30 de noviembre de 2020
Todo ha cambiado al conocerte, Selena...
Quería lo que ya no podía lograr…
Buscaba aquello que no me animé a encontrar en su
momento…
No podía superar las frustraciones…
Mi autoestima siempre estuvo por el piso…
Por más que hubiera gente que me quisiera, yo no lo podía
creer…
¿Quién podría querer a alguien que no había hecho nunca algo
bueno?
Quería los grandes objetivos pero no podía dar el primer
paso…
El solo pensar en el primer paso me desmoronaba….
No lo podría hacer…
Mi familia, mi entorno, mis amigos, mis compañeros de
colegio, de trabajo y de estudios no supieron valorarme, me descalificaron,
destruyeron la poca estima que tenía…
Pero también es cierto que no supe valorarme … Ni supe
mostrarme … No supe quererme…
¿Cómo me iban a quererme, valorarme y respetarme si yo no
lo hacía tampoco?
Me costó mucho tiempo darme cuenta de ello…
Y cuando me di cuenta mi vida cambió para siempre…
Me di cuenta … cuando conocí a Selena … de un modo
accidental…
Y lo que para mí al principio era la triste historia de
una mujer que tenía todo para llegar a lo más alto y que todos sus sueños se
derrumbaron por el accionar de una psicópata, terminó siendo el inicio de una
nueva vida para mí…
Al principio me atormentaba y me atraía el hecho de
averiguar la historia de Selena…
De eso que pudo haber sido y no pudo ser…
Selena podría haber sido y no llegó a ser…
Era como yo … Podría haber sido, pero nunca fui…
Ni lo intenté…
Y en esa diferencia logré entender por qué Selena cambió
mi vida…
Porque no es cierto en definitiva que Selena no pudo ser…
Tal vez Selena podría haber llegado más lejos…
Selena apenas pudo asomarse a la fama y a una vida plena
en la que cumpliría cada uno de los sueños postergados…
Selena debió haber llegado más lejos…
¿Y no llegó muy lejos, acaso?
A veces creemos que el llegar es el éxito, la fama, los
premios, los discos vendidos, los records de asistencias a conciertos, el tener
dinero, que todo el mundo admire y envidie lo logrado…
Pero en realidad se llega también cuando todo el mundo te
quiere, te respeta, te valora como persona, te recuerda por lo que fuiste,
quiere demostrarte todo su afecto…
Y Selena lo logró holgadamente con tan sólo 23, casi 24
años…
Selena era un ser muy querido por la gente. No sólo era un
par de hits…
Me di cuenta de todo ello cuando empecé a cambiar de
actitud, cuando empecé a valorar cada pequeño logro, cuando empecé a quererme,
cuando empecé a mostrarme como quería, cuando comencé a aceptar la opinión de
los demás sin que ello me condicionara…
Y todo eso fue a gracias a Selena…
Con sólo adentrarme en su vida, entendí la mía … Cuando
vi el valor de Selena para superar cada obstáculo, cómo a pesar del mensaje de
esta humanidad exitista, ella siempre antepuso los valores del talento, del
esfuerzo, de la perseverancia, de la verdad, de la autenticidad, del trabajo y
de la bondad, uno comprende que se puede a pesar de todo…
Si uno quiere que las cosas cambien, uno debe cambiar
primero…
Si no desea que lo quieran , debe quererse uno primero…
Me veo cómo era antes … Siento que ya no me reconozco…
Y cuando los demás lo notan, uno nota no sólo que ha
cambiado, sino que ha mejorado…
A Selena le debo todo…
Por eso, para mí Selena no es sólo lo que logró, sino lo
que transmitió…
Selena era por sobre todo una excelente persona con
grandes valores…
Se me dirá que al final siguiendo ese camino, se termina
como terminó Selena…
Se me dirá que no vale la pena ser como Selena, porque la
humanidad te devora con sus otros valores impuestos…
Yo creo que hay que saber marcar la diferencia … Ser como
queremos ser a pesar de los resultados…
Y con el trabajo, la perseverancia, la dignidad, el
talento y la autenticidad de Selena todo cambiará…
Ayer Selena … Hoy yo … Mañana otros…
A la larga serán todos…
Y el mundo será diferente…
Y será como Selena … De eso no tengo dudas…
Me acuerdo de Selena cuando ganó el premio a la mejor
cantante méxico-americana en Premios Lo Nuestro 1993…
Lo que más me impacta es su emoción al enterarse de que
lo había ganado…
Todo lo demás es parte de lo mismo … La persona que
anuncia el premio, la persona que se lo da, el público que aplaude…
Yo me quedo con la imagen de esa Selena emocionada…
De esa joven mujer que sintió que estaba logrando algo
importante después de tanto esfuerzo…
Yo me quedo con esa imagen de Selena. Porque esa es la
Selena que cambió mi vida…
Ahora me acepto como soy, sonrío, valoro cada pequeño
logro de mi vida … Me alegro poder disfrutar de cada momento…
Estoy orgulloso de lo que soy, a pesar de que logre
mucho, poco o nada…
Estoy orgulloso de mí gracias a Selena…
Hoy soy una persona feliz…
(Por eso, Selena, te estaré agradecido siempre. Has
logrado mucho más de lo que crees. Has cambiado la vida de mucha gente, les ha
dado un nuevo sentido a la vida, le has transmitido la idea de que se puede ser
feliz a pesar de todo. Nos diste a cada uno el camino para transitarlo a pesar
de todos los obstáculos que la vida nos da. Nos diste un sentido. Nos diste un
motivo. Si lo deseamos, nadie nos detendrá … y todo será posible…)
Te quiere mucho…
Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)
Dios se acordó de ti, Selena...
Diego no podía creer lo que estaba viendo. Se le había
ocurrido ir, en uno de los descansos del entrenamiento previos al inicio del
Mundial 1994, a ver los ensayos de la fiesta de inauguración del certamen. Por
supuesto que le dijeron que no podía. Pero a Diego no se le podía decir que no
… Además, Diego sentía que no iba a vivir mucho más momentos como esos. Y cada
tanto sentía que las cosas iban a terminar mal, como venía sucediendo
sistemáticamente desde que él y su selección habían dejado a Italia fuera de su
mundial en 1990. Sentía que lo esperaban en Estados Unidos con los brazos
abiertos … Pero para abrazarlo como el oso … Sentía que iba a caer en otra
trampa … Y no quería irse triste de allí … en su última vez…
“¿Pero quién es la que patea los penales? Esa mujer no
tiene ni idea. ¡¡Va a ser un papelón!!”, decía indignado Diego. La mujer debía
patear una pelota simulando que ejecutaba un penal y al ingresar el arco, este
se abría en dos para dar paso al siguiente número musical. Lo que sucedía es
que la mujer le erraba al arco, lo cual ponía en ridículo la puesta en escena.
“¿Quién es? ¿Diana Ross? ¡¡Pero no!! ¡¡Ahí está el error!! Hay que traer a otra
cantante. Yo conozco a una artista que lo puede hacer mejor…”
El entorno de Diego se quedó helado. No sabían si
preguntar o hacerse los distraídos para no enfrentar lo que estaba pasando por
la cabeza de Diego … Porque a Diego no se le puede decir que no...
“¡¡Selena!! ¡¡Hay que traer a Selena!! ¿Cómo que no la
conocen? ¿Pero qué esperan estos yankees para poner a una latina en sus
principales fiestas? ¿Hasta cuándo las van a postergar? Con Selena estas cosas
no podrían pasar y si sucedieran, ella tendría la gracia para transformar el
papelón en una muestra de ingenio… ¡¡Con esa mujer no van a llegar a ningún
lado!! ¡¡Vamos!! ¡¡Hay que ir a buscar a Selena!! ¡¡Preparen todo que me hago una
escapada a donde vive!!”
Sus compañeros de Selección trataron de hacerle ver lo
peligroso de hacer una cosa así. Sus amigos, asistentes y representantes
trataban de hacerle ver que era un esfuerzo inútil intentarlo. Que le generaría
problemas. Que lo podrían sancionar…
Pero Diego estaba decidido…
Y a Diego no se le podía decir que no…
Les dijo a sus amigos que le consiguieran la dirección de
la casa, mientras les hablaba a los principales referentes de la Selección para
que utilizaran todas las estratagemas para distraer al cuerpo técnico mientras
él estuviera afuera … Todos asintieron resignadamente … Diego estaba decidido y
en esos casos era mejor acompañarlo que desairarlo … Cuando supo que debía ir
hasta Corpus Christi les dijo a todos: “Me voy en un rato. Supongo que caeré al
atardecer … Cúbranme … Digan que salí a dar una vuelta … Luego digan que me
retrasé con una compra … Digan que me perdí, pero que ya regreso … ¡¡Digan lo
que sea!! Yo les avisaré cuando tenga novedades … Yo mañana vengo con Selena … ¡¡Eso
sí que lo prometo!!”.
“¿No se te ocurrió pensar que por ahí de nada va a servir
eso? ¿Que aunque lo logres no podrás cambiar el destino de la organización? ¿Que
no podrás sacar a Diana Ross de la ceremonia inaugural? ¿Que nadie aceptará a
Selena? ¿Que…”, dijo uno de sus amigos hasta que una sonrisa y mírada típica de
Diego lo interrumpió…
No pudo evitar que Diego se fuera…
Diego hacía lo que quería…
Lo que se le cruzaba por la cabeza debía cumplirse…
Y los demás … No le dirían que no…
Les había dado tantas alegrías … Había dado tanto por
ellos…
Diego sabía que por eso mismo nadie lo detendría…
Como que la persona a quien iría a buscar era un poco
como él…
Y Selena tampoco le diría que no…
Diego llegó a la noche. Titubeó un poco. Pero ya estaba
allí. Además, había estado tanto tiempo viajando que ahora no podría echarse
atrás … Estacionó el auto y se encaminó a la puerta de la casa de Selena …
Respiró hondo y tocó el timbre … No sabía con qué se encontraría ni cómo lo
iban a recibir … Recién allí reparó en el detalle de si acaso Selena sabría
quién es … ¿Y si no lo reconoce? ¿Y si lo echaba sin más por tratarse de un
“intruso”? De pronto se iluminó su cara … La puerta se abrió de par en par …
Era Selena…
“¡¡Pero Diego!! Qué alegría verte!! ¿Pero qué haces aquí?
¿No deberías estar con tu seleccionado? ¡¡Pasa, pasa!! ¡¡Es un honor que estés
aquí!! Pasa y explícame … ¿No buscas a otra persona y te equivocaste de casa,
no?”. Selena echó a reír a carcajadas. Diego también …
Diego entendió que a Selena tampoco se le podía decir que
no…
Selena escuchó el plan de Diego … Ella dijo que no había
manera de que pudiera estar allí … Además, ella seguro pateaba los penales peor
que Diana Ross … Diego la persuadió. Le dijo que lo tenía todo planeado y
hablado. Y en cuanto a los penales … Diego fue a buscar una pelota a su auto …
Le pidió permiso a Selena para ir al jardín de su casa … Y allí fueron…
“Mira, Selena … Tienes que pegarle así…”. Y le mostraba
su empeine y cómo tocar la pelota con suavidad para que colocara la pelota donde
quisiera … Selena lo intentó … Al principio, fallidamente … Luego bien. Más
tarde, perfectamente … Diego saltaba excitadamente y festejaba cada acierto de
Selena como si fuera los goles de la final en 1986 en México … Al rato, luego
de festejar y de gritar con cada logro, Selena le dijo: “¿Pero tú crees que con
eso alcanza? ¿Y si fallo en el momento crucial? ¿Y si todo sale mal? ¿Cómo van
a reaccionar? ¿Qué haré? Dime Diego. No estarás allí para explicarles y
solucionarlo … ¿No crees que es una locura? … ¿No crees que es mejor desistir?”.
“Mira Selena. Creo que no tienes dimensión de lo que
significas en tu país y para muchos latinos … ¡¡Mírame!! ¡¡Estoy aquí en tu
casa!! ¡¡No tú en la mía!! ¡¡Yo te vine a buscar!! … La gente te ama … Y si le
erras al arco … Tú te reirás a carcajadas … Y el público lo hará contigo … ¡¡No
te preocupes!! Ven conmigo … ¡¡Demostremos a estos gringos que nosotros somos
más y podemos!! ¡¡Vamos Selena!! Está el mundo esperándote…”, le dijo un
confiado Diego sin imaginar cómo haría para que todo fuera posible … Ya vería
qué hacer … Diego es argentino, y los argentinos saben lo que es actuar sin
saber lo que podría pasar después y esperando el milagro de que todo vaya a
salir bien … Dios es argentino, el papa es argentino … Dios nos salvará … Una
vez más…
Llegaron a Boston muy temprano … Le pidió a Selena que
esperara un poquito para “ultimar detalles” … Diego tenía que ver cómo estaba
todo y tener una idea de lo que podría hacer … Para su sorpresa se encontró con
que no sólo todos ya sabían lo que había hecho, sino que su representante, al
saber de lo que estaba haciendo Diego por sus amigos, se contactó con la
organización y esta le dio el consentimiento para que Selena tomara el lugar de
Diana Ross. Que esta no tendría inconveniente de hacerse a un lado de la
ceremonia con tal de no seguir con esa tortura … No tuvo tiempo de agradecer …
Trajo a Selena y le dio la novedad de que asistiría a la fiesta de inauguración
del Mundial en Chicago. Y le dijo que durante unos días estuviera allí para
practicar los penales y que se trajera a su familia, o que fuera preparándose a
ir a Chicago para verla en acción. Selena estaba contentísima y no sabía cómo
agradecerle…
“Yo estoy agradecido, Selena… Solo haz lo tuyo y con eso
todos seremos felices…”, le dijo Diego…
Fueron un par de días en los que fue todo alegría, risas
y mucha emoción. Diego y Selena sentían que algo había cambiado en sus vidas
para siempre … Cuando llegó el momento de la partida de Selena, Diego se
acercó:
“Estaré observándote. No sé cuándo te veré después.
Espero que pronto. Eso sí. Estuve pensando … No sé si corresponde … Pero cuando
seas muy famosa, cuida de tu entorno … No todo es como te lo pintan. Y no todos
se muestran como realmente son. Siempre debes estar atenta a ello. Y cuando
veas algo nocivo, aléjate. No insistas. Es mejor deshacerte de lo que puede
hacerte daño en vez de repararlo, porque en tu intento tal vez salgas
lastimada. Valora la fidelidad, los pequeños gestos de bondad y los que te dan
una mano en la mala. Porque en la buena están todos. Espero que tomes a bien
este consejo y no te sientas molesta ... Es que te lo digo por experiencia…”
“Mi Diego. Haz hecho el gesto más hermoso que he
recibido. ¡¡Es como si Dios hubiese venido a verme para ofrecerme sus servicios
personalmente!! Te estaré eternamente agradecida. ¿Y sabes qué? Yo siento que
nuestras vidas han cambiado para siempre. Que nos veremos muy seguido y que
nuestros destinos nos encontrará muchas veces en distintas partes del mundo. Yo
sé que será así. ¿No lo crees?”, le dijo Selena…
“Lo será”, le contestó Diego…
“¡¡Pues que así sea!!”, gritó Selena y echó una de sus
famosas carcajadas…
Diego y Selena se abrazaron … Y supo que vivirían largo
tiempo felices, famosos y plenos … Ya nada los detendría … Y así sería … Pues
así lo quiso Dios…
(Se nos fue Selena hace tiempo. Diego hace muy poquito.
Ambos hicieron felices a pueblos enteros. Ambos no tenían nada cuando eran
chicos. Ambos tuvieron que trabajar duro para poder sobrevivir y seguir
adelante. Ambos fueron admirados por lo que han hecho y por sus logros. Pero
por sobre todo fueron amados por lo que eran … Porque eran trabajadores,
honestos, responsables, talentosos, auténticos. Y la gente los quería así.
Porque eran ambos uno más del pueblo que habían llegado a lo más alto y jamás
renegaron de sus orígenes. Y ambos tuvieron ese final triste, tan propio de la
gente que dejó todo por su pueblo y que vive en la memoria de él.)
Por eso, siempre te recordaré, Selena. Porque tú nos
representaste con tu trabajo, tu Amor y por el respeto a tu pueblo … Como Diego…
Te quiere mucho…
(Buenos Aires, Argentina)