No quiero saber qué pasará mañana, Selena...


Nunca me sentí tan sola y desolada como en esta noche, en esta lluviosa y negra noche del 31 de marzo ... Nunca como en esta noche siento que he crecido de golpe ... como si en vez de los 15 años que tengo tuviera 40 o 50 años ... Si crecer es dolor, ésta es la mejor demostración del crecimiento ... Tengo prendida, como todos, una vela, una vela que se apagará pronto, aunque la prenda de nuevo o la reemplace por otra ... Es que sé que en cuanto se apague mi vela, se apagará mi esperanza, se apagará mi ilusión de que todo lo que estoy viviendo es una pesadilla, una cruel pesadilla con un final imprevistamente feliz ... No quiero que se apague mi vela como no quiero que se termine nunca esta noche ... Porque sé muy bien que en cuanto llegue el sol del día siguiente, cuando se enciendan las luces del nuevo día sobrevendrá la realidad, la triste realidad ... Que ya Selena no está entre nosotros y que habrá que seguir la vida sin ella ... Es intolerable e inaceptable imaginarme eso ... Es imposible poder seguir igual en esta vida sin ella ... Por eso no quiero que se apague mi vela ... Por eso no quiero que jamás termine la noche ... Quiero aferrarme a esta noche, a este día, a este último día de Selena con nosotros ... Porque este 31 de marzo aún estaba ella al lado nuestro, estaba ella con vida ...  La lluvia apenas ha mermado pero yo siento un frío que me carcome el Alma ... Sólo me abriga ese llamita, ese calorcito que simboliza a mi Selena, a mi hermanita que se me va como ese fueguito, como esa luz pequeña que fue grande hasta hoy, pero que se va apagando lenta e inexorablemente ... De nada sirven los abrazos de mi madre ... Ni siquiera puedo conmoverme por los gritos y lamentos de mi hermana mayor ... Esos gritos que cada tanto surgen del silencio sepulcral y del lamento desconcertante ... “Ya sabes, m’hija, si quieres podemos irnos a casa cuando quieras...”, intenta convencerme mi madre. Pero ni bien termina de decirme eso, desiste de la idea y me sigue abrazando. Sabe que no puedo ni quiero moverme de aquí, y que en el momento en el que lo haga será en silencio y sin dar aviso ... Y aún falta mucho tiempo para que lo haga ... Quizá mañana, quizá cuando me tenga que despedir de Selena ... Hoy no puedo moverme de aquí ... Estar quieta mirando la nada misma y aferrada a mi vela es lo único que me sostiene ... Sé muy bien que si quisieran sacarme de aquí me pondría como loca y gritaría como mi hermana ... Porque para mí hoy no hay mañana, hoy no hay futuro ... Crecí de golpe ... De pronto me di cuenta de que desperté de un largo sueño ... De un sueño que parecía tan real como hermoso ... De un sueño que me decía que vivía en el paraíso, que pertenecía al mundo de Selena, de un mundo en el que todo era posible, de que todo se podía realizar y de que el destino lo hacía uno ... De pronto se me viene a la mente aquel reportaje que le hiciera Cristina y cuando Selena le decía que no creía ni en los horóscopos ni en el destino ... Que el destino dependía de uno, decía ... Y hoy estoy aquí pensando si acaso no era mejor que Selena fuera supersticiosa y que creyera en los mensajes, en las señales, en los avisos de quién sabe quién ... Sí, tal vez debió hacerlo ... Alguna vez Selena dijo que tenía pesadillas recurrentes y que eran tan espantosas que prefería no recordarlas ... Tal vez eran una señal, tal vez era un mensaje de alguien que le avisaba lo que le podía llegar a pasar ... Tal vez ... Hoy todo puede ser posible ... Yo tampoco creía en esas cosas como Selena ... Pero ahora, ahora que veo lo que le pasó y sintiéndome tan desamparada sin su presencia ... ahora no sé qué pensar ... Es que el sueño terminó ... Es que ya no puedo creer en mis fuerzas, no puedo creer que yo puedo forjar mi destino ... Selena lo estaba haciendo, y un acto de esa vil tiró años y años de trabajo, de esfuerzo y de talento por la borda ... Esa mujer nos vino a decir que uno no es el dueño de su vida, que cualquiera puede acabar, deshacer y destruir lo que uno hizo con toda el Alma y con tanto Amor ... No, ya las cosas no serán las mismas ... Ahora sé que no alcanza con el trabajo, con la dedicación, con el talento ni con el esfuerzo ... Ahora sé que dependo de otras cosas para vivir ... y ahora sin Selena, para sobrevivir ... Mañana volveremos a creer en los horóscopos, en el destino, en las señales ... Recurriremos a miles de personas para que nos ayuden, para que nos saquen de esta medianía y de esta tristeza ... Mañana vendrán otros tiempos ... De una vida sin Selena ... De pensar que no todo se puede lograr, de que no todos los sueños son posibles ... Hoy crecí de golpe ... Volví del paraíso ... Entré de golpe a este mundo, a este realidad ... Mañana tendré que sobrevivir, mañana tendré que aceptar las cosas como son ... Mañana tendré que aferrarme a las creencias que no creo y aceptar las malas nuevas como el destino irremediable de mi vida, de nuestras vidas ... Mañana aceptaré que lo imposible es eso ... imposible ... Mañana entenderé por fin que se me ha ido Selena...

Sé que hoy participamos del mismo dolor, estamos hermanados por el mismo sentimiento ... Sé que por mucho tiempo viviremos como si Selena estuviera entre nosotros ... Lo puedo sentir ahora ... Cada tanto escucho que la gente intenta cantar entre sollozos sus canciones o grita “¡¡Selena vive!!”. Sé que por mucho tiempo escucharemos una y otra vez sus canciones y compraremos todos sus discos ... Sé que esperaremos que encierren a la asesina para siempre y nos pondremos contentos cuando ello suceda ... También sé que se harán miles de homenajes y recuerdos, y quizá hasta hagan una película ... Y así podremos estar un largo tiempo viviendo como detenidos en el tiempo, como si nada hubiera pasado, viviendo como si Selena estuviera siempre entre nosotros cantando, riendo, bailando, diciéndonos que todo se puede lograr con una sonrisa, que todo se puede lograr con trabajo y honestidad ... Pero también sé que llegará el día en el que nos daremos cuenta de que Selena se ha ido y eso será terrible ... O tal vez peor, que ya sea tarde para que podamos reaccionar, para que nos demos cuenta de la magnitud de lo que hemos perdido con su partida ... Ya nada será lo mismo ... Desde mañana mismo ... Ya no estará Selena ... Y sin ella no estará ni su fuerza, ni su ánimo, ni su espíritu, ni sus sueños, ni sus logros, ni su vida ... Mañana nos daremos cuenta de que ya dependeremos de ciertas cosas para seguir viviendo, de que tendremos que tener a Selena presente en nuestros corazones para seguir viviendo, pero no para forjar nuestro destino ... Selena no podía mentir ni dejarse mentir ... Yo tampoco ... Por más que hoy no lo queramos reconocer, tendremos la impresión o la certeza de que su ejemplo de vida, su modo de entender su trabajo, sus relaciones y su sentido en este mundo no serán seguidos ... Más de uno dirá: “¿Y cómo seguir su camino si uno ve cómo ha terminado?” ... Podrá pasar el tiempo, mucho tiempo ... Tal vez vivamos el resto de nuestras vidas no queriendo ni ver lo que sentimos en lo más profundo de nuestro ser, como hizo Selena con sus recurrentes pesadillas ... Pero sabremos que si seguimos ese camino tal vez nos pase lo mismo, que nos topemos con personas como esa asesina ... personas que no son ni desconocidas ni ajenas a nosotros ... personas que se convierten en nuestros confidentes, en nuestros más íntimos amigos, en personas de extrema confianza, en personas que se nos acercan con las mejores de las intenciones y con la inobjetable intención de “ayudar” ... Y después de que depositemos nuestra confianza, nuestros sentimientos y hasta nuestros secretos, convertirse o querer convertirse en nuestros dueños, en los dueños de nuestro destino ... Tal vez eso le pasó a Selena ... Tal vez quiso revelarse contra esa persona que quiso marcarle su destino en el momento en el que Selena armaba el propio con tanto ahínco, con tanto tesón, con tanto esfuerzo ante tanta adversidad, con tanto Amor, ante tanto individualismo, egoísmo y maldad ... Y se encontró con ese final, con ese destino vaya a saber marcado por quién ... No puedo dejar de pensar qué será de nosotros si eso le pasó a Selena ... Y así lo pensaremos todos ... Los que estamos aquí y los que lloran a Selena en todo el mundo ... en sus casas, en sus trabajos, en la calle ... ¿Qué nos queda ahora que Selena no estará más presente en nuestras vidas y en nuestro destino? ... No ... Ya nada será lo mismo ... Yo no me puedo engañar ... Me aferro a esa llamita porque es lo único que me queda de esperanza, lo único que me queda de Selena ... Mañana ... Mañana será otro día ... Mañana será otro mundo ... Sí, ya lo sé ... Mañana surgirán nuevos artistas ... Y todos mostrarán su Amor a Selena ... El genuino y el conveniente ... Pero no creo que nadie pueda emularla ni ocupar su lugar ... Tal vez muchas con razón dirán lo que nosotros sentimos ... Que Selena es única e irrepetible, que no podremos reemplazarla con nada ni con nadie ... Pero también será cierto que nadie querrá seguir ni el ejemplo ni el camino de Selena ... Que en el mejor de los casos muchos querrán imitarla cantando como ella, vistiéndose como ella, paseándose por varias ciudades dando su mejor tributo evocando sus presentaciones y hasta intentando hacer en vivo aquellos temas en inglés que Selena sólo nos dejó en grabaciones ... Será como ver una y otra vez a Selena como hasta el día de hoy pero pasando el tiempo, y ella cada vez más lejos de nuestras vidas y de nuestros pesares ... Y seguro que surgirán otros artistas ... Estoy convencida de que saldrán infinidad de artistas de nuestra raza para ocupar el lugar de Selena pero haciendo un camino diferente, bien diferente a Selena ... Tal vez se muevan como ella en el escenario, tal vez abran cadenas de boutiques y hasta lancen nuevas líneas de perfumes ... Pero no seguirán el camino de Selena ... Seguirán lo superficial, mostrarán el envoltorio, pero no seguirán jamás su espíritu ... Nunca lo expresarán públicamente, pero mirándose el espejo se dirán: “Puedo mostrarme como Selena, puedo reírme como ella y hasta seguir su mismo camino artístico una vez que me consagre mundialmente ... Pero en lo demás ... Ya vimos lo que le pasó por ser como es, por ser tan frontal, por ser tan honesta, por ir con la verdad en la vida ... Todo muy lindo, pero viene cualquier loco y te saca de tu vida antes de que te des cuenta ... Todo bien con Selena, pero su ejemplo es bueno para los cuentos de hadas ... Porque el mundo es otro ... Yo no me voy a proponer cambiar el mundo. Yo no voy a forjar mi destino ... Me adaptaré a lo que hay y me dejaré llevar por lo que me digan o por lo que me dicten, por el camino que Dios eligió para mí en este mundo ... Yo quiero triunfar y haré lo que sea para lograrlo ... Y nadie me lo quitará ... como a Selena ... El destino me dice que las cosas son y deben ser así...”. Sé que lo dirán y actuarán en consecuencia ... Sé que no me gustará y sé que no le gustará a tantos otros ... Pero mañana ... mañana tendremos que aceptarlo ... como aceptar que Selena se nos ha ido y que no volverá nunca ... ni ella ni su espíritu...

Veo a mi alrededor y veo a tantas chicas como yo ... Veo a niñas muy pequeñas, chicas de mi edad, mujeres más grandes, gente mayor ... Todas latinas como yo ... Todas mujeres que ya no hablan la lengua de sus ancestros y que aprendieron el inglés para lograr el sueño, el viejo sueño americano ... Todas mujeres como Selena ... Supongo que sienten lo mismo que yo ... Que ella era la encarnación de nuestros sueños, la niña que había llegado, la mujer que pudo con todo, que rompió las barreras del idioma, del machismo, del destino inexorable de derrota ... A veces me río cuando escucho que dicen que a Selena le pasó esto por ser ingenua, un tanto confianzuda y atada a los designios de su padre ... Se ve que la conocían poco ... Selena tenía un tremendo carácter y una personalidad avasallante ... ¿Acaso no la hemos visto en el escenario? ¿Acaso no la hemos visto cómo era cuando le queríamos hablar o simplemente pedirle un autógrafo? No sé por qué, pero recuerdo una y otra vez las palabras de Selena en aquel reportaje que le hiciera Cristina ... Me acuerdo la contrariedad que me produjo cuando le preguntó por una supuesta declaración suya de que había que ser sumisa con los varones y que sólo viéndola no podía creer que pudiera pensar semejante cosa ... Yo mucho menos podía creerlo cuando Selena acababa de decir que era una mujer dominadora y avasallante, y que tuvo que afrontar y hacerse fuerte desde muy pequeña cuando veía que no le daban trabajo al principio de su carrera por ser pequeña y por ser mujer ... Cuando Selena comenzó a explicarle lo de la “sumisión”, comprendí que ella no hablaba de ello, sino que decía que debía ser comunicativa con los hombres, que había que hablar y entenderse. Evidentemente su “español corto” le hizo decir “sumisión” en vez de “comunicación”, como seguramente al hablar de “hombres” se estaba refiriendo a su esposo y no a los varones en general. Con sólo escuchar su explicación me daba cuenta de que ella lo que le quería decir era que cuando uno se casa debe ser contemplativa con lo que desea su pareja y dejarlo hacer en vez de atarlo a sus deseos y pensamientos ... Me sigo riendo de pensar que alguien podía imaginarse a Selena sumisa cuando ella se casó en secreto con Chris en rebeldía porque su padre se oponía a su noviazgo en la creencia de que casarse tan joven podía perjudicar a su carrera ... Justo Selena una persona sumisa ... ¡¡Jamás!! ... Ella tenía tan claro las cosas con tan sólo 23, casi 24 años ... Podía decir que soñaba con tener hijos, pero que todavía no quería tenerlos porque pensaba que tenía tiempo y porque antes debía terminar con innumerables proyectos por los que trabajaba y se desvivía todos los días ... Hasta pensaba en que una vez que tuviera el primer hijo no permitiría que se lo cuidara otro, que ella misma se encargara de educarlos con el mismo rigor con que la educaron a ella ... Tenía tanto futuro ... Tenía tanto por hacer ... Había logrado tanto en tan poco tiempo ... Estaba forjando su destino, tal como lo había pensado, tal cual su filosofía de vida ... Miro la llamita y ya le queda muy poco tiempo para apagarse e irse para siempre ... como el destino de Selena y de todos nosotros ... Dios la guarde y nos guarde ... Ahora todo depende de Él y no de Selena...

Vuelvo a mirar a mi alrededor y veo esas caras, esos llantos, esa tristeza, ese desamparo ... Pero también pienso que todos, como yo, tendrán que levantarse de su letargo y afrontar sus vidas, levantarse de sus camas, abrir las ventanas, mirar el sol, salir al colegio, a sus trabajos, mirar las caras de los demás, volver a hablar, a sonreír, a sentir, volver a escuchar la radio, ver la televisión, volver a escuchar música y mirar otros artistas ... Sí, eso ocurrirá ... inexorablemente ... Por más que estemos días, meses y hasta años hablando de Selena, lamentándonos por su partida, llorando, buscando un por qué, reviviendo una y otra vez la fatalidad viendo a la asesina, ese momento llegará ... Y de pensarlo me dan ganas de marcharme para siempre de mi lugar y de mis afectos ... Para poder borrar lo que he vivido ... Para no vivir del pasado, de la nostalgia y de pensar en lo que pudo haber sido y no fue ... No quiero vivir con esta mochila, esta mochila tan pesada que empiezo a cargar hoy con el arrebato de Selena de mi vida ... ¿Qué voy a hacer? ¿Qué puedo hacer? Querría irme a una isla desierta por mucho, mucho tiempo ... Y no pensar, no sentir, estar inmune a todo, a salvo del dolor, de la ausencia, de la tristeza ... No sentir ... No es que no pueda vivir sin Selena ... Simplemente no puedo vivir sabiendo que ella no está ... ¿Acaso se puede entender lo que siento? No puedo concebir que Selena no esté con nosotros ... ¿Cómo voy a hacer para vivir sin compartir sus éxitos, su conquista del mundo, su carrera de diseño, el nacimiento de cada hijo, la felicidad con su esposo, sus premios, las tapas de todos los diarios y de todas las revistas con su figura y eterna sonrisa? ¿Cómo voy a tolerar no compartir su vida hasta el momento de envejecer juntas con una sonrisa después de las alegrías que nos dio la vida? ¿Cómo voy a hacer? ¿Acaso no se entiende? ¡¡Selena era como alguien de mi familia!! ¡¡Era una hermana más para mí!!! No sólo la admiraba ... Yo también la quería ... Era mi modelo, mi guía, mi camino, mi destino ... Selena ahora no está ... ¿Quién será ahora la que nos diga con sus palabras y con su ejemplo que creamos en nosotros, que sigamos adelante pese a todo, que trabajemos, que estudiemos, que seamos buenas personas, que siguiendo ese camino auténtico y genuino tendremos garantizada nuestra felicidad? ¿Quién? ... No quiero pensarlo, porque sé que algún día buscaremos a ese alguien, o alguien se nos presentará o nos harán presentar para ocupar ese lugar ... Y yo no quiero que eso ocurra, que jamás pase que vengan esos nuevos artistas con sus nuevas caras sonrientes, sus nuevos mensajes, sus nuevos personajes, sus nuevos ejemplos ... Yo no quiero que venga nadie a ocupar el lugar de Selena, yo no quiero que llegue nunca el mañana, y no quiero que vengan los días de los eternos homenajes y recuerdos que se harán cada vez más fugaces y artificiales con el paso del tiempo ... ¡¡Yo sólo quiero que traigan a mi Selena!! ¡¡Yo sólo quiero que venga ella!! ¡¡No quiero que se acabe nunca la noche!! ¡¡No quiero que se apague nunca mi vela!! ... De pronto me veo parada con los ojos desorbitados y sollozos, y mucha gente mirándome con cierto temor, tristeza y comprensión ... Mi madre me toma suavemente mientras trata de disimular el dolor que le genera mi angustia y desesperación ... Me convence de que me siente y me devuelve mi vela ... En realidad no es la misma ... Me trae otra pequeña pero nueva para que pueda “tener” a Selena por un poquito más de tiempo ... Yo la tomo sin chistar, casi con el alivio y resignación que recibe un bebé el chupete después de estar llorando y gritando sin sentido aparente por mucho tiempo ... Me quedo aferrada a la vela con mis dos manos mirando el piso sumida en la más profunda resignación ... Empiezo a pensar que no faltará mucho para que nos convoquen a un megaconcierto en homenaje a nuestra Selena y todos iremos a él como esperando que esté Selena, como imaginando que ella vendrá para acabar con esta pesadilla y con esta tristeza ... Empiezo a pensar que no faltará mucho para que nos acostumbremos a vivir cada día tomando sus cosas, aferrándonos a ellas como oro, comprando todo lo que aparezca de ella para sentirla más cerca, para no perder su Legado, para vivir con intensidad con cada cosa que nos dejó ... Y tenerlas y guardarlas, volverlas a tomar y sentir que tenemos a Selena con nosotros y permitirnos pensar aunque sea por un instante que nada ha pasado, que ella nos viene a traer su alegría y nosotros compartirla ... Lo puedo ver, lo puedo sentir ... Lo veo en la llamita de mi vela que significa hoy la Almita de Selena que se mantiene viva para sostenerme, para darme calor, para darme fuerzas, para darle un sentido a este mundo sin ella ... Sí, un mundo sin Selena ... Cuesta creer que ya esté diciendo esto, que será tan recurrente afirmarlo cada día, cada mes, cada año ... No sé qué haré mañana, no sé qué será de mí ... Pero lo más penoso, lo realmente penoso es que ya Selena no se pueda hacer esa misma pregunta ... Eso es algo del cual vivirá conmigo para siempre ... Eso es algo que me hará sentir culpable el resto de mi vida ... Siempre pensaré que tal vez pude haber hecho algo, que pude haberme dado cuenta, que tal vez pude haberlo impedido, que tal vez algún día se pueda volver el tiempo atrás y pueda evitar esta atrocidad cometida a Selena ... Siempre lo pensaré ... Viviré obsesionada con ese pensamiento hasta el último día de mi vida ... Moriré pensando que algún día Selena volverá para hacernos felices y viviendo su vida, esa vida por la que luchó tanto, esa vida que se merecía más que nadie...

No quiero pensar en el mañana ... Sólo pienso en que esa vela no se extinga jamás, como esta triste noche ... No sé si podré despedirme de Selena ... No sé si podré verla en ese estado ... No quisiera tener que dedicarle unas palabras, mi saludo y mi llanto ... No sé si Selena querría eso, que presenciáramos un espectáculo del cual nunca imaginó que iba a protagonizar ... No ... No sé si podré hacerlo ... Me aferro a esa vela y más que unas palabras de despedida pienso en un deseo ... Miro el cielo nublado en el que se abre un pequeño resquicio en el que se ve sólo una estrella ... Sonrío y cierro los ojos fuertemente hasta poderlos sentir ... Sólo le pido a Selena que jamás apague mi llama, que jamás me haga vivir un día sin ella, que me siga acompañando, que siga siendo mi guía, mi camino y mi destino ... Sólo le pido eso ... Que siga viviendo su vida ... Que ofrezco la mía aunque ella nunca no la acepte ... Abro los ojos y miro la llama con una sonrisa ... Observo de nuevo el cielo y ya no está la estrella ... Sólo me queda esperar, esperar que mi vela nunca se apague, que el mañana nunca se produzca o que el mañana la tenga a Selena de nuevo conmigo ... Cierro los ojos con fuerza, con mucha fuerza ... Ya no los volveré a abrir .. No querré ver el mañana ... No miraré el sol ... No escucharé a nada ni a nadie ... Sólo esperaré una señal, una voz, un sonido, y las palabras de Selena para que me diga que ya no tema, que ya puedo abrir los ojos, que ya puedo ver este mundo, porque ella está de nuevo a  mi lado y que lo de hoy es cosa de ayer ... lo de hoy sólo fue una pesadilla, una cruel y absurda pesadilla de la que no querremos vivir jamás ...Dejo a un lado la vela y me apoyo en los brazos de mi madre ... Espero que mañana esté feliz en los brazos de Selena...

(La esperanza es lo último que se pierde ... El que ama a Selena se levanta cada día esperando que lo que ha vivido en los últimos años sin ella haya sido un mal sueño, una cruel pesadilla que terminará el día que vuelva a ver a Selena ... Tal vez pensemos que el destino fue cruel con ella ... Pero deberíamos rebelarnos contra ese “destino” ... Selena creía que cada uno era forjador de su propio destino ... Y dudo mucho que Selena trabajara tanto para tener ese final tan cruel e inconcebible ... Tal vez sea hora de que cada día trabajemos por nuestro destino y no esperar nada de los demás ... Si lo logramos, hemos dado un gran paso para nuestras vidas y para la humanidad ... Y tal vez, cuando llegue ese día, nos despertaremos y tendremos a Selena nuevamente con nosotros y su eterna sonrisa de satisfacción por el deber cumplido ... Espero que algún día ese deseo se haga realidad, por el bien nuestro, del mundo ... y de Selena)

Tú eres mi destino, Selena ... Y sé que pronto, muy pronto estaré contigo...

Te quiere mucho...

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)



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