“Lamentablemente debemos anunciar que Selena ha muerto…”
… Yamila se levantó sobresaltada de su cama … Quiso no creer lo que había
soñado … Sonaba tan real que … por las dudas no quiso ni prender ni la
televisión ni la radio para corroborarlo … Algo le hizo moverse cuanto antes a
la casa de Selena … Quería certificar que nada hubiera pasado … Tenía una
intuición y temía por ello … Por un instante pensó que eso podría pasar o
estuviera por pasar y eso la aterraba … Ya bastante sola estaba en la vida como
para que se le fuera lo único que tenía … por su propia elección … A Selena le
debía todo … Darse cuenta de lo que realmente era … Hasta allí su actitud
pasaba del cinismo al pesimismo … Creía que sabía de todo y de todos … De
pronto al descubrir a Selena se supo que era más sensible, más positiva, más creyente
de las personas y de la vida … Con Selena se descubrió cómo era realmente ella,
lo que quería ser, sus elecciones, sus decisiones … Cuando lo supo decidió
dejar su familia, sus amistades, su vida anterior … Sabría que no la
comprenderían y serían atroces con ella … Y Yamila sólo quería ser como Selena
… Una mujer y ser orgullosa de su condición … Estableció otros vínculos, inició
una nueva vida, se rodeó de gente que la comprendería y la alentaría …Pero por
sobre todo que la aceptarían como tal … Yamila estaba contenta con su nueva
vida y tener a Selena como estandarte, como modelo, como guía, como el camino elegido
… Agradeció por siempre haberla descubierto … Pero nunca se acercó a ella … No
hacía falta … Sabía que cada una tenía una función en la vida … Y Yamila estaba
descubriéndose y abriendo su propio camino … Ya vendría el momento de
agradecerle personalmente … Había tiempo … Tiempo de sobra … Selena era muy
joven … Ella no tanto pero tenía mucho por vivir y experimentar …No quería
interrumpir el camino de Selena al éxito mundial y su vida … Como tampoco
quería que se metieran con su vida y con su elección … Para Yamila la vida
personal de cada uno era sagrada … Y no debía ser invadida … Cada uno tiene su
propio desarrollo y evolución … Y eso debía ser respetado … Y ella no quería
meterse en el camino de Selena … Como tampoco que se metieran en el suyo…
Yamila procedió a vestirse rápidamente para ir a ver a
Selena … Por esas extrañas cosas que tiene la mente humana Yamila decidió
vestirse como Selena … Se peinó como ella alisando su pelo y cortándose el
flequillo. Se puso unos boustiers al que ocultó con una pequeña chaqueta. Y
terminó su faena con una minifalda y unas botas negras con tachuelas … Y antes
de salir se maquilló del mismo modo que lo hacía Selena … Se sentía linda y
orgullosa … Por dentro estaba desesperada y angustiada … Pero no iría así nomás
… Iría como quería mostrarse … Iría para que la vieran todos … Iría para que
Selena viera lo que hizo por ella … Iría para que Selena viera en la que la
convirtió … En una mujer linda y feliz … En una mujer contenta por su condición
… En una mujer libre…
Yamila salió de su casa rápidamente … No estaba lejos,
pero tenía un trecho un tanto largo para recorrer … Iba a hacerlo caminando,
pero algo le hizo cambiar de opinión … Vio que el cielo estaba encapotado y
todo indicaba que llovería inexorablemente y mucho … No es que pensara sólo que
la lluvia le arruinaría su indumentaria y que por ello se presentaría de la
peor manera ante Selena … Tenía un mal presentimiento … Trató de recordar qué
día era y después de pensarlo detenidamente, como si fuera un dato crucial para
su destino o el de Selena, supo que era viernes 31 de marzo … de 1995 … Tomó el
autobús y le preguntó al chofer el tiempo que demoraría llegar a su lugar … la
casa de Selena … Llegaría temprano, pensó … Pero el tiempo es relativo … Y le
alarmó pensar si no llegaría a tiempo para ver a Selena … Se sentó en uno de
los asiento del lado de la ventanilla y pudo ver por el reflejo de la luz en la ventanilla su
propia imagen en ella … Se sentía linda y tan mujer … Mientras observaba las
calles y la gente pensó en aquellos tiempos en los que Selena era chica y
viajaba en el Big Bertha de pueblo en pueblo tratando de ganarse la vida con la
gente que la esperaba para cantar y alegrar sus vidas … Y fijó su pensamiento
en lo que sentía Selena y lo que deseaba para su vida además del éxito … Se la
imaginaba por largas horas en la noche mirando por esa misma ventanilla
despierta mientras los demás dormían …Se la imaginaba tratando de triunfar sólo
para lograr cumplir su propio sueño … Luchar para ser feliz … Luchar para ser
libre … Se imaginaba a Selena muy tímida que en condiciones normales tal vez se
hubiese quedado en su mundo tratando de ser una buena diseñadora, pero que la
vida la llevó a exponerse y a saber que si no tenía la valentía de mostrarse
tal cual era y quería ser, no llegaría muy lejos … Y en ese recorrido de
imaginación Yamila podía verse a sí misma … Tal vez por eso se identificaba
tanto con ella … Cuando supo que las circunstancias la obligaban a acercarse a
lo que quería ser y no vivir una vida de mentira, una vida lejos de ella, una
vida lejos de su condición y elección, rompió todas las cadenas y sus miedos
para enfrentarlo y seguir la vida adelante … como mujer, como Yamila … Y dejar
el pasado y su vida anterior bien lejos … Sin negarlo, aceptándolo, pero no
mirando atrás … No volver al dolor …No volver a la culpa … No volver para ver
lo que dirán propios y extraños … Mirar para adelante … Con Selena como guía …
Con Selena como inspiradora … Con Selena para ser feliz y tener una ilusión …
Con Selena para ser Yamila…
De pronto Yamila despertó de su letargo y notó que estaba
por pasarse del lugar de destino … Se levantó, pidió encarecidamente al chofer
que la dejara bajar en ese lugar y éste en forma piadosa lo aceptó … Yamila
bajó rápidamente tratando de fijar bien sus tacos en la escalera del bus y en
la calle para no caer en el medio de su agradecimiento a tan noble gesto ...
Una vez firme en la calle fue directo a la casa de Selena … Tenía terror por la
eventual reacción de ella, pero a la vez el miedo al destino y a su intuición
fueron más fuertes … Llegó a la casa con firmeza y casi corriendo … Su cara
sería se fue transformando en desesperación cuando llegó a la puerta y tocó el
timbre … En la eterna espera pasaron por su mente miles de imágenes … Y se
preguntaba una y otra vez cómo había llegado a ese lugar, cómo había llegado a
ser Yamila y cómo era que estaba allí en esa condición … Temía que Selena se
diera cuenta y no la entendiera … Y pánico que por ello la rechazara … Quería
decirle tantas cosas … Las cosas que se contuvo por años y que apenas su figura
era un atisbo de lo que quiso ser siempre durante toda su vida, y que evitó y
negó por años aceptarlo … Y Selena tuvo tanto que ver con eso … No sabía qué
decir … No sabía cómo mirarla … No sabía cómo Selena la miraría … “¡¡Ey!! ¿¿Qué
deseas?? ¿¿Quién eres??”, alcanzó a escuchar Yamila, y vio que una Selena entre
desconcertada y sonriente se le presentó ante ella tras abrir la puerta de su
casa … Yamila estuvo un instante que sintió eterno sin poder decir nada … Allí
estaba Selena con una remera blanca, un jean, unas zapatillas y una gorra
esperando respuesta … “Lo único que falta es que me digas que te llamas Selena
y voy a pensar qué hago yo aquí”, le dijo Selena y lanzó una de sus clásicas
carcajadas … Yamila sintió un impulso y se largó a llorar mientras se tomaba la
cara con sus manos … Selena se acercó para abrazarla y ambas lo hicieron sin
decir palabra … Sólo se escuchaba los llantos de Yamila … Selena le acariciaba
el pelo, y le decía una y otra vez: “Vamos. No te detengas. Creeme que sé lo
que te sucede … No tienes nada que explicarme … Soy yo la que tengo que decirte
algo, y es agradecer tu admiración y que hayas llegado hasta aquí … Sabes que
me debo al público y lo único que he recibido en estos años es Amor y
reconocimiento … ¿Qué más puedo pedir? Sólo dime qué necesitas y yo haré lo
indecible para complacerte … No puedo dejarte ir sin hacer algo por ti…”, le
dijo Selena tiernamente … Yamila abrió grande los ojos y miró fijamente a
Selena como si de pronto algo se le hubiese revelado, como si de pronto pudiese
saber lo que pasaría de allí en más … “¡¡No vayas, Selena!! ¡¡No vayas!! No sé
a dónde piensas ir, ¡¡pero no vayas!! Estoy aquí por eso. Soñé que decían que …
Y vine para acá … ¡¡Por favor, te lo pido!! Hazme caso aunque sea por hoy … Es
31 de marzo … de 1995 … Está por llover … No sé qué significa todo eso, ¡¡pero
no vayas!! ¿Quieres hacer algo por mí? ¡¡No vayas!! ¡¡Te lo pido por favor!! Yo
sé lo que es perder todo y seguir adelante … No sabes lo que me costó y si lo
hice fue por ti … ¡¡No vayas!! Te juro que si me lo prometes no te molestaré
más ni verás nunca más mi cara … Con que estés viva y feliz con tu vida me
basta … Tú feliz con tu vida … Yo con la mía … ¡¡Pero no vayas!! Cuídate … Si
no lo haces tú, nadie lo hará aunque lo desee. ¡¡No vayas!! Te lo pido por
favor…”, le rogó casi al borde de la desesperación Yamila y abrazó fuertemente
a Selena … Ella también la abrazó en silencio y con lágrimas en los ojos … No
hizo falta nada más … Ese sueño de Yamila … Ese ruego de Yamila … fue el
despertar para Selena … Miró el cielo y notó que sorpresivamente las nubes se
abrían y daban paso a la salida del sol … Selena sonrió, apartó a Yamila y le
dijo: “Entra. Tenemos mucho de qué hablar … Por lo pronto te prometo que no iré
a ningún lado … ¡¡A ninguno!! Te lo dedicaré a ti y luego te llevaré a tu casa
… Ese será mi único movimiento … Contigo … Eso sí, todo con una condición … Que
me cuentes todo y que me digas cómo llegaste a esa decisión…” … Yamila se le
quedó mirando con una sonrisa por la decisión de Selena, pero con una mueca de
temor por su pedido … “Quiero que me cuentes el secreto para parecerte tanto a
mí … ¿Estás segura de qué tú no eres en realidad Selena y yo tu admiradora? ¡¡Vamos!!
¡¡Confiésalo!!”, le terminó de completar Selena y ambas echaron a reír
fuertemente a carcajadas. Selena la tomó del hombro y la condujo para el
interior de la casa. “Estoy orgullosa de tener admiradores tan valientes”, le
dijo Selena. “Porque te tenemos a ti … Sin ti, no seríamos lo que somos y
decidimos ser … ¡¡Y a ti contaré todo, como no lo hice con nadie!! ¡¡Te lo
mereces!!”. Yamila también tomó del hombro a Selena mientras reían y lloraban a
la vez … Estaban viviendo nuevas vidas y tenían que contarlo … para ellas
mismas … Pronto todo volvería a la normalidad, pero con aires distintos …
nuevos, fructíferos … Ambas sintieron que su camino no fue en vano … Y se
sintieron orgullosas ante todo de ser mujeres … Por condición y por elección …
Mujeres bellas y fuertes … Mujeres felices … Simplemente mujeres valientes …
(La valentía de una decisión … Una decisión que puede
traer muchos sinsabores, pero que a su vez trae el placer de sentir que en esa
decisión está la verdadera persona que somos … La vida, la familia, la sociedad
nos puede llevar hacia un camino … Pero está en nosotros resignificarlo dándole
nuestro propio color, nuestra propia identidad … Selena es el mejor exponente
de una mujer que hizo de un mandato familiar su propia decisión y que su triunfo
la llevó a lograr concretar su propio sueño … Selena convirtió la decisión de
todos en su propia decisión, imponiendo su personalidad y estilo … Todos
deberíamos ser tan valientes como Selena en nuestras decisiones cotidianas
tratando de ser lo que realmente queremos y mostrarnos tal cual lo deseamos …
Es un camino largo y sinuoso, con muchos obstáculos, pero que su logro mismo
logra el mayor de los placeres … No hay nada más lindo que lograr lo que uno
quiere … Pero hay algo mejor aún … Mirarse al espejo y reconocerse … Mirarse al
espejo y estar conforme con la decisión tomada … Mirarse al espejo y esbozar
una sonrisa de satisfacción con lo que nos devuelve esa imagen … No es fácil
lograrlo, pero es imperdonable no intentarlo … Y si cuesta el intento y se
pierden las fuerzas, basta con ver a Selena … Ella es el mejor ejemplo de que
todo se puede lograr si uno lo desea … Que todos los sueños son posibles de
cumplir con sólo echando a andar ese deseo oculto que está en nuestras Almas y
en nuestros corazones.)
Y aquí estoy Selena, tratando de buscar mi propia imagen
y mi propio destino … oculto por tantos años … No sé si lo lograré, pero
teniéndote a ti como bandera y como estandarte al menos no podré mentirme a mí
mismo … Contigo aprendí a verme, y a saber qué quiero ser y cómo ser…
Te quiere mucho…
Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)
(Buenos Aires, Argentina)
No hay comentarios:
Publicar un comentario