Ella me está apuntando con su arma ... Siento como si el
tiempo se hubiese detenido ... ¡¡Tengo que salir de aquí!! ... No puedo creer
lo que estoy viviendo ... Siento la amenaza de un final ... De nada servirá que
intente persuadirla ni de impedir su acto siniestro ... Su cara lo dice todo
... Está decidida ... ¡¡decidida a todo!! ... De pronto lo comprendo ... Ahora lo
puedo ver ... Tal vez sea tarde ... pero ahora lo entiendo ... Esa arma ... Esa
arma me la mostró antes ... ¡¡Claro!! Hace sólo dos semanas ... Ese día en el
que yo le dije que se quedara tranquila ... que podía contar conmigo, que no se
preocupara por mi padre ... Recuerdo que ese día me había citado desesperada
... Como lo hizo hoy ... Como lo hizo ayer ... Creí que se quería suicidar ...
Como lo amenazó ayer ... Como lo amenazó hoy ... Pero cuando la tranquilicé ...
ella cambió su cara ... Su semblante de pronto fue diferente ... Como ahora ...
Y allí hizo lo mismo que ahora ... Me mostró el arma ... Sólo que en esa
oportunidad me dijo que la había adquirido por protección ... Nunca entendí
para qué me la mostró ... Pero creo entenderlo ahora ... Me estaba advirtiendo
... Me estaba diciendo lo que me hubiese hecho si la rechazaba ese día ... Lo
que va a hacer ahora ... Yo estaba asustada con el solo hecho de que tuviera
eso consigo ... No capté su “sutileza” ... Tampoco creo que quisiera que yo me
diera cuenta ... Era sólo un mensaje ... interno, para ella, pero no para mí
... Tal vez quería desahogarse, probarse ... Pero ahora me tiene en su mira y
está decidida ... Tengo que salir ... ¿pero cómo? ... Me siento paralizada ...
El tiempo no se mueve ... Nada se mueve ... Es un instante ... Sólo un instante
... Ahora me doy cuenta ... Me doy cuenta de todo ... tarde ... Ahora entiendo
para qué quería verme a solas ... Por qué insistió tanto desde ayer ... Por qué
su cara de fastidio cuando fui ayer, porque advirtió que estaba con Chris ...
Ahora entiendo por qué insistió tanto en vernos a solas y que la llevara al
hospital ... Ahora comprendo por qué cuando tuvo oportunidad de decirle a los
médicos lo que supuestamente le había pasado, no quiso hablar y me dejó en
ridículo ... Lo tenía planeado ... Todo planeado ... ¡¡Pero qué tonta, qué
tonta he sido!! Caí en una trampa y no creo que pueda salir de ella ... Sólo me
queda intentar salir rápido, que ella no acierte y pedir ayuda ... Estar lejos
... lejos de aquí ... ¿Cómo llegué aquí? ¿Cómo estoy sola en esta pútrida
habitación en vez de estar con mi esposo, con mi familia, con mis perros, con
mi boutique, en el estudio? ¿Qué hago aquí? Me llevó a esta ratonera y no podré
salir ... Se me vienen a la mente miles de imágenes ... Recuerdo cuando le
canté a mi padre por primera vez, y su cara de asombro y de orgullo ...
Recuerdo la primera vez que canté en público y lo nerviosa que estaba ... Recuerdo
el llanto de mi madre cuando nos quedamos sin casa, y la cara adusta de mi
padre y su bronca que contenía su dolor ... Recuerdo que ese día me juramenté
no llorar y proponerme llegar a lo más alta para salvar a mis padres y cumplir
mi sueño de ser diseñadora ... Recuerdo los años de trabajo, de esfuerzo, de
dedicación, de privaciones ... y cómo salimos adelante sólo porque estábamos
decididos a salir, y no sólo salir sino triunfar ... Recuerdo mi primer bustier
... Mis primeras palabras en español ... Cuando conocí a Chris ... Cuando lo
besé por primera vez ... Cuando inauguré mi primer local de “Selena Etc.” ...
Cuando tuvimos el primer N° 1 ... Cuando nos fuimos con Chris a Jamaica para vivir
nuestra Luna de Miel atrasada ... La emoción de comprar nuestra nueva casa para
vivir allí para siempre ... Ese nuevo hogar que ni siquiera ocupamos ... ¡¡No
lo puedo creer!! ... Si tenía todo eso ... Si tengo todo esto ... Si voy a
tener todo aquello ... ¿Qué hago aquí? Ahora que sé lo que me puede pasar ... Recién
ahora me doy cuenta del error ... Me ha dejado llevar por el impulso, por la
decisión de ella ... No era mi decisión ... Yo no quería esto ... Entonces,
¿por qué fui? ¿Para qué vine aquí? Un instante ... Un momento fatal ... Un
callejón sin salida ... Extraño a los que quiero ... No puede ser que todo
termine aquí ... ¡¡Es injusto!! ... El Señor no me puede dejar sola con este
monstruo ... Pero yo no caeré aquí ... No ... ¡¡De ninguna manera!! ... Debo
salir de aquí ... Haré lo que siempre he hecho ... Luchar ... Luchar por mí
hasta el último instante ... Me duele tener que tomar una decisión de este tipo
... No es mi estilo huir ... Es que si no lo hago ... Tengo una angustia enorme
... Siento puntadas en el estómago ... Algo luminoso cubre mi cuerpo y nubla mi
vista ... Tengo que salir ... ¡¡Tengo que correr!! ... No sé lo que sucederá
... Pero no me daré por vencida ... Sé que ella no se saldrá con la suya ...
aunque logre su objetivo ... No caeré aquí ... Es lo que espera ... Si caigo
aquí dirá que todo fue un accidente y no habrá testigos que se lo refuten ...
Pero si salgo ... Tal vez me salve, pero si no lo logro ... quizás alguien me
vea ... y tal vez me socorra ... o al menos verá que ella lo planificó todo ...
absolutamente todo ... No lo puedo creer ... Un instante ... sólo un instante
... Ella me está apuntando ... Ya no disimula nada ... Sus ojos inyectados en
sangre delatan su ansiedad por el desenlace de la escena ... Voy a salir ...
Todo se decidirá en el próximo instante ... En apenas un segundo sabré qué será
de mí ... y si siento que el final llega, al menos dejaré mi último aliento
para llegar a mi esposo, a mi familia, a quien realmente me quiera ... o dejaré
hasta mi último aliento para que se haga justicia con esta persona que me apunta
con su arma y que hizo lo peor que se puede hacer conmigo ... mentirme ... Ahora
me voy ... y que sea lo que el Señor quiera ... ¡¡y que lo que desee es verme
viva en el próximo instante!!
(Es muy difícil describir momentos límite ... También
cuando uno se da cuenta de algo y ya es tarde, muy tarde ... Es triste luchar
tanto de una manera honrada, laboriosa, auténtica y esforzada para llegar a un cumplir
el sueño de toda una vida, y que todo se tire por la borda por el accionar de
gente que abusa de nuestra confianza, de nuestra nobleza, de nuestros
principios ... Lo que le ha sucedido
recientemente a Christina Grimmie como antes a Selena nos muestra cómo en un
segundo se puede pasar de la gloria a la desgracia, de la cumbre al ocaso, del
triunfo a la derrota, de la vida a la más absurda muerte ... No puedo dejar de
pensar en lo que ellas pensaron en ese segundo fatal, en ese segundo en el que
el/la asesino/a empuñó el arma con un solo objetivo y desde un lugar, desde un
único lugar en el que se ha sentido amo/a y señor/a del destino de una persona,
en un único lugar en el que podía destacarse y desde un lugar en el que podía
mostrar su verdadera cara, sus verdaderas intenciones, su verdadera accionar
... No puedo dejar de pensar en esas jóvenes que habían luchado tanto y de una
manera tan noble, con un sueño, con un camino trazado y tanto por recorrer, y
que su felicidad se truncara por la intención de un par de psicópatas que lo
único que pretenden de sus relaciones y amistades es someterlas para sacarles
su energía y vitalidad, y vivir de ellas ... Triste, todo muy triste ... Espero
que alguna vez podamos honrar a las personas que se ganan su lugar y la vida honestamente
no sólo siendo auténticas, sino teniendo en cuenta que nunca hay que dejarse
llevar por los encantadores de serpientes y que lo importante es hacer lo que
uno desea, seguir el camino que se elige y no escuchar a esa gente que sólo
piensan en ellos y que quieren que nos convirtamos en unas simples marionetas
de sus deseos ... La idea no es esconderse para que estas cosas no sucedan,
sino salir a la luz con nuestras ideas, sentimientos y convicciones claros, y
con ello dejar expuestas a las personas que lo único que tienen de hábil es
manipular, herir y mentir ... Es sólo estar atentos ... Es sólo seguir por el
sendero que elegimos para llegar a nuestro objetivo de felicidad...)
Y yo seguiré tu camino, Selena, para contribuir al logro
de tu gran sueño: hacer de éste un mundo mejor...
Te quiere y extraña mucho...
Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)
(Buenos Aires, Argentina)
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