en pueblo a mostrar todo tu talento, todo tu potencial, todo tu canto. Nunca olvidaste tus raíces, nunca olvidaste de dónde venías, nunca olvidaste tus sueños y tus anhelos. Y la gente siempre te lo agradeció cada vez que se lo demostraste en cada concierto, en cada presentación, en cada muestra de tu Amor…

Mi corazón es tuyo, Selena. Y siempre estaré aquí para demostrártelo, para poder expresar lo que me has dejado, para agradecerte por tanto talento. Contigo no hay medias tintas. Cuando se te quiere, se te entrega todo, se te dedica todo, te expresa todo tu cariño. Es nuestra mejor forma de tributarte. Recordarte de la manera en la que tú les dedicabas a todos lo mejor de ti en el escenario. Es lo mínimo que podemos hacer por ti y siempre sabremos que podemos dar mucho más si tenemos el Amor, las ganas, la energía y la voluntad que tenías en cada acto de tu vida…

Por eso quiero ofrendarte mi corazón. Querría que a través de él pudieras vivir lo que te ha faltado. Quisiera sentir que algún día volverás, Selena … No sabes lo falta que nos haces!! A veces miro con desazón que cada vez se aprecia menos el talento y se aprecia más la imagen, la repetición de las mismas palabras, los mismos gestos. No hay emoción. Muchos artistas prefieren más contar sus cosas personales para adquirir notoriedad. Hoy se grita por cualquier cosa. La gente se acostumbró a pedir y a recibir lo mismo. Ya no se espera sorpresa. Tal vez no se quiere sorpresa. Y a veces la gran novedad pasa por cambiar de imagen o mostrarse de una manera distinta pero no de un modo muy diferente de lo que ofrecen otros artistas. Y allí me digo: “¿cómo no está Selena en este mundo? ¿Qué haría Selena si estuviera entre nosotros? ¿Sería una más? ¿Nos sorprendería con mostrarnos sólo una imagen artificial, no auténtica? ¿Podría dejar Selena de ser ella misma? ¿Podría olvidar sus raíces? ¿Se conformaría con dar lo mínimo indispensable para mantener la popularidad? ¿No nos sorprendería con algo personal? ¿No nos daría algo más de lo que nosotros mismos esperamos? ¿No seguiría siendo la misma tanto en el escenario como fuera de él?” Estoy seguro de que así sería como no dudo de que hoy sería por lejos la N° 1. Por eso cada vez que sale un cd o un dvd genera tanta expectativa. Por eso cada artista sólo tiene palabras de elogio y de agradecimiento. Por eso se la extraña tanto…
Alguna vez alguien cantó “¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón”. Y eso es lo que te ofrezco Selena. Yo no puedo dejar de exteriorizar mis sentimientos hacia ti. Yo no puedo dejar de evocarte. Yo no puedo dejar de recordarte. Yo no puedo dejar de expresarte mis palabras de admiración, de dolor, de alegría y de extrañeza. Podré evocarte recordando cada concierto, cada forma particular de interpretar cada canción como sólo tú podías hacerlo. Podré mostrar tu forma peculiar de moverte en el escenario. Podré resaltar tu voz, tu carisma, tu talento, tu personalidad, tu increíble presencia. Podré evocarte con sumo dolor, podré hasta ser muy crudo en mis manifestaciones ante el vacío de tu ausencia y en tu forma de decirnos adiós. Podré ser reiterativo, podré ser exagerado, podré ser pesimista, podré ser obsesivo, podré ser realista, podré ser un iluso. También podré saber recordarte con mis mejores palabras de afecto, de cariño, de Amor, de admiración. Pero lo que nunca dejaré de hacer es de decirte lo que me has generado, la marca que dejaste en nuestros corazones. Nunca dejaré de agradecerte. Cuando uno te ve cantar uno no puedo dejar de decir: “Qué lindo cantaba. Qué hermoso era verla cantar. Qué bella era!!”. Y si alguien generaba todo eso, nunca puede ser abandonado. Porque tú, Selena, eras una excelente artista y una mejor persona. Sólo una buena persona genera tanto Amor. Si lo tuyo, Selena, hubiese sido una voz, la emoción se circunscribiría a un disco, a un cd, a un concierto, y el Amor acabaría cuando todo ello concluyera. Pero contigo, Selena, no se acaba allí. La gente, antes, durante y después, siempre necesitó expresarte su cariño, siempre necesitó decirte que contaras con ellos, que siempre estarían dispuestos a cuidarte, a protegerte, a dar todo por ti. El que sabe lo que tú eras no piensa que sólo eras una linda voz que cantaba hermosas canciones. El que sabe todo lo que tú habías logrado no se planteará nunca ni pensará jamás que tu gran logro se produjo luego de aquel nefasto día. El que piensa eso, aun de buena fe, ignora tu pasado, ignora lo que habías logrado, ignora el sentimiento de tu gente, creen que el sensacionalismo genera Amor y popularidad. Nada tan errado. Lo que tú generaste sólo lo saben tú y los que te queremos, nadie más…

Y por todo ello y porque yo te quiero, Selena, sé que los homenajes cuando hay este sentimiento, no se hacen sólo en fechas determinadas. No sólo se te quiere en determinadas momentos. No nos acordamos de ti sólo en aquellos días inolvidables. El que realmente te quiere nunca abandonaría aquello que tú construiste con tanto Amor. Los que te queremos de verdad jamás abandonaríamos tus sueños, haríamos lo indecible por tributarte. Porque el que verdaderamente te quiere piensa y siente que estás aquí con nosotros esperando sin necesidad de decirlo que nosotros demos por ti del mismo modo que tú diste por nosotros. No basta con recordarte cada tanto. No alcanza con desempolvar cada tanto tus imágenes, fotos y canciones. Alcanza si todos los días te homenajeamos, si todos los días damos vida a tu obra, si todos los días hacemos que sea un día más de tu vida, si todos los días mantenemos la ilusión de verte, si todos los días somos capaces de darte nuestro Amor para tributarte con cariño y admiración. Si realmente te queremos, Selena, haríamos eso y mucho más sin pensar que es algo que se lleva el viento. Es como ofrecer el Amor a alguien que tal vez nunca nos corresponda. Cuando uno quiere no piensa en eso, no piensa en devoluciones. Da sin esperar por Amor. No piensa en esfuerzos, no piensa en costos ni en beneficios. Cuando uno te quiere, Selena, sólo piensa en ponerte en el lugar que te mereces, en el lugar en el que siempre estuviste, en el lugar que nunca debes abandonar, en el lugar en el que te tiene la gente, en el lugar que ningún ranking de popularidad podrá registrar…
Cuando te veo, Selena, me pregunto por qué no estás aquí y vivo preguntándome, como desde la primera vez que escuché tu nombre, si todo esto es cierto, si todo esto es verdad. Pero no me quedo con los brazos cruzados esperando una respuesta. Tal vez al principio haya creído que con encontrar esa respuesta podía respirar tranquilo e irme a mi casa con todas mis preguntas respondidas. Nunca logré tener todas las respuestas a mis inquietudes. Sé que nunca las hallaré. Pero tampoco hoy me desvive ello. Desde que te conocí, Selena, desde que entré a tu mundo, desde que pude ver tu áurea, tu ángel, tu Amor, tu propia vida, tus sentimientos, tu pasión en el escenario, nada fue lo mismo para mí. Me conquistaste aun en tu ausencia y yo te entregué mi corazón. Sabes bien que puedes hacer de él lo que quieras. Sabes bien que siempre te esperaré. Y aunque no aparezcas nunca, no dejaré de expresarte mis sentimientos, de entregarte mi vida, de entregar mi Alma por tu recuerdo. Y no importa si yo no vea los frutos de mi esfuerzo. No importa si no pueda verte jamás. Me alegraría que mi esfuerzo sirva para que nunca nadie se olvide de ti, para que todo el mundo te tribute y te extrañe, y para que algún día te decidas y vuelvas, aunque yo ya no esté para verlo, aunque ya no esté para apreciarlo … Nada me haría más feliz de saber que eso algún día ocurrirá. Nada me haría más feliz de verte que estás aquí para sorprendernos una vez más…

Mi corazón es tuyo, Selena. No lo dudes, No temas. Tómalo. Vive a través de él. Úsalo para alegría de todos nosotros, utilízalo para un mundo que tanto te necesita…

Te quiere mucho, te extraña horrores, te necesita tanto…

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)