Este día me acordé de ti...

 30 de septiembre de 2020



Sólo los quiero juntos en mi recuerdo...


Qué triste me pone todo en estos últimos tiempos por lo que veo que pasa ahí abajo…

Mi familia peleándose por cosas absurdas…

Mi familia peleándose por mí…

Yo ya no estoy…

Pero si estuviera allí…

Hermana: tú sabes cómo nuestro padre se enteró de mi relación con Chris…

Sabes que me molesté mucho contigo, sobre todo porque jamás entendí por qué lo hiciste…

O tal vez lo supe, pero me costaba comprenderlo…

¿Pero viste que haya tomado la decisión de no hablarte nunca más, de sacarte de mi vida, de alejarme para siempre de ti?

No lo hice. Traté de entenderte. No de justificarte. Y traté de sacar lo positivo de nuestra relación…

Porque aunque después de aquel incidente nada me fue fácil, siempre recordé que éramos una familia, y que estábamos juntos por Amor y por transitar el mismo camino y los mismos valores…

Y te entendí y te perdoné…

Además, tú lo sabes, yo tenía mis cosas y muchas veces te he hecho la vida imposible…

Siempre he tratado de comprender…

De ser feliz y de hacer felices a los que están a mi alrededor…

Esposo mío. Aunque me doliera que rehicieras tu vida, entendí que debías hacerlo y tenías todo el derecho del mundo…

Eres el Amor de mi vida. Y sé que para ti yo también lo soy…

Me hubiese gustado que esos hijos que tienes hubiesen sido míos…

Lo había pensado y lo teníamos planeado … ¿Recuerdas? ¡¡Claro que lo recuerdas!!

Sé que me amas y que has vivido lo peor que se pueda vivir…

Me siento culpable por ello…

No te escuché…

O no quise escucharte…

Me lo habías advertido varias veces…

El día anterior a que me fuera de tu vida te noté preocupado…

En tus actitudes, en tus expresiones, en tus pedidos…

Ya no sabías cómo decirme que la dejara de ver…

Y yo sólo escuchaba los cantos de sirena de esa psicópata…

Sabes que soy una testadura…

Y una mujer que casi no tuvo infancia ni adolescencia…

Creí que podría sola, como tantas veces…

Y me equivoqué, ¡¡vaya si me equivoqué!!

Sé por lo que has pasado…

Lo que has sufrido…

Y con lo callado y reservado que siempre fuiste … Recuerdas cuando te decía: “¿Pero este está muerto o qué?”.

Las ironías de la vida…

Sé lo que te costó poder llegar a expresar todo lo que has vivido conmigo…

Y toda la felicidad y el tremendo dolor del final…

Sé que te dejé solo, muy solo…

Sin poder decir nada…

Entiendo que hayas expresado todo en un libro … Y que ahora quieres seguir contándolo a todo el mundo…

Eres mi esposo y querría poder estar allí al lado tuyo apoyando tu emprendimiento … Como tú lo hiciste siempre conmigo…

Padre. Sé la carga que tuviste que llevar en todos estos años…

Sé que sufriste como todos, pero trataste de seguir adelante para mantener bien alto mi Legado y mi Honor…

Y el de toda la Familia…

Sé que aunque estabas tan destruido como los demás pusiste la cara siempre por mí…

Vi cómo tenías que secarte las lágrimas detrás de esos lentes oscuros que usabas para ocultar tus verdaderos sentimientos…

Sé que ocupaste todos estos años para que el mundo recuerde lo que hemos hecho…

Y que lo supiera con nuestra verdad…

Sé que tuviste que hacer un gran esfuerzo para hablar por mí en esos primeros años…

Porque aunque muchas veces te encerrabas en el baño simulando tus llantos con una ducha salías a hablar a los medios para decirles lo que éramos…

A sabiendas de que pronto saldrían otros a decir todo lo contrario, aprovechando nuestra desgracia y lucrar con tantas mentiras…

Sé que nunca quisiste que alguien hablara por nosotros…

Sé de todas las cosas que le hiciste firmar a mi familia … y a Chris…

Sé por qué lo hiciste y sé lo que buscabas…

La verdad…

Y que no nos mancharan inventando cosas aprovechándose de la perplejidad de la gente…

Sé que te hubiese gustado ocuparte todo este tiempo de mí de otra forma…

De la forma en que tú lo habías soñado…

Desde el momento en el que diste nacimiento a Selena y Los Dinos…

Pero te tocó este destino…

Que tal vez pudimos haber torcido…

Pero que no pudimos hacer por no interpretar bien lo que se nos presentaba tan claramente ante nuestros ojos…

¡¡Cómo nos engañó, padre, cómo nos engañó!!…

Pero más me sorprende que te haya engañado a ti primero…

Es algo que debes recordar siempre…

Más en este tiempo…

Que ya es mucho…

Sabes que desconfiaste de mi esposo. Y que muchas veces nos hiciste la vida imposible…

Yo te entendí … Como te entendí que esa mujer te engañara a tal punto que hasta le confiaras el armado de un club de fans.

¿Cómo no lo voy a entender si yo le confié que se encargara de mi boutique?

Con tu aval…

Por eso, padre. Ya no tiene sentido estos enfrentamientos con Chris…

El tiempo ha cambiado…

Te agradezco lo que has hecho por mí…

Pero ahora los quiero a todos juntos…

Ya sabes lo que quiero…

Que me recuerden con Amor…

Quiero que se respeten, que se escuchen…

Y que apoyen el emprendimiento de cada uno por mi recuerdo…

Yo los quiero a todos…

Y sé lo tanto que me quieren…

Entones … Padre: apoya a mi esposo y escúchalo…

Chris: entiende a mi padre y háblale … Él a la larga lo comprenderá … Como en su momento aceptó nuestra relación…

Hermana mía: haz de mediadora y júntalos…

Los quiero a todos juntos. ¡¡A todos!!

Si me quieren de verdad, sé que lo harán…

Los tiempos han cambiado…

Ya no quiero que me recuerden sólo por mis canciones…

Quiero que me recuerden por lo que fui…

Y que el mundo sepa por qué todos me querían tanto…

Confío en ustedes…

Sé que lo harán…

Con sólo recordarme en cada acto de mi vida…

(Son tiempos difíciles. Ya no hay margen para egos, rencores y enojos. Son tiempos para recordar a Selena y seguir su camino. Sólo eso nos salvará del caos. Es hora de poner a Selena en acción. Es hora de recuperar el tiempo y el camino perdidos. Es hora de volver al camino que Selena nos dejó … Con Amor, con su Amor)

Y yo estaré aquí para recordarlo y para recordarte siempre, Selena…

Te quiere mucho…

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)

 

 

Sin tiempo para ti, Selena...


 Y un día me encontré sin tiempo…

Tengo mucho trabajo … Tengo que hacer tal cosa, tengo que hacer tal otra…

Todas obligaciones, todos mandatos de otros o impuestos por mí…

¿Y qué es lo importante para mí?

No tuve respuesta…

Y me encontré con que no tenía tiempo ni para escribir sobre Selena…

Me estaba olvidando de Selena … Me estaba olvidando de mí…

Me autoimpuse cosas para cubrir la mente…

No quiero pensar en la Pandemia … No quiero escuchar cifras de muertos e infectados…

Quiero que me dejen tranquilo…

Quiero volver a la “normalidad”…

Quiero volver el tiempo atrás…

Quiero volver al tiempo en el que comenzó todo…

Quiero volver a ese momento en el que perdimos el rumbo…

Porque nada surge de casualidad…

Nada surge de la nada…

Todo tiene un por qué…

Como nunca asistimos a las muestras de un mundo en el que primó siempre el individualismo a la colectividad…

A un mundo en el que sólo le importó la salvación personal…

A un mundo en el que ya no importaban el trabajo, el talento, el sacrificio…

A un mundo en el que no importó la verdad, la autenticidad, la sinceridad…

A un mundo en el que no se valorara el mérito, el ser mejores en nuestro actos y en nuestras vidas…

Y ya no importaron las señales…

Importaba ganar, ganar a cualquier precio…

Imponerse en la vida con la mentira, con el engaño, con la falsedad…

Triunfar difamando, hablando mal del otro, destruyendo al que se interpusiera en el camino a la cima…

Un mundo tan distinto del que soñó Selena…

Un mundo tan distinto del que creó Selena…

Y tuvimos señales…

Atentados, destrucciones, incendios, matanzas…

Mientras el mundo se divertía en un show sinfín…

Mostrándose y mostrando una realidad ficticia, irreal tan alejada de nuestros sueños y nuestros sentimientos…

¿Nos sorprende lo que vivimos? ¿No tuvimos señales?

Parecen tan lejanos aquellos incendios en los que tantos animales murieron en Australia…

O aquellos otros en Brasil…

Aquel atentado en Orlando en una discoteca…

Y un día antes mataban a una cantante que prometía, llamada Chistina, en la misma ciudad, de la mano de un fan…

Como a ti, Selena…

Los atentados de las Torres Gemelas…

Las guerras absurdas, el hambre tras ellas, la injusticia, la gente desamparada preguntando por qué…

¿Nos sorprende lo que nos pasa?

Es un mundo sin Selena…

Ahora el mundo se aterroriza por un virus al que no pueden controlar…

¿Pero no hubo algo similar hace diez años?

Fue un aviso…

Un aviso que no quisimos ni ver, ni escuchar, ni atender…

Total, siempre se sale de la crisis, ¿no?

Un mundo en el que se premió la artificialidad, la superficialidad, la apariencia…

Un mundo tan alejado de tus valores, Selena…

¿Cuándo comenzó todo?

¿Cuando a los artistas se le empezó a decir que no importaba ser talentosos?

¿Que bastaba con inventar historias personales, de relaciones y de amistades?

¿Cuándo comenzó a inculcárseles que es más importante pelearse que quererse, hablar mal del otro en vez de elogiarlo o piadosamente callar?

¿Cuándo el mundo perdió su rumbo?

¿Cuándo ya no importó ser exitoso producto de lo que se es, de lo que se hace y de lo que se construye?

¿Cuándo empezó a importar la apariencia, las relaciones convenientes y coquetear con el Poder traicionando sus propios valores?

Tal vez la verdad esté cuando comencemos a responder cada una de todas estas preguntas…

Y si convenimos en que así fue como comenzó todo…

Tendremos que saber que hubo una fecha en la que empezó el camino de la debacle…

Y de vivir las consecuencias de ese hecho nefasto…

Todo lo que vivimos comenzó … el 31 de marzo de 1995…

Allí el sueño terminó…

No sólo terminó el sueño de Selena…

Terminó el sueño de todos…

No sólo cambió el rumbo de la música latina y mundial…

Cambiaron los valores, los objetivos, los sueños…

Dejamos de pensar que lo importante en la vida era ser feliz…

Empezamos a pensar que lo más importante era ser exitoso…

Dejamos de pensar en nuestros sueños…

Empezamos a pensar en lo que quieren que seamos…

Dejamos de sentirnos orgullosos por lo que somos y queremos mostrar…

Empezamos a ser y a parecer lo que quieren lo que nos dicen que en la vida hay que ganar a como sea…

Dejamos de ser nosotros…

Dejamos de pensar en el bien de los demás…

Ya no pensamos en ser felices ni hacer felices a los demás…

Dejamos de lado el camino de Selena…

Nos olvidamos de ella…

Sólo la recordamos en los aniversarios…

La recordamos en sus canciones, en sus conciertos…

Hasta la homenajea gente que hizo, hace y hará todo lo contrario a lo que hacía Selena…

Son las mismas personas que sólo se les ocurre homenajearla poniéndose un vestido similar al de Selena en el mítico Houston Astrodome de 1995…

Pero a nadie se le ocurre homenajearla siendo como ella…

Tampoco se les puede pedir tanto…

Perdimos el camino de Selena, sin duda…

Y yo aquí, sin tiempo para recordar a Selena…

Porque tengo mucho trabajo…

Teniendo que ocuparme de cosas que no me interesan, de preocuparme de temas absurdos, de seguir caminos que nos llevan al caos…

¿Y todavía me sorprende lo que pasa?

No. No me sorprende…

Tuvimos una oportunidad y la perdimos…

Todos la vimos caer, caer sin poder llorar…

El sueño de Selena terminó…

El nuestro también…

Y yo sin tiempo…

Viendo cómo todos llegaremos a un final inexorable muy pronto…

(Nada más desolador que la soledad. Nada más desolador que el olvido. Nada más desolador que el destino inexorable. Nada más desolador que un triste final. Tuvimos la oportunidad de ser felices para siempre. Hoy padecemos las consecuencias de haber desechado esa oportunidad. Nada más queda … Nada más queda que el Amor de Selena para sobrevivir…)

Aquí estoy, Selena … Sosteniéndome como pueda con tu Amor…

Te quiere mucho…

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)