Yo sólo quiero recordarte, Selena…


Mi querida Selena:

Yo nunca podré saber cómo querrías que fueras recordada hoy. Sabes muy bien que nunca, absolutamente nunca, hablaría en nombre tuyo ni diría cosas tales como “Seguro que si Selena estuviera aquí haría esto o haría aquello” o “Si hoy Selena apareciera, seguro que nos diría tal otra”. Yo no diría que la mejor forma de recordarte es cantando tus canciones, hacerlo con alegría o llorando tu partida. Yo no pensaría que sólo hay una forma de recordarte. Yo sólo trataría de dar lo mejor por tu recuerdo. Trataría de pensar qué te haría feliz y lo haría sin más, esperando y ansiando que eso te dejaría contenta. Trataría de pensar en lo que nos dejaste en vida y recordarlo siempre. Trataría de borrar en tu mente y en tu corazón la sensación de quedarte sola como aquel nefasto día. Trataría de convencerte de que no te van a olvidar, de que no se llevarán de ti la peor impresión por tu triste final, tan impropio de ti. Yo sólo querría con mi recuerdo verte feliz y acompañada con mi cariño. Yo sólo querría decirte lo que significas para mí y la huella que has dejado en mi corazón y en mi alma. Todas las manifestaciones de Amor y de cariño hacia ti son válidas. Tal vez la mejor forma de recordarte es dejar todo por ti, expresar todos nuestros sentimientos, todo lo que nos generas cuando te vemos actuar, cuando te vemos hablar de tus sueños, cuando vemos la energía que ponías en tus proyectos, cuando vemos el Amor propio que había en cada acto de tu parte. Tal vez la mejor forma de recordarte es no olvidarnos nunca de ti no sólo con tus actos sino también con nuestros actos. Que nuestros actos sean el fiel reflejo de lo que nos has dejado como mensaje en vida. Ese mensaje en el que nada es imposible. Ese mensaje en el que todo es posible cuando uno se permite soñar, cuando uno se propone pelear por los sueños, por hacerlos posibles. Un mensaje en el que se muestre que el destino esté en manos de uno si efectivamente uno se lo propone, como tú nos enseñaste, Selena, con tus palabras y con tus actos…

Yo no sé qué es lo que piensas, aunque sé que te gustaría estar aquí para seguir siendo Selena, con todo lo que ello significa. Que lejos estaba en ti ser recordada como un mito, como una leyenda. Nada más alejado de ti pensar o concebir ello. Yo sé, Selena, que tú querías dar todo de ti para que todos te quisieran y te admiraran. Tú querías que te amaran por lo que eras, una mujer de carne y hueso, como cualquier otra que tenía sus sueños, sus proyectos, sus ambiciones. Y que en todo caso si te ungían como la mejor fuera precisamente por eso: porque la Selena que estaba en el escenario era la misma que estaba fuera de él, que podía cautivarlos cantando, hablando, dándoles un saludo, firmándoles un autógrafo, haciéndoles sentir que eran tan importantes como tú. Que podías subyugarlos no sólo interpretándoles una linda canción sino tener la deferencia de saludarlos uno por uno, de preguntarles a cada uno cómo estaban, o decirle un comentario lindo sobre su vestido o lo que hacía cada uno en su vida. Si eras la mejor era por todo lo que representabas como artista y como persona. Y eso que te propusiste lo lograste acabadamente, con creces, sin atenuantes. Por eso, como sé que te gustaría estar aquí dando más de lo tuyo, brindando todo por ti y por tu público, y no sólo como una cantante que interpretaba como nadie sus canciones, a la hora de recordarte uno no puede no dejar de dar todo, todo por ti, por tu memoria, por tu homenaje, por tu recuerdo, por tu riquísima vida. Poco sirven los monumentos, las estatuas, los posters, los murales, los discos si a ellos no les damos vida, energía, pasión, ésa que tú tenías, esa vida que le daba sentido a todo lo que tú tocabas…

Cada vez que te escribo, Selena, cada vez que te cito, cada vez que te recuerdo lo hago con todo mi cuerpo y mi alma … todos los días. Sé que necesitas eso. Nunca permitiría que se te olvide, que se te deje sola. Eso es peor que la muerte misma. Ése sería el mayor daño que se te podría hacer. A la hora de recordarte, a la hora de agradecerte, no hay imposibles, no hay impedimentos, no hay excusas. Yo sólo quiero darte las gracias. Yo sólo quiero que sepas que estoy aquí por ti. Yo sólo estoy aquí para darte mi Amor eterno. Para cantarte todos los días “conmigo tendrás todo lo que quieras y hasta el día que me muera, tú vas a ser mi Amor”. Yo sólo estoy para decirte que tan grande fue tu Amor que me has conquistado aun a la distancia de espacio y de tiempo. Tu voz, tu talento, tu carisma derribaban toda barrera, acercaba lo lejano, agrupaba a toda clase de gente, engrandecía los ojos de millones, que sólo seguían tu andar, tu paso en el escenario y en la vida con el andar que sólo los grandes y diferentes podían hacer…

Sé, Selena, que todo es difícil, pues al fin de cuentas “el mundo sigue andando” y se supone que la triste y densa realidad nos pone a atender otras cuestiones, otros menesteres, otros temas importantes en la vida. Esa realidad que nos pone en el cierre de Selena Etc., en que tu estatua se deteriore, en que tu gravesite luzca cercado y más pequeño. Pero ésa no es la realidad que tenemos los que te amamos y compartimos nuestro cariño contigo. Pues tú, Selena, no eres una estatua, una tienda, un gravesite. Tú vives en nuestros corazones. Tú vives en cada latido nuestro. Tú vives en cada sentimiento, en cada acto de nuestras vidas, en cada caricia que demos a cada integrante de nuestra familia, en cada emprendimiento en el que pongamos todo nuestro Amor, todo nuestro cariño. Tú vives mientras nosotros tengamos energía, ganas de vivir hasta lo máximo, tengamos fe en nosotros mismos, en sabernos diferentes, en sabernos que nos podemos superar, en que si queremos podemos conquistar el mundo con Amor y que él nos retribuya con el mismo afecto. Sé que ésa es la forma de recordarte, de quererte, de apreciarte…

Sé, Selena, que todo también se hace más difícil porque tú no estás y nosotros nos negamos a aceptarlo, porque hacerlo significa claudicar, resignarnos a que el destino se lleva lo mejor de ti y a nosotros nos deja lo peor, con la sensación de que no siempre hay que ser tan espontáneo, que no es necesario dar todo de sí para que te sepan el mejor, que cualquiera puede derribar de un plumazo tantos años de amor, trabajo y dedicación. Y se hace torturante cargar con la imagen de la derrota, de la ausencia, de la muerte, de la blasfemia, de la sangre, del dolor, del sinsentido. No es fácil ser fan tuyo, Selena. No es fácil ser tu admirador. Pero más difícil es estar en tu lugar, con haber recibido tanta maldad, odio y resentimiento condensado en una bala, en un disparo, en un acto. Y, peor aun, recibir más dolor hablando mal de ti en tu ausencia … Por eso, frente a ello, ¿podemos permitirnos, una vez más, dejarte sola y dejar que te vuelvan a disparar? ¿Podemos permitirnos que otros intereses y la resignación permitan dejarte que se olviden de ti, que se olviden de tu Amor, que se olviden de la magia que tenías, que se olviden de todo lo que has generado en todos nosotros? ¿Nos podemos permitir dejarte nuevamente abandonada? ¿Nos podemos permitir dejarte olvidada? ¿Nos podemos permitir dejarte en un segundo plano? ¿Nos podemos permitir sustituirte? ¿Desearías esto para ti, Selena? ¿Es eso lo que tú querrías de todos los que te amamos?
No, Selena!! Yo sé que no es eso lo que tú quieres. Yo sé que quieres volver aquí a estar entre nosotros. Nosotros también queremos volver a ti. Permitámonos soñar. Permitámonos soñar que ésta es una licencia que te has tomado. Sé que un día volverás, pues nunca te has ido. Estás en nuestras almas, estás en nuestros corazones. Y mientras te esperamos siempre daremos lo mejor de nosotros. Pues la mejor forma de recordarte es saber y hacer saber a todos lo que eras, de exponer a propios y a extraños lo que eras como artista y como persona. Que todos valoren tu obra, que todos te respeten, que todos vean cómo cantabas, el sentimiento que ponías a cada palabra pronunciada, a cada frase cantada, que observen lo que eras en el escenario. Que miren y se den cuenta si acaso hay otra como tú, si alguien puede poner su vida, su historia, sus sentimientos en cada canción cantada, en cada paso bailado, en cada mano en el pecho, en casa arete arrojado al piso, en la expresión de tu mirada, en la pasión en tu voz. Pues eso es lo que tú eres Selena: la pasión hecha canto. La pasión que se expresaba en todo lo que hacías, en todo lo que emprendías. Yo quiero que te vean cantando “Si una vez” en el Houston Astrodome en 1995. Yo quiero que vean cómo interpretabas “Set me free”, “Baila esta cumbia” y “Where did the feeling go?” en San Antonio en 1991. Yo quiero que te vean cantando “Enamorada de ti” en Premios Lo Nuestro en 1992. Yo quiero que vean cómo cantabas “Como la Flor” y “Baila esta cumbia” en Corpus Christi en 1993. Yo quiero que vean cómo cantabas “La carcacha” y “Como la Flor” en Festival Acapulco en 1994. Yo quiero que vean cómo interpretabas “No debes jugar” y “Fotos y recuerdos” en el concierto del Far West Rodeo con tu vestido azul en 1994. Yo quiero que vean cómo subyugabas e impactabas interpretando “¿Qué creías?” en Odessa, Texas, en 1994. Yo quiero que vean lo enorme que eras como artista y la evolución de tu música cuando cantaste el “Disco Medley” y “La carcacha” en el Houston Astrodome en 1995. Yo quiero que se emocionen como me he emocionado yo…
Cuando te recuerdo, Selena, yo quiero compartir tu emoción y sentimiento cuando recibiste el premio a la mejor cantante regional méxico-americana en Premios Lo Nuestro en 1993. Quisiera poder abrazarte, llorar contigo con tu emoción, reír contigo con tu alegría. Quisiera con mi recuerdo compartir lo que has logrado. Quisiera con cada recuerdo exhibir con orgullo mi Amor incondicional a ti. Quisiera poder con cada recuerdo expresar todo lo que me has marcado en mi vida y todo lo que has generado en mí. Quisiera con mi recuerdo que vieras el poder de tu canto, de tu Amor, de tu sacrificio, de tu pasión. Quisiera que supieras cómo has cambiado mi vida. Quisiera que supieras lo que has logrado con tu presencia y con tu ausencia. Quisiera poder decirte a viva voz: “Sí, Selena!! Tienes razón. Eres la mejor. Eres única e irrepetible. Eres diferente. Nadie será como tú!!”. Quisiera con mi recuerdo compartir tus triunfos, sentir que cada éxito logrado era mi éxito, el éxito de una comunidad, el éxito de tanta gente postergada que da todo a cambio de nada. Quisiera con mi recuerdo compartir cada concierto, cada tema, cada baile, cada interpretación. Quisiera con mi recuerdo tenerte viva siempre, que sepas que siempre estarás acompañada, que nunca estarás sola, que siempre te amaremos, que siempre te querremos. Quisiera con mi recuerdo decirte que nos asombras cada día, que conquistas a cualquiera que se te cruce por tu camino, como te pasó siempre, como siempre lo has logrado. Que siempre lograrás acaparar la atención con tu presencia, con tu personalidad, con tu porte de mujer avasallante y exultante dispuesta a todo con el poder del Amor. Quisiera que te recuerden, Selena, por lo que eras en vida, por lo que eras como cantante, como artista, como mujer. Quisiera que te recuerden a través de nuestros sentimientos, de nuestros corazones…
Por eso, Selena, todo lo que hagamos por ti siempre será poco al lado de lo que tú has generado en tan sólo 23 años, casi 24. Que la mejor forma de quererte es demostrártelo todos los días, a cada hora, a cada instante, de la misma forma que lo hacías tú con la gente que más querías, con tu familia, con tus admiradores. Y que ése es el mensaje para todos, para todos los que realmente te quieren. Nunca habrá imposibles, nunca habrá imposibles para recordarte con Amor, desde el momento más feliz hasta el más doloroso, para difundir cada concierto, cada tema, para recordar cada una de tus palabras, cada uno de tus sueños, cada uno de tus anhelos, cada una de tus metas, cada uno de tus objetivos. Que tu sueño hecho realidad reflejado en Selena Etc. seguirá vivo de la forma que sea: sólo es cuestión de proponérselo y tenerte mucho Amor. Que cada estatua, cada mural, cada dibujo, cada imagen tuya tendrá vida si nosotros lo llenamos de tu espíritu, de tu dulzura, de tu Amor. Y nada se deteriorará. Ni siquiera el impiadoso paso del tiempo podrá contigo, Selena. Siempre tu Amor será más fuerte … Y lo será con nuestro cariño, acompañándote, no dejándote nunca sola nunca, recordándote con Amor, esperándote para darte ese abrazo que tanto necesitas, ese cariño que quieres recibirlo todos los días para que se te recuerde como se debe, para hacer de tu recuerdo algo digno y hermoso de compartir contigo para siempre…
Y para cantar contigo “Corazón. No puedo dejar de pensar en ti. Cómo te necesito, mi amor. Cómo te extraño!!”
Te recuerda con tanto Amor, y te quiere, te extraña, te implora, te espera…
Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)














No hay comentarios: