A veces
pienso que lo que para uno es la mayor virtud para otro puede ser el peor de
los pecados ... Me pregunto si estamos realmente preparados para aceptar a los
demás tal cual son. Me pregunto también si estamos preparados para mostrarnos
en la vida como querríamos mostrarnos ... Hagamos un pequeño ejercicio ...
Contestémonos las siguientes preguntas: ¿cómo querríamos ser?; ¿cómo querríamos
que la gente nos vea?; ¿qué es lo que más anhelamos?; ¿qué nos hace más
felices? Y una vez que, indagando en lo más profundo de nuestro ser,
encontramos la respuesta a esas preguntas mirarnos en un espejo, ver nuestras
propias Almas, y cerciorarnos de si algo de lo que mostramos y somos cada día
tiene que ver con las respuestas que hemos dado. Siempre el peligro de
sentirnos frustrados por no lograr hacer lo que queremos es convertirnos en
resentidos ... Y, peor aún, es probable que si estamos así, al ver que alguien
es feliz por lo que es y siente, seguramente lo atacaríamos para hacerlo sentir
tan frustrado como nosotros mismos ... Así como el ser humano tiene más
facilidad para hacer el mal que para hacer el bien, también le es más fácil
eliminar aquello que nos demuestra que somos infelices que tomar su ejemplo y
exaltarlo para buscar nuestra felicidad ... A veces me pregunto, viendo lo que
ha sido siempre la humanidad por siglos enteros, si este mundo estaba preparado
para aceptar a Selena. Por algo su vida terminó como terminó ... En este mundo
los buenos mueren, la gente con buenas intenciones termina dañada, las personas
que se muestran como son corren serio peligro en su andar por la vida, ya que
se exponen a la oscuridad de los demás ... Selena nos demostró que se podía
llegar muy lejos en la vida siendo bueno, siendo sincero, siendo auténtico, no
hablando jamás mal de nadie para adquirir notoriedad, hacer del trabajo una
virtud para lograr cualquier objetivo, no ser conformista, siempre buscando
perfeccionarse, no pensar en que nada se podía hacer aun estando en el mayor de
los desamparos ... Selena demostró que sólo necesitó de su talento, de su
trabajo, de su honestidad y de su constancia para llegar a ser alguien en la
vida ... ¿Cuántos en este mundo, fundamentalmente en el mundo del espectáculo,
son capaces de seguir ese camino? ¿Cuántos en este mundo se muestran en la vida
tal cual son sin esconder nada, sin mostrar una imagen equívoca o falsa de su
vida? Selena fue la persona ideal, la artista ideal, la mujer ideal, el ejemplo
ideal, la vida ideal ... ¿Y por qué le pasó esto? ¿En qué falló? ¿Cuántos de
nosotros nos hemos preguntado esto y cuántos nos hemos dicho que tal vez se
confió demasiado, que tal vez le faltó algo de “maldad” para manejarse con
alguna gente, que no debió exponerse tanto, que debió cuidarse más para no
mostrarse tal cual era? ... Y si hubiésemos tenido la oportunidad de decirle
esto mismo a Selena, y de que ella nos escuchara y actuara de acuerdo a nuestro
consejo, ¿Selena hubiese sido la misma?, ¿sería tan querida y admirada como lo
fue?, ¿nos hubiese impactado como nos impactó?, ¿hubiese tenido más éxito? A
veces pienso que todos le hubiésemos aconsejado a Selena que no sea como es para
salvarse ... Y ése, precisamente ése, es un signo inequívoco de que este mundo
siempre estuvo mal, que no estaba preparado para contener a Selena, que no
tenía ni la bondad ni la constancia ni las ganas de hacer y de vivir que tenía
Selena en todos los ámbitos de nuestras vidas...
Me podría
contentar con decir que Selena fue víctima de una psicópata. Me podría
contentar con afirmar que ni ella ni su familia alcanzaron a ver la dimensión
del peligro que los acechaba. Podría contentarme con decir que confiaron mucho
en las personas que tenían a su alrededor. Podría decir que al fin y al cabo
ellos pensaban que tenían todo controlado y no era así. Podría decir que el
padre pecó por confiar en sus propias fuerzas, en pensar que a la asesina era
cuestión de pegarle cuatro gritos y alejarla para tenerla controlada a
distancia ... Pero yo no me puedo contentar con eso. Hacerlo es convalidar que
el mal siempre triunfará sobre el bien, que la falsedad será más provechosa que
la autenticidad, que la hipocresía logra mejores resultados que la
espontaneidad. ¿Qué hemos hecho nosotros en estos años para revelarnos frente a
esta realidad y hacer de este mundo algo mejor? Selena no sólo fue una gran
artista sino una gran persona que nos indicó con palabras y hechos que otro
mundo era posible, que había otra posibilidad para llegar al éxito sin trampas,
sin concesiones de la peor calaña, con buenas intenciones, siendo una buena
persona que se mostraba tal cual dentro y fuera del escenario. ¿Cuántos
siguieron su ejemplo? ¿Quién tomó la posta y enarboló su bandera para seguir su
camino y con su ejemplo llegar al éxito? ... Creo que la respuesta es más que
obvia. Frente a lo doloroso del final de Selena y de nuestra realidad como
sociedad, preferimos pensar que tal vez Selena se equivocó, que pecó por exceso
de confianza, que fue “demasiado buena” con todo el mundo ... Y para apoyarse
en ello se ha dicho que se exponía demasiado con sus fans, que no ponía
límites, que se daba con todo el mundo, que podía ser fácilmente atacada por
alguien ... Quien dice esto con cierta seriedad seguramente ignora la historia
de Selena hasta en lo más elemental. Porque a cualquiera que dice eso se le
puede fácilmente responder que Selena no fue atacada ni por ningún fan alocado,
ni por un grupo comando, ni por una banda terrorista, ni por un desconocido que
lo hizo accidentalmente ... Selena fue atacada por una persona de su entorno de
confianza más íntimo, alguien del cual ni ella ni su familia podían imaginar
que haría algo semejante ... Todavía causa pavor y consternación leer a Chris
en su libro cuando dice que dos semanas antes del nefasto día la asesina le
mostró el arma a Selena y que ni aún así nadie vio peligro alguno ... Y cuando
se consumaron los hechos, todos pensaron en el costado más sórdido de la
historia. Todos pensaron en que había “algo oscuro” que explicaba los hechos. Y
así pensaron que la asesina, y los difusores de ella y del escándalo disfrazado
de “investigación periodística”, les darían la respuesta. Todos pensaron que
era más explicable la situación convalidando “el lado sórdido de la historia”
que lo que verdaderamente pasó. Y el paso del tiempo dejó bien en claro las
cosas, dejó a trasluz la verdad de los hechos y la oscuridad de los
malintencionados ... No hubo atentados, no hubo ingenuidad, no hubo doble vida,
no hubo infidelidad, no hubo conflictos familiares serios, no hubo crisis ...
Cuando el vendaval pasó y el mar volvió a su cauce quedó expuesta la verdad ...
Selena sólo fue víctima de una psicópata que buscó castigar a su padre por
haberla marginado de la vida de éxito de Selena luego de una gran disputa ... Y
lo hizo matando a su bien más preciado ... Sólo fue eso ... La simple realidad
de las relaciones humanas frente a tantas mentiras que se han dicho en pos de “buscar
la verdad” ... Otra cosa tan distintiva, lamentablemente, de la condición
humana...
Selena le
hizo ver al mundo que se podía ser feliz con lo que se tenía y en el lugar en
el que se estaba ... Selena podía haber sido no necesariamente una cantante ...
Podía haber sido una gran diseñadora ... Podía haber trabajado en una oficina,
en un local de ventas, en cualquier lado ... Y ella hubiese mostrado su sonrisa
de siempre y hubiese dado lo mejor por superarse ... Hasta el último día Selena
mostró que ella no era sólo feliz por ser una cantante famosa ... Mostró que
era feliz con sus diseños, con su nueva casa, con sus proyectos para ampliar su
familia, con su esposo, con el contacto con su gente, con sus deseos de vivir y
de dejar vivir, con sus ganas de hacer ... Selena se mostraba como una chica
más que buscaba su camino, su lugar ... Y le mostró a todo el mundo que eso era
posible, que no importaba si se era famoso o no, si se tenía una profesión más
rentable o no, si se estaba en los medios o no ... Selena mostró que se podía
ser feliz con lo que se tenía por poco que fuera, y que nadie podía perder el
deseo y los sueños de superarse ... Su vida misma fue un ejemplo para todos. A
Selena nadie le había regalado nada ... Selena era de una familia humilde que
quería progresar, pero que en muchos momentos la pasaron muy mal ... Pasaron
penurias, hambre, incertidumbre ... Podrían haberse dedicado a mendigar,
podrían haber vivido de la asistencia estatal, podrían haberse dedicado a la
mala vida ... Nada de eso pasó. Desde lo más bajo Selena llegó a la fama con
honestidad, trabajo y dedicación. No fue un camino fácil. Selena pasó por todas
las etapas. Tuvo que renunciar a muchas cosas para llegar no sólo a ser alguien
sino simplemente para vivir dignamente cada día ... Cuando Selena llegó a la
fama no hubo nadie que la envidiara, no hubo nadie que se sintiera mal por su
éxito, nadie le deseó lo peor ... Todos se sintieron reconfortados pues para
todos Selena era “de los nuestros”. Selena era la hermanita a la que todos
querían. Selena era la encarnación de sus propios sueños ... Todos pensaban:
“si Selena llegó, ¿cómo no voy poder llegar yo también? Si Selena es feliz,
¿cómo no lo voy a poder ser yo también?”. Selena hizo a un mundo, a una
comunidad feliz no sólo con su canto sino con su persona. No había mejor
mensaje a la humanidad que mostrarse exitoso siendo honesto, responsable,
trabajador, que se podía ser feliz con lo que se tenía sin renunciar a las
mayores aspiraciones. Selena mostraba que un mundo mejor se podía gestar. Que
sólo había que transitarlo, que sólo había que seguirlo. Y cuanto más fueran
los que siguieran ese camino mejor, pues nadie podría detener esa bocanada de
bondad y de constancia que se estaba gestando...
... Pero pasó
lo que pasó. Creo que es muy difícil explicar lo que le pasa a cada uno cuando
suceden estas cosas. Siempre destacaré la sorpresa y el desconcierto de muchos
periodistas y cronistas que fueron a cubrir la triste noticia en Corpus Christi
... Casi todos no sólo conocían a Selena, sino que la habían entrevistado,
sabían de su popularidad y de lo que ella significaba para tanta gente. También
sabían cómo era y cómo sus fans se desvivían por protegerla y darle sus mejores
muestras de cariño, que en definitiva era una respuesta a lo que Selena misma
hacía por ellos que no era sólo dedicarles sus mejores canciones sino tratarlos
bien, estar a su servicio, haciéndolos partícipes de su felicidad, dándoles
entidad llamándolos por su nombre. Y aun así los periodistas se sentían sorprendidos
por la cantidad enorme de gente que iba a despedirse de Selena en el mayor de
los desconsuelos. Pero esa gente no sólo estaba dolorida, no sólo estaba
triste, no sólo se sentía vacía ... Esa gente se sentía desamparada. Aquellos
sueños por lo que tanto lucharon y por los que Selena tanto bregó se
desvanecían como pompas de jabón ... Aquel camino honesto de llegar al éxito
parecía imposible de ser transitado. Aunque muchas veces no deseemos verlo, o
que algunos no quieran que lo pensemos pues no sería “políticamente correcto”,
la gente siente lo que significa una muerte y sobre todo la forma de esa
muerte. Si a Selena le pasaba eso a muchos seguramente les pasó por sus mentes la idea de que “no se puede ser bueno
en la vida, no se puede ser honesto, a nada se llega con sólo ser trabajador y
solidario. Muy por el contrario, en la vida hay que ser mezquino, falso,
mentiroso, tramposo, transar hasta lo más bajo para llegar a obtener lo más
básico”. El dolor de la gente y el saber qué significaba semejante pérdida se
expresaron en la movilización de todos ellos. Esa gente no sólo fue a
despedirse de Selena, fue a ver la muerte de un futuro, de un futuro digno
idílico, la aseveración de que por ese camino nunca se podrá. Que es hermoso,
eso sí, pero que no se podrá ... ¿Cuántas veces se nos ha dicho que somos
soñadores e ingenuos si pensamos en un mundo mejor siendo buenas personas y con
mejores intenciones? ¿Acaso no lo dijo John Lennon en “Imagine”? La gente en el
más profundo de sus sentimientos y de su corazón supo lo que significaba
semejante pérdida. Ya nada podría ser lo mismo. Ni ellos, ni el mundo ni la
humanidad ... Siempre cito esa parte de un tango muy conocido en mi país y que
cantara Carlos Gardel, “Sus ojos se cerraron y el mundo sigue andando” ... A la
gente le pasó eso y no lo pudo superar ni siquiera con las palabras de consuelo
de los demás por aquello de “todo es mentira, mentira ese lamento. Hoy está
solo mi corazón”. Para la gente no sólo se fue Selena ... Se fueron sus
esperanzas de un mundo mejor, de lograr ser alguien en la vida sin dejar de ser
auténtico, sin dejar de ser un simple niño soñador que al final logra lo que
tanto anheló con nobles armas. El final de Selena era un golpe durísimo de la
realidad. Esa realidad que nos dice que es imposible soñar con un mundo ideal,
con una humanidad con valores nobles ... No ... El final de Selena era la
confirmación de que había que ser pragmático y conformarse con lo que hay ...
“El mundo fue y será una porquería ya lo sé ... en el 506 y en el 2000
también”, decía otro profético tango. Y la gente que tanto se entusiasmó con
Selena sintió eso ... Ya no había margen para soñar, ya no había posibilidad de
un mundo idílico ... Sólo había que aceptar las reglas y si se quería progresar
ya se sabía lo que se tenía que hacer ... No ser como se es, mostrarse de un
modo distinto de lo que se piensa, destruir al que se tiene al lado o
ignorarlo, tener relaciones “convenientes” para llegar y ser falso, hipócrita y
nada espontáneo. ¿Que no se puede ser de otro modo? ¡¡Claro que se puede!! ...
Pero ya se sabe qué le pasa a los que eligen ese camino ... Lo vemos todos los
días ... Lo advertimos al ver el destino de Selena...
¿Y qué
tenemos ahora? ¿Cómo es el mundo sin Selena? Un mundo artificial, en el que la
imagen vale todo y el interior de cada persona no importa ... Gente que piensa
que lo único que interesa es ganar, aunque sea a costa de pisotear a su
prójimo, artistas que creen, y lo certifican con los hechos, que para triunfar
hay que generar escándalos, inventarse romances con famosos, hablar mal de sus
colegas, desnudar su vida privada en las redes sociales, gente que en sus
lugares de trabajo viven compitiendo a sangre y fuego por un puesto de
jerarquía, jóvenes que no ven nada bueno para el futuro y que se comportan como
si fueran unos viejos resentidos por no haber hecho lo que debían en su tiempo
... La humanidad está enferma y va camino a su extinción porque no ve futuro,
no tiene esperanza, no ve una luz en el camino ... Ante este panorama, ¿Selena
tendría cabida en este mundo de hoy? ¿Podríamos decir que éste es el resultado
de vivir un mundo sin Selena? Con estas preguntas me vuelven las imágenes de
abril de 1995 con la gente en las calles y en el funeral despidiéndose de
Selena ... La humanidad huele su derrota, huele su propia extinción ... Aquella
gente que salió a ver y a despedirse de Selena sentía que ya no había futuro,
que ya no había retorno, que ya no había esperanza ... Muchas veces me pregunté
por qué muchos de ellos casi obligaron al padre de Selena a que abriera el
féretro para verla, un poco porque les costaba creer que Selena ya no estaba
entre nosotros ... Otro poco fue porque querían verla, sentirla, ver su propia
suerte, ver su propia derrota. Si muchas veces se dijeron que la suerte y el
bienestar de Selena eran el suyo propio, ahora que veían la densa realidad
podían ver cuál era su presente y cuál su porvenir ... La gente sabía que al
volver a su ritmo normal de vida ya nada sería lo mismo. La bendita esperanza
de vivir un mundo mejor del modo más honesto se moría con Selena ... Ya nada se
podía esperar. La esperanza de progresar resurgiría pero ya con otra cara, con
otros valores o tal vez con los mismos parámetros de siempre, sólo que
incorporando a una comunidad que hasta Selena no se tuvo nunca en cuenta. Fue
tal la conmoción por la partida de Selena que los anglosajones, hasta allí
ajenos a Selena y al mundo latino, no pudieron dejar de querer saber lo que
tanto había apenado allá en la lejana Texas y en todo el mundo hispano. La
revista People, al ver semejante conmoción, vio la posibilidad de capitalizarlo
sacando una edición especial dedicada a Selena e incluyendo fotos inéditas. La
repercusión y sobre todo las ventas de su número no estaban en los cálculos ni
de los editores de la publicación, que sólo atinaron por acto reflejo a sacar
una nueva edición de la revista. Y cuando notaron que la edición volvió a
agotarse, allí dieron cuenta de que existía la comunidad latina en Estados
Unidos y decidieron dar a luz la revista “People en Español”. Pero aun cuando
ellos mismos admitieron que el nacimiento de la revista se debió a este
“descubrimiento” del mundo latino, lo cierto es que no sólo ellos consumieron
la revista sino buena parte de los “gringos” que querían saber sobre la suerte
de esa muchacha que era el ícono para tanta gente. Y luego vino la venta del
disco inconcluso en inglés que estaba preparando Selena, “Dreaming of you”,
causando una sensación y una locura de ventas el día del lanzamiento del disco
que rompieron todos los récords y todas las expectativas ... Pero nada de lo
que estaba ocurriendo llegó a ver Selena. Allí todos dieron cuenta de lo que
estaba generando Selena y de lo que hubiese provocado si ella llegaba a estar
presente ... Pero ella no estaba y lo que se estaba generando ya no tenía el
color, los parámetros y las virtudes que Selena supo desparramar en todo el
mundo. Estados Unidos “descubría” el mundo latino y empezaría a darle cabida
pero ya no con el ejemplo de Selena. Ella inició el camino y los tiempos se
aceleraron por su trágico destino. Cuando se decidió hacer la película sobre
Selena, y luego de hacer un casting público para elegir a la actriz que
protagonizaría a Selena en el filme, la industria convenció al padre de Selena
de que debía elegir a alguien que fuera al menos algo conocido, alguien que
podría convocar por sí sola a ver la película. Así se eligió a Jennifer López,
que era incluso en los Estados Unidos menos conocida que Selena, y el éxito de
la película la catapultó a la fama. Esa fama que seguramente la hubiese
coronado a Selena si no hubiese habido una psicópata que le quitó todos sus
sueños y todas sus esperanzas ... Jennifer López siguió el camino que hubiese
recorrido Selena y se convirtió en una artista famosísima ... pero fue con
otros parámetros, con los principios de un mundo que no contuvo a Selena y que
aceptó a esa comunidad sólo estando bajo su control ... La gente supo que ya no
vivirían y sentirían propio el éxito de su artista. La gente dejó de sentirse
partícipe del éxito para convertirse sólo en espectadora, en pasiva
participante de la fama y de la felicidad de los otros artistas ... El mundo
los había incluido pero la gente no se sintió dueña del éxito de los “suyos”.
El éxito era ajeno. Su esperanza se fue con Selena y su ilusión se convirtió en
mera promesa ... Alguna vez Jennifer López dijo que Selena era sin duda la
mejor y que ella tenía una fuerza, un talento y unas ganas que la hacían
imparable ... Pero lo cierto es que a Selena la pararon ... La detuvo un mundo
que le quitó su condición de Reina y le cedió esa condición a Jennifer López
para que el mundo “siguiera andando...”.
Tal vez por
eso cuando conocemos a Selena, cuando la descubrimos y comenzamos a quererla,
nos sentimos tan contentos por haber conocido a alguien tan maravilloso como
tan tristes por no tenerla entre nosotros. Sentimos que hemos perdido más que
una artista. Sentimos que perdimos la posibilidad de ser felices con ella. Yo
no tengo dudas de que con Selena éste sería otro mundo. Un mundo feliz con su
trabajo, feliz con su vida, feliz con sus sueños. Un mundo que sólo seguiría
los parámetros de la verdad y de la justicia. Un mundo sin guerras y sin sangre
inocente derramada. Un mundo con presente y futuro ... Un mundo con el talento,
la sonrisa, la gracia, la personalidad, el carisma y el Amor de Selena ... Un
mundo distinto sin duda ... Un mundo que tiene la posibilidad de redimirse
siguiendo su ejemplo como la mejor forma de tributarla, como el mejor modo de
recordarla, como la mejor manera de no olvidarla. Con hacer las cosas con un
poquito del Amor que Selena esparció por todo el mundo empezaremos a desandar
el camino, y hacer de éste un mundo feliz y una humanidad de sentirse orgullosa
de su condición. Sólo espero que eso suceda por nosotros mismos y sobre todo
por Selena para hacerle ver, donde quiera que esté, que lo suyo no fue en vano,
que tuvo un propósito y una finalidad, y que ya ha sembrado sus frutos, que es
el acto de cada uno de nosotros en nuestras vidas. Espero que algún día lo podamos
hacer para devolverle a Selena algo de lo tanto que ella nos dio en tan sólo
23, casi 24 años...
Las cosas
suceden por algo en nuestras vidas. Muchas veces ante la densa realidad nos
sumergimos ante la evidencia y pensamos que todo es obra del destino y que nada
se puede hacer contra él. Tal vez sea el momento de revelarse contra ese
destino, contra esa realidad. Tal vez debamos forjar nuestro destino y que el
mundo se adapte a nosotros y no del modo inverso ... Ése es el camino que había
elegido Selena ... Y no hay nada más lindo que parecerse ella en todo ... Si
todos lo hiciéramos sabríamos lo que es la felicidad, la libertad, el don de
gente. Si todos nos tomáramos la molestia de ser un poquito como Selena cada
día, empezaríamos una nueva era, tomaríamos un nuevo camino. Y ya nada volvería
a ser como antes, vivir en un mundo cruel y hostil. Un nuevo mundo se estaría
gestando con el Amor de Selena expresado con el latido de cada uno de nuestros
corazones...
Contigo
Selena aprendí a creer en los milagros...
Te quiere con
toda el Alma...
Sergio
Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)
(Buenos Aires, Argentina)
No hay comentarios:
Publicar un comentario