Tú me prometiste que pronto ibas a volver...

28 de febrero de 2022 



Para que no vuelva a suceder, Selena... (Nadie tiene asegurado el futuro...)

 


Cuarta Parte de: "Para que no vuelva suceder, Selena", "Para que no vuelva suceder, Selena, nuevamente… (Los sueños, sueños son)", "Para que no vuelva a suceder, Selena... (La Despedida)"


Melina no podía dejar de pensar en lo que se había convertido Marisel. Un día la vio de vuelta de aquel supuesto viaje que había hecho para que le reconocieran su “labor” por Selena, algo que en su tierra no le reconocían…

Ya no era la Marisel que supo conocer…

Estaba irreconocible. Trabajaba de mesera en un bar y cada tanto hacía un número musical en un pequeño escenario montado, o tomaba la guitarra y se ponía a cantar no sin antes ponerse una enorme capelina…

“Cierto que se ufanaba de ser artista”, recordó Melina. Y tal vez debió serlo, pensó. Si se hubiese dedicado a ser ella misma en vez de simular ser otra, otro hubiese sido su destino…

A Melina le inquietaba que estuviera cerca, muy cerca de lograr todo. De estar a su merced, de ser la líder que hacía lo que quería y que todo el mundo la obedecería … Estuvo cerca, tan cerca…

Y ella supo muy bien que mucho tuvo que ver para que eso no sucediera…

Por un instante Melina se angustió al pensar que en definitiva el destino de Marisel bien podía asimilarse al de Selena … Vio el éxito, la popularidad y un futuro lleno de logros … Lo llegó a ver y estuvo a tan poco de pegar el salto … Y sin embargo … todo se esfumó … Ocurrió algo inesperado que cambió su destino y eso que estaba ahí, tan alcance de la mano, tan palpable, tan cerca … no sólo se alejó … se marchitó, como la letra de “Como la Flor” … Todavía Melina se preguntaba cómo pudo haber pasado eso, como Selena no se había dado cuenta, cómo no supo salir de esa relación tan tóxica que la asfixiaba y no la dejaba ser…

Más de una vez Melina lo pensó … Y más de una vez imaginó esa escena … Selena yendo por la autopista del éxito con la seguridad de que a pocos metros estaba la línea de llegada, del éxito, de la consagración … Y de pronto por una razón inentendible, Selena se desviaba de la autopista, se salía de su camino, para ir por un atajo, por un camino de tierra en busca de la habitación 158 del Days Inn … Y allí no sólo desviarse de su destino sino encontrar otro tan distinto … Y el final … Ese absurdo final que te lleva por una decisión de un minuto, de un minuto fatal … De un minuto sin pensar … De un minuto en el que se decide por el otro y no por uno mismo…

A Melina le atormentaba pensar que las vidas de Marisel y Selena tuvieran relación. ¿Cómo podía ser eso si eran notoriamente distintas? Pero es que esa sensación de que se está tan cerca de todo y que algo inesperado cambia ese destino hacía que Melina no pudiera dejar de relacionarlas … “Al final tendré que pensar que Marisel la quería a Selena y tenía su misma vida y destino”. Y una siendo tan desconsiderada y tan injusta, pensaba…

Y como tantas otras veces en las que se sentía perdida, confundida y angustiada, Melina recurrió a Ernestina y le planteó lo que le sucedía … Marisel había vuelto y con ella su pasado que ella había enterrado … Marisel había vuelto y su angustia se instaló en su Alma … Marisel había vuelto y Melina sentía la ausencia de Selena…

Ernestina se echó a reír…

“¿Así que volvió Marisel? ¿Y no vino a hacer un nuevo zoom para contarnos sus nuevos logros? ¿La gente de todo el mundo salvo la de nuestra ciudad ya la adora? ¿Cuándo hablan de Selena piensan en ella? ¿Es la continuación de su obra?”, le preguntó…

“¡¡No seas sarcártica, Ernestina!! Yo la vi y parece muy golpeada … No sé … Al final parece que su destino es como el de Selena … A veces me dan ganas de acercarme y decirle si necesita algo…”, le dijo Melina…

“¡¡No lo hagas, Melina!! Ya quisiera ella … No lo olvides … ¡¡Es una psicópata!! Hará lo que sea para que vuelvas a ella y la pongas en su lugar de pedestal. Hay algo que me extraña de ti … Sabes la historia de Selena y ya sabes bien el motivo de su final … ¿No se te dio por relacionar el destino de Marisel con otro personaje de su historia? ¿Por qué lo relacionaste con Selena?”, le volvió a preguntar Ernestina.

“Es que estuvo tan cerca … Tan cerca de todo … Tenía todo a su merced … Y se le escapó todo por tan poco”, le contestó Melina.

“¿Tú crees que las intenciones de Selena y de Marisel fueron las mismas? ¿Tú crees que el final de ellas dos son similares? ¿Crees que las causas por las cuales no lograron lo que se habían propuesto son idéntica. Piénsalo bien … La respuesta de ello te dará a quién se relaciona el destino de Marisel...”, le indicó Ernestina…

Melina no sabía qué decirle … Su mente se puso en blanco.

“¿No lo ves, Melina? Para empezar, Marisel no ha muerto … Más de una vez te dije que era una pobre mujer que necesitaba absorber la energía de su entorno para sentirse importante … Y si podía manipular a la persona indicada tendría el éxito asegurado … ¿No te das cuenta ahora?”.

Melina asintió en silencio. Se daba cuenta y sabía lo que le diría Ernestina…

“¡¡Pues claro, Melina!! Marisel tiene el destino de Saldívar… La asesina no logró todo lo que se había propuesto … Cuando fue desenmascarada por el Señor Quintanilla, ella apostó a que si podía generarle culpa a Selena dando lástima, negando todo y prometiendo que las cosas se iban a aclarar, ella la entendería, la seguiría apoyando y a la larga se alejaría de su familia … Cuando supo que eso no sucedería, decidió asesinarla … Y urdió un buen plan. Había hecho todo para que Selena fuera al Days Inn sola con la excusa de que la habían violado … Se aseguró de que hubiera testigos ese 31 de marzo que las vieran juntas y en estado normal … Y a la vuelta, con Selena enojadísima por su mentira, asesinarla, simulando que había sido un terrible accidente … Ya sabes, Melina, por qué ese plan falló…”

“Sí, ya sé … Selena salió del lugar cuando la asesina contaba con que quedaría echada en la habitación … Y sin testigos dar rienda a su teoría del accidente…”, reflexionó Melina…

“¿Pero qué pasó? Selena en un increíble acto, salió corriendo de la habitación, aun malherida … Saldívar en su desesperación de que Selena pudiera salvarse y desenmascarar todo salió por el segundo disparo, el definitivo … Pero a los pocos metros, por la sangre derramada, sabía que la suerte estaba echada … Supongo que a esa altura Selena también … Pero la asesina se salió de su libreto: salió de la habitación sin ver que una persona estaba viendo todo … Ese sería el testigo clave que condenaría a la asesina, por suerte … Lástima que Selena no pudo escapar de ese cruel destino”, se lamentó Ernestina…

“Entonces, me dirás que el destino de Marisel es como el de Saldívar y no como el de Selena…”, le dijo Melina.

“¿Es que tienes alguna duda? La asesina estuvo a punto de salir impune de lo que le hizo a Selena … Sabes que aún con toda la evidencia sin la declaración de Trinidad Espinoza, todo se hubiese hecho más difícil … Estuvo a un paso de cometer el crimen perfecto … Y si no fuera por lo que hizo Selena lo habría logrado … Marisel también estuvo a punto de ser la dueña de todo manipulando a todo el mundo, sobre todo a ti … Pero tú te diste cuenta a tiempo y no solo escapaste de sus garras … Descubriste su juego, supiste salirte de él y ella acabó con su suerte …Selena se dio cuenta cuando ya era tarde … Si hubiese actuado a tiempo lo habría logrado como tú…”.

“Entonces yo soy como Selena y Marisel como Saldívar…”, sonrió Melina con cierta mueca de tristeza…

“No sólo eso … También aprendiste lo malo de su historia, no sólo lo bueno … Con los psicópatas no hay que tener contemplaciones … Aunque se tenga que pagar altos precios para salir de sus dominios, hay que hacerlo. Tú lo has hecho y ya ves los resultados … Sigue tu vida y contempla la de Marisel de lejos, bien de lejos…”, le aconsejó Ernestina…

Melina y Ernestina se fueron abrazadas del lugar hasta que pasaron por el bar en el que trabajaba Marisel. Se miraron, pasaron rápido por el lugar sin mirar y echaron a reír … Las cosas estaban su lugar … Al menos una vez se puede ganar ante tanta injusticia…

(No siempre se logra todo aunque se tenga la mejor planificación. Siempre puede suceder algo inesperado, algo que no estaba en los planes de nadie, algo que cambie el menos parte de la historia. Selena no pudo cambiar su destino, pero su perseverancia al menos evitó que la asesina se saliera enteramente con la suya. Algo que siempre hay que tenerlo presente a la hora de tomar decisiones o de prever algún hecho. Pero por sobre todo, nunca hay que creer que todo está escrito por nuestra propia voluntad. No somos todopoderosos. La vida pone al menos algunas cosas en su lugar.)

Y tu ejemplo, Selena, me permite sobrellevar los avatares de esta vida, de gente tan tóxica, y de ambiciones desmedidas y sin sentido…

Te quiere mucho….

Sergio Ernesto Rodríguez

(Buenos Aires, Argentina)


La llamada, esa llamada, Selena..

 


“¿Bueno? Soy yo … Antes de que me cuelgues. No más, déjame explicar que…”.

Escucho la letra de “La llamada” y es como recrear esa última llamada de Saldívar, la última de las tantas que hizo en ese mes fatídico de marzo de 1995, y que terminó de sentenciar el destino de Selena.

¿Por qué Selena la siguió atendiendo? ¿Por qué no colgó el teléfono? ¿Por qué querría seguir escuchándola si ya sabía que nada bueno obtendría de ella?

“…No me vuelvas a llamar tratando de explicar que lo que vi no era cierto…”.

¿Por qué Selena no le dijo que no le explicara que no eran ciertas las estafas, que ya le quedaba claro que nunca le daría los documentos y que no quería verla más? Ya dos semanas antes cuando le ratificó la confianza esperando que con eso le devolviera los documentos, ella se puso eufórica y le mostró el arma que había adquirido para “protección”. ¿Un mensaje quizá de lo que le pasaría si Selena le quitaba su apoyo?

“…Vergüenza debes tener si me quieres convencer que eres fiel y eres sincero…”.

¿Qué sinceridad y que fidelidad podría demostrarle la asesina a esa altura? Habían pasado semanas de que el padre de Selena la había expuesto con su accionar y desde ese entonces Saldívar prometió que iba a explicar lo sucedido, que iba a presentar los documentos y que todo fue una torpeza producto del trabajo arduo que tenía. Desde ese momento sólo buscaba ver a Selena a solas, darle documentos incompletos, y como la última vez que se vieron apareció Chris, empezó a decir que la habían violado en Monterrey y que Selena debía ir nuevamente sola para acompañarla al hospital…

“…Si me vuelves a llamar yo te vuelvo a colgar. Ya me cansé de escuchar excusas y más mentiras…”

Eso debiste haber hecho Selena. Ojalá las cosas hubiesen sido como las expuso tu Familia en la serie “Selena” en Netflix. Que cuando se dio esa reunión entre tú, tu padre y tu hermana con Saldívar desde ese momento no la quisiste atenderla hasta el día anterior a ese 31 de marzo. Tú la viste más de una vez buscando quererle creer cuando ya era evidente que no tenía forma de explicar lo que había hecho. Es tan doloroso lo que pasó que es entendible que aún hoy la Familia Quintanilla no quiera admitir que la seguías viendo, aunque fuera como estrategia para lograr eso que tanto te obsesionaba recuperar … Esos benditos documentos para la deducción de impuestos … Eso es lo que al menos escribió Chris en su libro … Seguramente fue así … Y era algo que una psicópata como Saldívar sabía muy bien … Sabía que con esa promesa te tendría de un lado para otro, como un perro que busca alcanzar el hueso que le exhiben para comer pero que no se lo dan. Entiendo que a todos nos cueste creer que eso haya pasado y que la Familia Quintanilla no lo quiera no mostrar ni admitir…

“…No me vuelvas a llamar. No te voy a perdonar. Otra oportunidad no te la doy. No vales la pena…”

Eso debiste haber hecho, Selena. Yo entiendo que era difícil tanto para ti como para toda tu familia … Cuando uno traba una relación de confianza con alguien, es muy difícil tomar la decisión de alejarse. Y si el motivo del alejamiento es por algo serio, cuesta procesar ese hecho y cómo hacerlo sin generar más daño. Tal vez debiste hacer lo que hizo tu padre aunque hay que admitir que nadie imaginó lo que iba a hacer esa mujer. Si no, tampoco entendería la pasividad de tu padre luego de que la acusara de robo a Saldívar. Que solo se limitara a no permitirle el ingreso a sus instalaciones … De cualquier modo, si ya la confianza se había quebrado, no había que darle más oportunidades. Había que cortar toda relación, aunque se tuviera que pagar un alto costo por ello, que nunca sería tan alto como el que se pagó ese 31 de marzo…

“…Vergüenza debes tener si me quieres convencer que eres fiel y eres sincero…”.

¿En qué consistía a esa altura ser fiel y ser sincero? ¿Fiel a qué? ¿Sinceridad a qué? Te lo había advertido Martín Gómez, tu diseñador … Te dijo más de una vez los maltratos a él y a todo el personal de “Selena Etc.”.  Tu padre demostró cómo tus fans se quejaban de que nada le daban de lo prometido producto de sus suscripciones. Cómo la plata no aparecía y surgían deudas millonarias por el no pago de ciertas cuentas a cargo de la asesina. Te costaba creer que ella había hecho eso y finalmente Martín Gómez se fue. Ella hacía lo que quería. Aparecían cheques firmados por su hermana. Pero cuando todo quedó en evidencia, se puso en víctima. Y allí empezó su catarata de excusas para que tú no le hicieras nada, la apoyaras en todo y a la larga ponerte en contra de tu padre. El ver que esto último no sucedería fue lo que terminó por decidir lo que decidió ese nefasto 31 de marzo de 1995. Algo que hubiese hecho dos semanas antes … Algo que podría hacer dos semanas después…

“…Si me vuelves a llamar yo te vuelvo a colgar. Ya me cansé de escuchar excusas y más mentiras…”

Eso debiste haber hecho Selena mucho antes. Debiste haber pensado que hacía tiempo te venía mintiendo, y buscaba confrontarte con tu esposo y con tu familia. Debiste advertir con esta estafa que ya venía engañándote. Que decía cosas a las que tú le creías y después no eran ciertas … ¿Te acuerdas cuando vino a decirte en una de las celebraciones de fin de año que Chris y sus amigos habían provocado destrozos en los baños y tú fuiste presta a pedirle explicaciones? ¿Te acuerdas que cuando Chris te explicó que no había hecho nada de eso te dio argumentos que le daban la razón? Ahora bien, con todo ello que pasaba, ¿no notaste que en vez de creer de movida a tu esposo y desestimar las mentiras de Saldívar, ibas a confrontar con Chris dando por cierto lo dicho por ella? ¿No se te dio por preguntar “qué estoy haciendo”? Ahora que se exponía lo que realmente hacía esa mujer, ¿no había que replantearse todo y alejarse de sus excusas y sus mentiras?

“…No me vuelvas a llamar. No te voy a perdonar. Otra oportunidad no te la doy. No vales la pena…”

Efectivamente, Selena. No sólo no había que perdonarla. No valía la pena. Yo imagino que nadie hizo la denuncia pública porque se quería evitar el escándalo. Eso tenía su lógica. Pero lo que nadie pensó es que ya con la decisión de dejar afuera a esta mujer, directamente como lo había hecho tu padre, indirectamente como lo estabas haciendo tú, Saldívar a la larga haría un escándalo. Perdida por perdida, recurriría a los medios, a cualquier periodista que quisiera escuchar y tener una nota que generara ruido, mucho rating en los medios y muchas ventas en diarios y revistas, y el morbo de hablar del “lado oscuro de Selena”. ¿Te suena esto? Ya sabes lo que pasó después, aun con los hechos consumados. Frustrada por no haber logrado el crimen perfecto que hiciera poder estar libre riéndose en la cara de toda tu Familia, la asesina salió a decir barbaridades de ti ante una periodista ambiciosa que sería capaz de cualquier con tal de lograr tener poder en el medio en el que trabajaba, ante un público ávido por saber por qué pasó lo que pasó. Entiendo que no tenían forma de saber hasta dónde podía llegar esta mujer, pero sí debieron entender que debían estar lo más lejos posible de ella. El daño estaba hecho y seguro algún costo iban a pagar por sacarse de encima semejante lastre. Pero siempre iba a ser mejor eso que pagar el costo de una vida, y tanto tiempo de esfuerzo y de trabajo hecho en forma honesta. Debieron haber cortado toda relación con ella y haber sido precavidos. Una persona que quiebra esa relación de fidelidad y honestidad no merece una nueva oportunidad de ser escuchada. Si lo hizo una vez, lo hará de nuevo. Y si es capaz de eso, será capaz de cosas aun peores, como quedó demostrado…

Cuando veo el video de “La llamada”, me pongo feliz. Te veo bien a ti. Veo feliz a la banda, salvo a A.B. que lo veo en pocas oportunidades pero serio … Entiendo que sus tomas se tuvieron que hacer después, pues tal era su grado de compromiso con el trabajo que él estaba en el estudio componiendo cuando todos ustedes estaban grabando. Estaban en un momento excelente y había empezado el despegue … Pero lo otro, lo malo, también había empezado y había tomado su rumbo … Eso me hace recordar cuando reparo en la letra de “La llamada”, que más allá de que se trate de otra historia, me hace inevitablemente pensar en lo que fue esa última llamada, esa llamada desesperada de esa asesina dispuesta a vender cara su derrota, a no tolerar que la dejaran afuera y expuesta y asestarte el peor dolor para tirar por tierra tanto tiempo de trabajo digno, de esfuerzo y de perseverancia…

(Siempre diré que no hay que hacer excepciones con lo que nos hacen mucho daño y menos con los psicópatas. Ellos juegan con nuestros sentimientos, y se valen de ellos para manipularnos y lograr lo que quieren. Con ellos hay que ser fríos y terminantes. Estar lo más lejos posible para sufrir el menor daño. Selena por ser considerada lo pagó con su vida. Esa mujer no valía su conmiseración. Ese sentimiento hay que guardarlo con los que realmente nos quieren, jamás con los que nos defraudan, estafan y juegan con nuestras vidas…)

Lamentablemente no se puede ser ni bueno ni considerado con gente que es capaz de hacernos el peor daño…

Eso es parte de lo que queremos recordar de ti, Selena. Todo lo bueno ya lo has construido con tu Obra…

Te quiere mucho….

Sergio Ernesto Rodríguez

(Buenos Aires, Argentina)