“Prométeme que
nunca mentirás…”, me habías dicho Selena aquel día en el que te pedí un
autógrafo. “Prométeme eso y prométete a ti mismo que lo harás … Y también que
serás honesto y trabajador…”. Yo te dije que me lo pusieras por escrito y así tú
lo hiciste. En eso estoy pensando cuando miro atónito la televisión, cuando veo
y no puedo creer que ya no estés, lo que te han hecho, que ya no te podré
demostrar que cumplí con mi palabra, que he cumplido con tu deseo. Quiero decir
lo que pienso y lo que siento. Porque tengo que cumplir con mi palabra, aunque
ya no estés, Selena. Porque yo te lo prometí. Porque lo hice con el corazón,
porque te lo prometí a ti …
¿Qué decir de ti,
Selena? Que lo eras todo, que eras una excelente artista, una mujer
encantadora, una cantante extraordinaria, que eras tan linda, tan buena, tan
dulce … Pero que también eras una mujer con personalidad, una mujer con
agallas, una mujer que luchó tanto por cada cosa lograda … Tu historia es tan
linda como tan triste … No, Selena … No me pidas ahora que no te recuerde con
tristeza … Te prometí ser sincero … Te prometí decirte la verdad, mi verdad …
Tu historia era la de una cenicienta, la de una chica que tuvo que salir de su infancia
a cantar para cumplir el sueño de su padre y que lo hizo propio para poder
cumplir con el suyo … Supiste que no alcanzaba con cantar bien … Había que
hacer algo más … Mucho más, quizá … Cuando tu padre quebró y se quedaron sin
nada supiste que aquello de cantar dejaba de ser un hobby, un trabajo
temporario para ser tu propio sustento … Entonces ya no alcanzaba con cantar
bonitas canciones de otros a un público siempre dispuesto a aplaudir a una
tierna niña … Eso no te daría de comer … Tampoco devolvería tu casa … Había que
dar más, había que dar todo … Y tú sólo eras una niña … Dejaste de lado tus
muñecas, dejaste de lado tu inocencia, dejaste de lado tu vocación para poder
vivir, para que tu familia pudiera salir adelante … Dejaste de lado tu llanto,
dejaste de lado tus sueños … Por un buen tiempo dejaste de mirarte para ver qué
hacía el público cuando cantabas, qué esperaban de ti, qué era lo que los hacía
alegrar, qué era lo que los hacía emocionar, qué era lo que más gustaba de ti …
Y tú les diste todo, Selena … Les diste lo que les podía dar y más también … No
les mostraste lo que pasaba por tu interior … Dejaste de lado tus llantos, tus
emociones, tus miedos, tus alegrías … Te entregaste a ellos para que te amaran
… Te entregaste a ellos sabiendo que algún día tendrías todo y podrías gozar de
la vida a pleno, podrías hacer aquello que tuviste que dejar, aquello que no
pudiste gozar, de las pequeñas cosas con las que juega una niña … Volverías
para vivir aquello que no viviste… Volverías para recuperar esa muñeca perdida…
Veo hoy esas
imágenes y no lo puedo creer … No puedo entender que te hayan hecho esto,
Selena … Justo a ti, Selena, justo a ti … ¿Pero cómo puedo entender que te
hayan asesinado? ¿Pero cómo entender que alguien te haya querido hacer daño?
¿En qué cabeza puede entrar este escenario? ¿Cómo situarte en esa mañana en ese
motel junto con alguien a quien tú conocías, a quien tú le diste toda la
confianza para recibir un tiro en la espalda? ¿Qué hacías allí, Selena? ¿Qué
esperabas encontrar? ¿Acaso no lo tenías todo? ¿Acaso no se estaba cumpliendo
tu sueño? ¿Acaso no reías como una niña que volvió con su juguete perdido?
¿Acaso no habías hallado la felicidad con tu esposo, con tu familia, con tu
gente que te amaba tanto, con tu éxito producto de tu trabajo? ¿Qué fuiste a
buscar en esa persona, Selena? ... Sí, lo sé, Selena ... Seguramente hay cosas
que no las puedas explicar … Que tú, como yo, no te imaginabas ese acto, esa
deslealtad, esa traición, ese acto tan atroz … Pero ya sabes, Selena … Prometí
que no te mentiría, te prometí que sería sincero … Te prometí que sería honesto
… contigo y con los demás … Hoy no estás … Me cuesta creer que ya no estés
entre nosotros … Pero seguiré diciendo lo que siento, lo que pienso … Nadie me
va a decir lo que tengo que hacer … y menos qué decir … Yo te lo prometí,
Selena … Y aún tengo la esperanza de que me estás escuchando y puedas
contestarme esas preguntas que me tendrán en una tristeza infinita, en un pozo
del que nunca podré salir…
Sí, ya lo sé … Me
dirán que estás en el cielo, cantándole a Dios y que estás contenta por estar
en el paraíso ... Me dirán que fue el destino, me dirán que el Señor así lo
quiso … Me invitarán a la resignación. Me dirán que te recuerde con alegría, me
dirán que te recuerde con tu música, con mis fotos, con mis recuerdos … Pero yo
no puedo hacer eso, Selena … Lo siento … Pero no puedo ... Porque esta
historia, esta maravillosa historia, tiene un final triste, muy triste … Una
final que invita al llanto, al enojo, al asombro que desconcierta … Esta
historia no puede hacerte recordar con alegría … Ojalá pudiera hacerlo … Pero
no lo puedo hacer, Selena … Y te lo digo porque prometí decirte la verdad …
Estabas tan cerca, tan cerca de todo … ¿Cómo recordarte con alegría, cómo
imaginarte contenta con el Señor? ¡¡No, Selena!! No nos podemos mentir … Tú
habías imaginado tu felicidad aquí, tú habías soñado ser feliz en este mundo,
trabajaste muy duro para ver algún día la culminación de tu sueño … No, Selena
… No me digas que las cosas tuvieron que transcurrir así, que tú estás contenta
a pesar de todo … ¿Cómo estarlo si llegaste a ver esa felicidad, llegaste a ver
el sueño concretado mas no pudiste disfrutarlo en su totalidad? ¿Cómo estarlo si
como una niña traviesa llegaste a asomarte a esa ventana y pudiste ver esa vida
de ensueño, esa vida ideal concretada después de tantos años de trabajo,
después de tanto esfuerzo, después de dejar tantas cosas de lado? Pero si lo
viste todo, Selena, llegaste a ver tu obra y casi no la pudiste disfrutar …
Viste el triunfo, viste la popularidad, viste el Amor de tu gente, viste cómo
te premiaban, viste tu nueva casa en la que agrandarías tu familia con Chris,
viste nacer tu sueño de diseñadora personificado en “Selena Etc.”, viste
sortear cada uno de los obstáculos, viste cómo te reconocían, viste cómo te
buscaban, viste el horizonte de fama mundial … Viste todo pero no pudiste tocar
casi nada de aquello que había visto y logrado … ¿Eso era lo que Dios quería?
¿Eso te está explicando ahora? ¿Qué vieras tu obra realizada pero sin poder
disfrutarla? No, Selena … No lo puedo creer … Tal vez esté mal que te lo diga …
Pero ya sabes, Selena … Te lo he prometido … Nunca te voy a mentir … Aunque ya
no estés … Aunque ya no puedas venir a recuperar esa muñeca que tuviste que
dejar para poder cantar, para ser feliz a tanta gente y tú no poder vivirlo
para poderlo sentir…
Veo esas imágenes y
no lo puedo creer … ¿Por qué? ¿Por qué está esa horrorosa mujer en la pantalla
y no estás tú, Selena? ¿Pero es que el mundo se ha vuelto loco? ¿Pero es que el
Señor quiere que esté esa persona y no tú entre nosotros? ¿Para enseñarnos qué?
¿Qué es lo que debemos aprender, Selena? ¿Que no debemos ser como tú, que es
mejor ser como ser ese monstruo? ¿Que debemos ser mentirosos, falsos,
hipócritas, difamadores o estafadores para lograr lo que queremos? ¿Que ser
como tú, Selena, no tiene cabida en este mundo sino sólo con Dios? ¡¡No,
Selena!! ¿Sabes qué quiero, Selena? ¿Sabes qué deseo en este momento? ¡¡Qué se
dispare de una vez esa mala persona!! ... Pero como no lo va a ser, porque está
loca, porque es una psicópata, ¿sabes qué deseo? ¡¡Que esos policías hagan
justicia!! ¡¡Que hagan lo que ese adefesio hizo contigo!! Que sienta lo que tú
sentiste, que viva en carne propia su propia obra, esa obra de odio,
resentimiento, dominación, obnubilación, enfermedad, manipulación … ¡¡No quiero
un juicio justo!! ¡¡Ella no se lo merece!! ¡¡Ella no te dio esa oportunidad!! ¿Por
qué se la debo dar yo? Sé que no está bien decirte esto, Selena … Yo nunca
podría hacer eso, ni siquiera con ese monstruo … ¿Pero acaso no me entiendes?
¿Puedes comprender lo que pasa por mi mente y por mi corazón en este momento?
Yo no puedo mentirte, Selena … Esto es lo que siento ahora … Tal vez algún día
se me pase … Tal vez nunca … Ya sé que nosotros no somos como ella … Pero
también sabemos lo indignante que es ver cómo esa gente triunfa, cómo esa gente
logra fines tan maléficos con métodos tan ruines … ¿Me entiendes ahora, Selena?
Yo nunca la podré perdonar … Que Dios me perdone, pero yo no lo puedo hacer …
De sólo pensar en lo que sentiste en tus últimos instantes jamás podré tener un
sentimiento de conmiseración para con esa mala persona, con esa psicópata … Ya
verás, Selena … Nos pedirá clemencia y luego se reirá de nosotros … Dirá que lo
hizo sin intención y luego vivirá hablando mal de ti, Selena … Te difamará, te
calumniará y hará lo mismo con todos los tuyos … Ya verás, Selena … Será
cuestión de tiempo … Que Dios me perdone … Espero que tú también me perdones,
Selena … Pero ya sabes … Prometí serte sincero, prometí no mentirte, prometí no
ser como esa mujer en la que confiaste … Yo sí quiero predicar con el ejemplo, Selena,
con tu ejemplo…
Veo esas imágenes y
no puedo moverme … Veo gente llorando, veo gente saliendo a las calles clamando
por ti … Nadie lo puede creer, Selena … Yo tampoco … Quisiera poder creer que
estás descansando en paz, que estás bien donde quiera que estés … Quisiera
creer que hay ángeles que te cuidan, que el Señor está contigo feliz con tu
presencia … Pero más querría volver el tiempo atrás e impedir todo esto, impedir esta honda
tristeza, impedir este inmenso dolor, esta locura, este llanto, este destino
para ti, Selena … ¡¡Qué más quisiera ofrecer mi vida para que tú goces de la
tuya, qué más quisiera que fueras feliz!! … Dime que hay una esperanza, Selena
… Dime que te puedo traer de nuevo a este mundo … Dime que puedo hablarte, dime
que puedo abrazarte, dime que puedes hablar con Dios y convencerlo de que
reconsidere su decisión, que nos escuche, que te escuche … ¡¡Dame una señal,
Selena!! … ¡¡Dime dónde estás!! Dime que todo esto es una pesadilla, una
terrible y tonta pesadilla…
Miro tu autógrafo y
miro esas imágenes … Vuelvo
a leer esas palabras: “Promise me you will always tell the truth ... Promise me
you'll be honest, genuine, hardworking ... I'll wait, wait until I see you've
accomplished what you promised me. With Love, Selena”. Y vuelvo a ver tu destino, Selena … Aún no lo
puedo creer ... Pero aun así, te lo prometo, mi Reina. Yo seguiré tu camino, yo
cumpliré mi promesa … Yo haré todo lo posible para demostrar que tu ejemplo, tu
modo de vida, tu modo de ser, tu forma de ver y de sentir
las cosas van a triunfar … algún día … Nadie me va a apartar de ese camino …
Nadie me va a doblegar … Nadie me va a convencer de que desista de mi decisión,
de mis convicciones, de tus convicciones … No lo permitiré, mi bella Selena …
Hoy es la mejor forma de recordarte, de tenerte … Hoy es mi única forma de
sentirte viva… Hoy sólo dependo de ti para sentirme vivo…
Miro las imágenes y
miro la ventana … Algún día vendrás a buscar esa muñeca que tuviste que dejar
para vivir este destino…
(Recordar a Selena
todos los días también implica dolor ... Más allá de que todos debamos seguir
adelante con nuestras vidas, eso no implica olvidarse de lo que pudo haber sido
Selena, de lo que pudo haber sido este mundo con ella, de lo que pudo haber
sido su destino, nuestro destino ... No debemos perder nunca nuestra alegría
... Tampoco debemos olvidarnos de recordar a Selena con Amor y felicidad ...
Eso hubiera querido Selena ... Pero tampoco debemos olvidarnos lo que siempre
soñamos, que es nuestra esencia ... esa muñeca que espera aún a Selena)
Siempre vivirás en
mi corazón, Selena ... En mi corazón que tiene tu alegría y siente por tu
ausencia...
Te quiere mucho...
Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)
(Buenos Aires, Argentina)
No hay comentarios:
Publicar un comentario