Me voy donde voy y nadie lo impide...

31 de mayo de 2020


No me iba a quedar en casa encerrada habiendo tanto por hacer…


¡¡Quedate en casa!! ¡¡No necesitas hacer eso ahora!! ¡¡Relájate!! ¡¡Aprovecha tu momento que aún hay mucho por hacer!! No es tiempo para nuevos emprendimientos … Eres joven, talentosa. Selena. La gente te ama … ¿Para qué quieres meterte ahora en una nueva empresa? ¿Tienes tiempo para hacerlo? Ya lo tendrás más tarde, cuando seas rica y famosa en todo el mundo. ¡¡Ya verás!! Ahora quedate en casa … Hazme caso … Es por tu bien … ¡¡Concéntrate en lo que viene que hay mucho por hacer!! No te desvíes del camino … Sabes que llevamos años trabajando para llegar a este momento … ¡¡No pares ahora!! ¡¡No te disperses!! ¿Ves allí? Ese es el camino … No te desvíes … Sabes que si tomas otro camino no sabrás nunca con qué te encontrarás … El nuestro está probado y es seguro … Empezamos por un camino de tierra … Luego por otro de ripio … Más tarde por una linda calle … Hoy por una Gran Avenida … ¡¡Mañana por la Autopista del Éxito Mundial!! Hazme caso … Quedate en casa … ¡¡Disfruta del momento y de que estás viva en pleno éxito!! No pienses en otra cosa … ¡¡Ya vendrá el tiempo para hacer de tu vida lo que tú quieras!!!

… Eso decía mi padre … Y no es que me parecían malos consejos … No me estaba retando … No es que consideraba que era errónea mi idea de armar mi propia empresa, mi propia boutique, y echar a rodar mi gran sueño de niña de ser diseñadora … Él creía que no era ese el momento adecuado … Que debía ser primero famosa y luego con todo el éxito hacer lo que yo quisiera con mi vida … Era lógico que me dijera que no recargara mi tiempo de trabajo … Era razonable que me aconsejara que descanse, que me quede en casa, que no disperse mis pensamientos con todo lo que nos costó llegar al éxito … Ahora que lo habíamos logrado, ¿cómo pensar en otra cosa que consolidar aquello que se había logrado con tanto sacrificio? Era lógico, era razonable … Era mi padre … Quería lo mejor para mí y, como me conocía, sabía que iba a querer hacer todo lo que se me cruzara por la cabeza en un minuto … Quería que me quedara en casa, que gozara de mi hogar, de mi esposo, de mis perros … Y en depositar toda mi energía en mi futuro, en lo que se venía … Cantar en inglés, las giras a Sudamérica, y seguir con mi éxito en los Estados Unidos y en México … ¿Qué más podía pedir si lo tenía todo? Eso pensaba mi padre … Sí, debía quedarme en casa y aceptar que esa era la mejor opción y que no había otra … Que no había alternativa, que no había lugar para otra cosa … Acaso si llevaba a cabo mi sueño arruinaría lo hecho hasta ese momento y terminaría perdiendo todo … Sí, debía quedarme en casa y no pensar … Debía aceptar el consejo y no cuestionar … Debía seguir ese camino sin pensar en otros … No debía pensar ni mirar otra cosa … No debía…

¿Pero qué iba a esperar quedándome en casa? ¿Alguien había pensado en mí a la hora de elegir este camino? Por supuesto que este camino fue decidido cuando era muy niña y no tenía opción … Luego lo tomé como mi modo de vida, pues no tenía alternativa … Desde muy chica supe el valor de tener un plato de comida en la mesa … Y lo duro que fue para nosotros conseguirla … Quedarme en casa … ¿Pero si nosotros llegamos a quedarnos sin casa un día? Y tuvimos que salir adelante a pesar de esa desgracia … Si hay algo que valoré de mi padre es que se haya jugado todo en pos de un objetivo, de un ideal … Por supuesto que sufrí cuando nos quedamos sin nada … Pero valoré que mi padre no se conformara con lo seguro … Podría haberse quedado en casa conforme con su trabajo seguro en la petrolera sin cuestionarse nada y dejando sus sueños a un lado en pos de tener una vida sin sobresaltos … Pero no … Él siempre fue un artista, y quería vivir por y para la música … Y no dudó en llevar a cabo su sueño en cuanto se le presentó una nueva oportunidad. ¡¡Y esa nueva oportunidad fui yo!! Obviamente que sufrí y llegamos a pasarla muy mal … Pero si hubo algo que me motivó a seguir fue que estábamos haciendo algo, que estábamos forjando nuestro destino y que todos formábamos parte del equipo … Por eso mis hermanos y yo al poco tiempo nos involucramos en el proyecto y decidimos poner cada uno nuestro granito de arena para que el sueño de mi padre se cumpliera, y nosotros lograr el objetivos de lograr el éxito y poder vivir de la música … A mí no me movió la vocación de ser artista … A mí me movió la necesidad … Yo siempre dije que era una trabajadora …  Que trabajaba y daba todo de mí para que mi público, aunque sea por un instante, fuera feliz … Trazamos un camino en base a trabajo, esfuerzo, talento, honestidad y tenacidad … Nadie nos regaló nada … Todo lo logramos nosotros sin ayuda de nadie … Por eso estoy orgullosa de mi familia … Nuestros valores nos llevaron adelante … El sueño de mi padre se cumplió y nosotros empezamos a tener un lugar en el mundo…

Pero para lograrlo no nos tuvimos que quedar en casa … Tuvimos que movernos para conseguirla … Y mis sueños los postergué para lograrla … Y ahora llegó mi turno … ¡¡Por eso no me tengo que quedar en casa!! ¿Qué lograría con eso? Mi padre me pide algo que él no ha hecho, no hace, ni hará jamás … Y yo soy como él … No voy a esperar a ser vieja para cumplir mi sueño … No voy a seguir sólo los consejos de los demás … Mi padre, mi madre, mis hermanos, mi esposo pueden decirme lo que es mejor para mí … Y yo los escucharé … Pero también tendrán que escuchar lo que deseo para mí y aceptarlo … Desde que empecé a ser parte de la realización del sueño de mi padre siempre estuvo en mi mente convertirme en una diseñadora … Diría que me esforcé muchísimo para lograr cuanto antes el éxito para con él poder a echar a rodar mi sueño de ser diseñadora … Ahora con 22, casi 23 años, estoy en condiciones de poner en marcha mi empresa … Se llamará “Selena Etc.”. La primera la haré en mi ciudad, en Corpus Christi … La haré artesanalmente, a mi manera, tal como quisiera que luzca, hecha con la ayuda de Chris y de mi familia … Después, si todo va bien, ahí sí lo haré a gran escala y con ayuda externa en San Antonio, tal vez en alguna otra ciudad de Texas, si todo va bien haré sucursales en Monterrey y en otras ciudades de México … No esperaré a hacer esto en otro momento … Dirán que soy muy joven aún, que tengo tiempo, que vaya a lo seguro, que piense bien en lo que voy a hacer … Y yo entiendo que me lo digan … Pero yo no voy a esperar … Reconozco que soy muy ansiosa y que vivo siempre con hormigas en todo el cuerpo … Pero soy así … Me formé así … Viví así …Cada cosa que pasa por mi mente tiene que ejecutarse … No voy a parar ahora … Es mi turno … Es hora de cumplir mi sueño…

Por eso no me voy a quedar en casa esperando mi momento y escuchando sólo lo que dicen los demás lo que es mejor para mí … También me dejaré llevar por mis pensamientos y por mi corazón … Todo tiene que estar puesto sobre la mesa … Y con todos los ingredientes elaborar mi propio destino … Efectivamente, no me voy a quedar en casa … Voy a buscar lo mejor para mí … Llegó mi turno … Soy joven, pero también grande …  Y es hora de que decida yo … Es hora de cumplir mi sueño … Ahora que tengo mi casa es hora de salir de ella para vivir en otra y definir mi propio destino … No me quedaré quieta … ¡¡Siempre estaré en movimiento!! Ya veremos si valió la pena haberlo decidido así … Y si no lo logro, al menos estaré orgullosa de mí misma, como lo estoy de mi padre … Puede salir bien, como salir mal … Ya veremos qué sucede…

Pero sea cual fuere mi destino, siempre podré decir que fui una mujer libre y que no me quedé en casa mirando cómo los demás hacen su vida por mí…

(Estar en movimiento, escuchar a los demás, pero también ser escuchado. En la vida hay que ser conocedor y respetuoso de las reglas para saber desobediente cuando es necesario. Así fue Selena … Siempre aceptó el mandato familiar, siempre siguió el camino que le habían trazado, pero también supo rebelarse para imponer sus ideas, o para dejarse llevar por su convicción o lo que le dictara su corazón. Eso fue clave para su destino personal y artístico. La vida nos pone con gente que nos dicta buenos consejos y nos dan sabias órdenes. Pero esa vida también se forja con nuestros pensamientos y nuestros ideales. Los dos tienen que convivir y con ellos debe forjarse nuestro destino. Ser obedientes y rebeldes. Ser sabios y osados. Tener convicciones y corazonadas. Eso nos mantiene vivos. Eso nos hace verdaderos seres humanos con mente fría y corazón caliente…)

Y mi recuerdo sobre ti, Selena, es no sólo escribir sobre ti … Sino ser como tú en todos los aspectos de mi vida…

Te quiere mucho…

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)

Y ese día me quedé en casa, Selena…


Y ese día me quedé en casa … Ese nefasto día … No se trata a esta altura de que me culpe por ello … Pero sí tomé conciencia del valor de una decisión y de atender a los síntomas … No me tengo que ir muy atrás en el tiempo … Podría hacerlo y repasar varios hechos que uno no vio o no quiso ver … Pero no es necesario … Ese 30 y 31 de marzo de 1995 fueron acaso ejemplos emblemáticos de una serie de errores que nos llevaron a la tragedia … No lo vi … No lo quise ver  ... Tenía temor … Tenía terror … No lo supe manejar … Me dormí … No quise despertar … Quería creer que dentro de lo problemático todo era normal … Y no era así … Yo lo sabía … Selena lo sabía … Todos lo sabíamos … Pero el 30 de marzo estaba nervioso y algo en mí sentía que esto no iba a terminar bien … Pero esa noche nos tomamos de la mano con Selena, nos dijimos que nos amábamos y nos dormimos esperando un nuevo despertar, un nuevo día en el que todo iba a ser como siempre … Un día más en nuestras vidas … Un día más en el que todo seguiría igual … Y me dormí…

… Y me quedé en casa esa mañana del 31 de marzo no haciendo nada para que Selena no partiera a su cruel destino…

Lo más triste es que ni siquiera puedo decir que me quedé tan dormido que cuando desperté ya era tarde y Selena ya había partido…

De nuevo las señales aparecieron y no dimos cuenta de ellas … Una vez más…

Las veces que me dije: “¿Por qué seguí durmiendo cuando Selena me despertó ese nefasto día?”.

Es como si el Destino nos avisara y nos advirtiera una y otra vez, y nosotros no reaccionábamos…

Y me quedé en casa … Selena esa mañana del 31 de marzo pegó un grito ensordecedor … Yo me desperté sobresaltado … Noté que ella se había asustado porque al querer salir sigilosa de casa había olvidado que mi padre estaba en nuestra casa de visita desde el día anterior … Se asustó muchísimo, gritó y luego se rió … Se rió como esas veces en las que estaba muy nerviosa … Luego me dijo que no me preocupara, que siguiera durmiendo que ella estaba ordenando unas cosas en el armario … Yo le creí o le quise creer. Y seguí durmiendo. No pensé en lo que había pasado el día anterior y las veces que tuve que decirle a Selena que no la fuera a ver de nuevo a esa mujer … Que no tenía sentido … Que nunca le daría esos papeles…

Preferí quedarme en casa y seguir durmiendo…

No quise pensar en que Selena hasta último momento del día anterior buscó la manera de volver a verla. La dominaba la ansiedad … Quería esos papeles para resolver sus problemas impositivos … Ya no lo podía controlar … Y esa mujer lo sabía … Y buscaba cualquier artilugio para que volviera al motel en el que estaba alojada … Lo hablamos esa noche del 30 … Lo tuvimos que hablar porque una vez más esa mujer la había llamado diciéndole que la habían violado y que quería que la acompañara al hospital para ser revisada … Sabíamos que mentía escandalosamente … Sabíamos que hasta estaba utilizando cualquier excusa para que volviera … No nos preguntamos para qué … Debimos hacerlo … Y aun así Selena tanteaba la situación y me decía que tal vez debía ir para ponerla en evidencia de su mentira … Yo le dije que era absurdo, a lo que ella asintió y no habló más del tema … Pero el no hablarlo no quería decir que ya no se estuviera pensando en ello … Evidentemente, Selena siguió pensando en cómo volver a ese lugar…

Y yo me quedé en casa dormido…

Si Selena se quedó pensando en cómo iba a hacer para ver a esa mujer al otro día, yo debí haber pensado en lo que había pasado ese día. Si Selena varias veces pidió volver y yo le rogaba que no lo hiciera otras tantas … ¿Por qué no pensé en que lo intentaría en cuanto me distrajera? En cuanto a mí … ¿Por qué no reparé en que estaba preocupado y en desentrañar qué era lo que me preocupaba? ¿Acaso no empecé a pensar en que estábamos ante un peligro y que esa mujer podría hacernos más daño de lo esperado? ¿Por qué no reparé en que el día anterior, cuando esperé afuera en el motel que Selena se reuniera con esa mujer para recuperar infructuosamente esos benditos papeles, no aguanté y  los 15 minutos irrumpí en la habitación de esa pérfida para pedirle a Selena que nos fuéramos de allí? No era mi estilo hacer ese tipo de cosas … ¿Qué me había impulsado a hacerlo? Mi mente hubiese contestado que ya no tenía sentido insistir, que esa mujer jamás devolvería esos benditos papeles … ¿Pero mi inconsciente qué hubiese contestado? ¿Hubiese dicho que temía que pasara lo que sucedió al otro día? ¿Que ya dos semanas antes en una misma reunión esa mujer le mostró un arma  y su argumento fue que la compró por protección? ¿Que si esa reunión no terminaba en un acuerdo esa arma la hubiese usado contra Selena? Es probable … Pero lo cierto es que nunca llegó a mi consciente y nunca me lo plantee … Ni me lo quise plantear…

Opté por quedarme en casa mientras Selena salía de ella para no volver más…

Salir después de casa no sirvió de nada como no sirvieron ni las advertencias ni las señales … Ocupamos nuestras mentes en otras cosas para no pensar en lo esencial, que es invisible a los ojos y que está tan cerca … La última foto que tengo de Selena es una muestra de ello … La tomó mi padre el día anterior al nefasto … Le pareció divertido ver a Selena ocupada en hacer deducciones de impuestos y sacando cuentas … Dijo: “Está bueno verlos actuar como adultos y responsables” y dejó sellado el momento … Selena actuando y yo observando… Selena ocupada y yo mirando … Selena seria y yo riendo…

Los dos estábamos en casa…

Y yo me quedé en casa ese 31 de marzo de 1995 … No vi las señales, no quise escuchar mi voz interior, no me dejé llevar por mi intuición…

Y cuando salí de casa fue tarde, muy tarde…

(¿Cuántas veces nuestra voz interior o nuestros pensamientos nos dicen que debemos actuar y no lo hacemos? ¿Cuántas veces las evidencias nos dicen que debemos hacer algo y nos quedamos quietos sin hacer nada? Ese miedo otra vez … Miedo a los demás … Miedo a nosotros mismos … A veces nos obnubilamos por un pensamiento, por una persona, por algo que nos suena encantador … Y no actuamos como lo que realmente somos y pensamos … Y nos da miedo expresar desconfianza en algo o alguien a quienes creíamos … La Familia Quintanilla confió mucho en una mujer que los había defraudado y, a pesar de todas las señales, no quiso pensar que esa persona podía hacer lo que hizo. Si hubiesen actuado con ese sentimiento, otro hubiese sido el destino … Pero hay que reconocer que no es fácil tomar una decisión así … Lo que nos enseña todo este triste final es que cuando hay algo que no nos gusta, que ya no nos genera confianza, que ya no creemos, debemos actuar en consecuencia. Siempre dejaremos algo en el camino pero peor es no actuar y perder todo por ello. Por más doloroso que sea, debemos actuar con nuestros pensamientos y nuestra intuición para no tener que lamentarlo después, cuando todo sea demasiado tarde…)

Yo siempre estaré despierto por ti, Selena. Tu recuerdo me genera movimiento. Tu recuerdo me genera acción. Tu recuerdo me genera Amor. Y eso es uno de los principales motivos que me mantiene vivo…

Te quiere mucho…

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)