Este corazón que aún te quiere...

31 de agosto de 2014


No quiero saber qué pasará mañana, Selena...


Nunca me sentí tan sola y desolada como en esta noche, en esta lluviosa y negra noche del 31 de marzo ... Nunca como en esta noche siento que he crecido de golpe ... como si en vez de los 15 años que tengo tuviera 40 o 50 años ... Si crecer es dolor, ésta es la mejor demostración del crecimiento ... Tengo prendida, como todos, una vela, una vela que se apagará pronto, aunque la prenda de nuevo o la reemplace por otra ... Es que sé que en cuanto se apague mi vela, se apagará mi esperanza, se apagará mi ilusión de que todo lo que estoy viviendo es una pesadilla, una cruel pesadilla con un final imprevistamente feliz ... No quiero que se apague mi vela como no quiero que se termine nunca esta noche ... Porque sé muy bien que en cuanto llegue el sol del día siguiente, cuando se enciendan las luces del nuevo día sobrevendrá la realidad, la triste realidad ... Que ya Selena no está entre nosotros y que habrá que seguir la vida sin ella ... Es intolerable e inaceptable imaginarme eso ... Es imposible poder seguir igual en esta vida sin ella ... Por eso no quiero que se apague mi vela ... Por eso no quiero que jamás termine la noche ... Quiero aferrarme a esta noche, a este día, a este último día de Selena con nosotros ... Porque este 31 de marzo aún estaba ella al lado nuestro, estaba ella con vida ...  La lluvia apenas ha mermado pero yo siento un frío que me carcome el Alma ... Sólo me abriga ese llamita, ese calorcito que simboliza a mi Selena, a mi hermanita que se me va como ese fueguito, como esa luz pequeña que fue grande hasta hoy, pero que se va apagando lenta e inexorablemente ... De nada sirven los abrazos de mi madre ... Ni siquiera puedo conmoverme por los gritos y lamentos de mi hermana mayor ... Esos gritos que cada tanto surgen del silencio sepulcral y del lamento desconcertante ... “Ya sabes, m’hija, si quieres podemos irnos a casa cuando quieras...”, intenta convencerme mi madre. Pero ni bien termina de decirme eso, desiste de la idea y me sigue abrazando. Sabe que no puedo ni quiero moverme de aquí, y que en el momento en el que lo haga será en silencio y sin dar aviso ... Y aún falta mucho tiempo para que lo haga ... Quizá mañana, quizá cuando me tenga que despedir de Selena ... Hoy no puedo moverme de aquí ... Estar quieta mirando la nada misma y aferrada a mi vela es lo único que me sostiene ... Sé muy bien que si quisieran sacarme de aquí me pondría como loca y gritaría como mi hermana ... Porque para mí hoy no hay mañana, hoy no hay futuro ... Crecí de golpe ... De pronto me di cuenta de que desperté de un largo sueño ... De un sueño que parecía tan real como hermoso ... De un sueño que me decía que vivía en el paraíso, que pertenecía al mundo de Selena, de un mundo en el que todo era posible, de que todo se podía realizar y de que el destino lo hacía uno ... De pronto se me viene a la mente aquel reportaje que le hiciera Cristina y cuando Selena le decía que no creía ni en los horóscopos ni en el destino ... Que el destino dependía de uno, decía ... Y hoy estoy aquí pensando si acaso no era mejor que Selena fuera supersticiosa y que creyera en los mensajes, en las señales, en los avisos de quién sabe quién ... Sí, tal vez debió hacerlo ... Alguna vez Selena dijo que tenía pesadillas recurrentes y que eran tan espantosas que prefería no recordarlas ... Tal vez eran una señal, tal vez era un mensaje de alguien que le avisaba lo que le podía llegar a pasar ... Tal vez ... Hoy todo puede ser posible ... Yo tampoco creía en esas cosas como Selena ... Pero ahora, ahora que veo lo que le pasó y sintiéndome tan desamparada sin su presencia ... ahora no sé qué pensar ... Es que el sueño terminó ... Es que ya no puedo creer en mis fuerzas, no puedo creer que yo puedo forjar mi destino ... Selena lo estaba haciendo, y un acto de esa vil tiró años y años de trabajo, de esfuerzo y de talento por la borda ... Esa mujer nos vino a decir que uno no es el dueño de su vida, que cualquiera puede acabar, deshacer y destruir lo que uno hizo con toda el Alma y con tanto Amor ... No, ya las cosas no serán las mismas ... Ahora sé que no alcanza con el trabajo, con la dedicación, con el talento ni con el esfuerzo ... Ahora sé que dependo de otras cosas para vivir ... y ahora sin Selena, para sobrevivir ... Mañana volveremos a creer en los horóscopos, en el destino, en las señales ... Recurriremos a miles de personas para que nos ayuden, para que nos saquen de esta medianía y de esta tristeza ... Mañana vendrán otros tiempos ... De una vida sin Selena ... De pensar que no todo se puede lograr, de que no todos los sueños son posibles ... Hoy crecí de golpe ... Volví del paraíso ... Entré de golpe a este mundo, a este realidad ... Mañana tendré que sobrevivir, mañana tendré que aceptar las cosas como son ... Mañana tendré que aferrarme a las creencias que no creo y aceptar las malas nuevas como el destino irremediable de mi vida, de nuestras vidas ... Mañana aceptaré que lo imposible es eso ... imposible ... Mañana entenderé por fin que se me ha ido Selena...

Sé que hoy participamos del mismo dolor, estamos hermanados por el mismo sentimiento ... Sé que por mucho tiempo viviremos como si Selena estuviera entre nosotros ... Lo puedo sentir ahora ... Cada tanto escucho que la gente intenta cantar entre sollozos sus canciones o grita “¡¡Selena vive!!”. Sé que por mucho tiempo escucharemos una y otra vez sus canciones y compraremos todos sus discos ... Sé que esperaremos que encierren a la asesina para siempre y nos pondremos contentos cuando ello suceda ... También sé que se harán miles de homenajes y recuerdos, y quizá hasta hagan una película ... Y así podremos estar un largo tiempo viviendo como detenidos en el tiempo, como si nada hubiera pasado, viviendo como si Selena estuviera siempre entre nosotros cantando, riendo, bailando, diciéndonos que todo se puede lograr con una sonrisa, que todo se puede lograr con trabajo y honestidad ... Pero también sé que llegará el día en el que nos daremos cuenta de que Selena se ha ido y eso será terrible ... O tal vez peor, que ya sea tarde para que podamos reaccionar, para que nos demos cuenta de la magnitud de lo que hemos perdido con su partida ... Ya nada será lo mismo ... Desde mañana mismo ... Ya no estará Selena ... Y sin ella no estará ni su fuerza, ni su ánimo, ni su espíritu, ni sus sueños, ni sus logros, ni su vida ... Mañana nos daremos cuenta de que ya dependeremos de ciertas cosas para seguir viviendo, de que tendremos que tener a Selena presente en nuestros corazones para seguir viviendo, pero no para forjar nuestro destino ... Selena no podía mentir ni dejarse mentir ... Yo tampoco ... Por más que hoy no lo queramos reconocer, tendremos la impresión o la certeza de que su ejemplo de vida, su modo de entender su trabajo, sus relaciones y su sentido en este mundo no serán seguidos ... Más de uno dirá: “¿Y cómo seguir su camino si uno ve cómo ha terminado?” ... Podrá pasar el tiempo, mucho tiempo ... Tal vez vivamos el resto de nuestras vidas no queriendo ni ver lo que sentimos en lo más profundo de nuestro ser, como hizo Selena con sus recurrentes pesadillas ... Pero sabremos que si seguimos ese camino tal vez nos pase lo mismo, que nos topemos con personas como esa asesina ... personas que no son ni desconocidas ni ajenas a nosotros ... personas que se convierten en nuestros confidentes, en nuestros más íntimos amigos, en personas de extrema confianza, en personas que se nos acercan con las mejores de las intenciones y con la inobjetable intención de “ayudar” ... Y después de que depositemos nuestra confianza, nuestros sentimientos y hasta nuestros secretos, convertirse o querer convertirse en nuestros dueños, en los dueños de nuestro destino ... Tal vez eso le pasó a Selena ... Tal vez quiso revelarse contra esa persona que quiso marcarle su destino en el momento en el que Selena armaba el propio con tanto ahínco, con tanto tesón, con tanto esfuerzo ante tanta adversidad, con tanto Amor, ante tanto individualismo, egoísmo y maldad ... Y se encontró con ese final, con ese destino vaya a saber marcado por quién ... No puedo dejar de pensar qué será de nosotros si eso le pasó a Selena ... Y así lo pensaremos todos ... Los que estamos aquí y los que lloran a Selena en todo el mundo ... en sus casas, en sus trabajos, en la calle ... ¿Qué nos queda ahora que Selena no estará más presente en nuestras vidas y en nuestro destino? ... No ... Ya nada será lo mismo ... Yo no me puedo engañar ... Me aferro a esa llamita porque es lo único que me queda de esperanza, lo único que me queda de Selena ... Mañana ... Mañana será otro día ... Mañana será otro mundo ... Sí, ya lo sé ... Mañana surgirán nuevos artistas ... Y todos mostrarán su Amor a Selena ... El genuino y el conveniente ... Pero no creo que nadie pueda emularla ni ocupar su lugar ... Tal vez muchas con razón dirán lo que nosotros sentimos ... Que Selena es única e irrepetible, que no podremos reemplazarla con nada ni con nadie ... Pero también será cierto que nadie querrá seguir ni el ejemplo ni el camino de Selena ... Que en el mejor de los casos muchos querrán imitarla cantando como ella, vistiéndose como ella, paseándose por varias ciudades dando su mejor tributo evocando sus presentaciones y hasta intentando hacer en vivo aquellos temas en inglés que Selena sólo nos dejó en grabaciones ... Será como ver una y otra vez a Selena como hasta el día de hoy pero pasando el tiempo, y ella cada vez más lejos de nuestras vidas y de nuestros pesares ... Y seguro que surgirán otros artistas ... Estoy convencida de que saldrán infinidad de artistas de nuestra raza para ocupar el lugar de Selena pero haciendo un camino diferente, bien diferente a Selena ... Tal vez se muevan como ella en el escenario, tal vez abran cadenas de boutiques y hasta lancen nuevas líneas de perfumes ... Pero no seguirán el camino de Selena ... Seguirán lo superficial, mostrarán el envoltorio, pero no seguirán jamás su espíritu ... Nunca lo expresarán públicamente, pero mirándose el espejo se dirán: “Puedo mostrarme como Selena, puedo reírme como ella y hasta seguir su mismo camino artístico una vez que me consagre mundialmente ... Pero en lo demás ... Ya vimos lo que le pasó por ser como es, por ser tan frontal, por ser tan honesta, por ir con la verdad en la vida ... Todo muy lindo, pero viene cualquier loco y te saca de tu vida antes de que te des cuenta ... Todo bien con Selena, pero su ejemplo es bueno para los cuentos de hadas ... Porque el mundo es otro ... Yo no me voy a proponer cambiar el mundo. Yo no voy a forjar mi destino ... Me adaptaré a lo que hay y me dejaré llevar por lo que me digan o por lo que me dicten, por el camino que Dios eligió para mí en este mundo ... Yo quiero triunfar y haré lo que sea para lograrlo ... Y nadie me lo quitará ... como a Selena ... El destino me dice que las cosas son y deben ser así...”. Sé que lo dirán y actuarán en consecuencia ... Sé que no me gustará y sé que no le gustará a tantos otros ... Pero mañana ... mañana tendremos que aceptarlo ... como aceptar que Selena se nos ha ido y que no volverá nunca ... ni ella ni su espíritu...

Veo a mi alrededor y veo a tantas chicas como yo ... Veo a niñas muy pequeñas, chicas de mi edad, mujeres más grandes, gente mayor ... Todas latinas como yo ... Todas mujeres que ya no hablan la lengua de sus ancestros y que aprendieron el inglés para lograr el sueño, el viejo sueño americano ... Todas mujeres como Selena ... Supongo que sienten lo mismo que yo ... Que ella era la encarnación de nuestros sueños, la niña que había llegado, la mujer que pudo con todo, que rompió las barreras del idioma, del machismo, del destino inexorable de derrota ... A veces me río cuando escucho que dicen que a Selena le pasó esto por ser ingenua, un tanto confianzuda y atada a los designios de su padre ... Se ve que la conocían poco ... Selena tenía un tremendo carácter y una personalidad avasallante ... ¿Acaso no la hemos visto en el escenario? ¿Acaso no la hemos visto cómo era cuando le queríamos hablar o simplemente pedirle un autógrafo? No sé por qué, pero recuerdo una y otra vez las palabras de Selena en aquel reportaje que le hiciera Cristina ... Me acuerdo la contrariedad que me produjo cuando le preguntó por una supuesta declaración suya de que había que ser sumisa con los varones y que sólo viéndola no podía creer que pudiera pensar semejante cosa ... Yo mucho menos podía creerlo cuando Selena acababa de decir que era una mujer dominadora y avasallante, y que tuvo que afrontar y hacerse fuerte desde muy pequeña cuando veía que no le daban trabajo al principio de su carrera por ser pequeña y por ser mujer ... Cuando Selena comenzó a explicarle lo de la “sumisión”, comprendí que ella no hablaba de ello, sino que decía que debía ser comunicativa con los hombres, que había que hablar y entenderse. Evidentemente su “español corto” le hizo decir “sumisión” en vez de “comunicación”, como seguramente al hablar de “hombres” se estaba refiriendo a su esposo y no a los varones en general. Con sólo escuchar su explicación me daba cuenta de que ella lo que le quería decir era que cuando uno se casa debe ser contemplativa con lo que desea su pareja y dejarlo hacer en vez de atarlo a sus deseos y pensamientos ... Me sigo riendo de pensar que alguien podía imaginarse a Selena sumisa cuando ella se casó en secreto con Chris en rebeldía porque su padre se oponía a su noviazgo en la creencia de que casarse tan joven podía perjudicar a su carrera ... Justo Selena una persona sumisa ... ¡¡Jamás!! ... Ella tenía tan claro las cosas con tan sólo 23, casi 24 años ... Podía decir que soñaba con tener hijos, pero que todavía no quería tenerlos porque pensaba que tenía tiempo y porque antes debía terminar con innumerables proyectos por los que trabajaba y se desvivía todos los días ... Hasta pensaba en que una vez que tuviera el primer hijo no permitiría que se lo cuidara otro, que ella misma se encargara de educarlos con el mismo rigor con que la educaron a ella ... Tenía tanto futuro ... Tenía tanto por hacer ... Había logrado tanto en tan poco tiempo ... Estaba forjando su destino, tal como lo había pensado, tal cual su filosofía de vida ... Miro la llamita y ya le queda muy poco tiempo para apagarse e irse para siempre ... como el destino de Selena y de todos nosotros ... Dios la guarde y nos guarde ... Ahora todo depende de Él y no de Selena...

Vuelvo a mirar a mi alrededor y veo esas caras, esos llantos, esa tristeza, ese desamparo ... Pero también pienso que todos, como yo, tendrán que levantarse de su letargo y afrontar sus vidas, levantarse de sus camas, abrir las ventanas, mirar el sol, salir al colegio, a sus trabajos, mirar las caras de los demás, volver a hablar, a sonreír, a sentir, volver a escuchar la radio, ver la televisión, volver a escuchar música y mirar otros artistas ... Sí, eso ocurrirá ... inexorablemente ... Por más que estemos días, meses y hasta años hablando de Selena, lamentándonos por su partida, llorando, buscando un por qué, reviviendo una y otra vez la fatalidad viendo a la asesina, ese momento llegará ... Y de pensarlo me dan ganas de marcharme para siempre de mi lugar y de mis afectos ... Para poder borrar lo que he vivido ... Para no vivir del pasado, de la nostalgia y de pensar en lo que pudo haber sido y no fue ... No quiero vivir con esta mochila, esta mochila tan pesada que empiezo a cargar hoy con el arrebato de Selena de mi vida ... ¿Qué voy a hacer? ¿Qué puedo hacer? Querría irme a una isla desierta por mucho, mucho tiempo ... Y no pensar, no sentir, estar inmune a todo, a salvo del dolor, de la ausencia, de la tristeza ... No sentir ... No es que no pueda vivir sin Selena ... Simplemente no puedo vivir sabiendo que ella no está ... ¿Acaso se puede entender lo que siento? No puedo concebir que Selena no esté con nosotros ... ¿Cómo voy a hacer para vivir sin compartir sus éxitos, su conquista del mundo, su carrera de diseño, el nacimiento de cada hijo, la felicidad con su esposo, sus premios, las tapas de todos los diarios y de todas las revistas con su figura y eterna sonrisa? ¿Cómo voy a tolerar no compartir su vida hasta el momento de envejecer juntas con una sonrisa después de las alegrías que nos dio la vida? ¿Cómo voy a hacer? ¿Acaso no se entiende? ¡¡Selena era como alguien de mi familia!! ¡¡Era una hermana más para mí!!! No sólo la admiraba ... Yo también la quería ... Era mi modelo, mi guía, mi camino, mi destino ... Selena ahora no está ... ¿Quién será ahora la que nos diga con sus palabras y con su ejemplo que creamos en nosotros, que sigamos adelante pese a todo, que trabajemos, que estudiemos, que seamos buenas personas, que siguiendo ese camino auténtico y genuino tendremos garantizada nuestra felicidad? ¿Quién? ... No quiero pensarlo, porque sé que algún día buscaremos a ese alguien, o alguien se nos presentará o nos harán presentar para ocupar ese lugar ... Y yo no quiero que eso ocurra, que jamás pase que vengan esos nuevos artistas con sus nuevas caras sonrientes, sus nuevos mensajes, sus nuevos personajes, sus nuevos ejemplos ... Yo no quiero que venga nadie a ocupar el lugar de Selena, yo no quiero que llegue nunca el mañana, y no quiero que vengan los días de los eternos homenajes y recuerdos que se harán cada vez más fugaces y artificiales con el paso del tiempo ... ¡¡Yo sólo quiero que traigan a mi Selena!! ¡¡Yo sólo quiero que venga ella!! ¡¡No quiero que se acabe nunca la noche!! ¡¡No quiero que se apague nunca mi vela!! ... De pronto me veo parada con los ojos desorbitados y sollozos, y mucha gente mirándome con cierto temor, tristeza y comprensión ... Mi madre me toma suavemente mientras trata de disimular el dolor que le genera mi angustia y desesperación ... Me convence de que me siente y me devuelve mi vela ... En realidad no es la misma ... Me trae otra pequeña pero nueva para que pueda “tener” a Selena por un poquito más de tiempo ... Yo la tomo sin chistar, casi con el alivio y resignación que recibe un bebé el chupete después de estar llorando y gritando sin sentido aparente por mucho tiempo ... Me quedo aferrada a la vela con mis dos manos mirando el piso sumida en la más profunda resignación ... Empiezo a pensar que no faltará mucho para que nos convoquen a un megaconcierto en homenaje a nuestra Selena y todos iremos a él como esperando que esté Selena, como imaginando que ella vendrá para acabar con esta pesadilla y con esta tristeza ... Empiezo a pensar que no faltará mucho para que nos acostumbremos a vivir cada día tomando sus cosas, aferrándonos a ellas como oro, comprando todo lo que aparezca de ella para sentirla más cerca, para no perder su Legado, para vivir con intensidad con cada cosa que nos dejó ... Y tenerlas y guardarlas, volverlas a tomar y sentir que tenemos a Selena con nosotros y permitirnos pensar aunque sea por un instante que nada ha pasado, que ella nos viene a traer su alegría y nosotros compartirla ... Lo puedo ver, lo puedo sentir ... Lo veo en la llamita de mi vela que significa hoy la Almita de Selena que se mantiene viva para sostenerme, para darme calor, para darme fuerzas, para darle un sentido a este mundo sin ella ... Sí, un mundo sin Selena ... Cuesta creer que ya esté diciendo esto, que será tan recurrente afirmarlo cada día, cada mes, cada año ... No sé qué haré mañana, no sé qué será de mí ... Pero lo más penoso, lo realmente penoso es que ya Selena no se pueda hacer esa misma pregunta ... Eso es algo del cual vivirá conmigo para siempre ... Eso es algo que me hará sentir culpable el resto de mi vida ... Siempre pensaré que tal vez pude haber hecho algo, que pude haberme dado cuenta, que tal vez pude haberlo impedido, que tal vez algún día se pueda volver el tiempo atrás y pueda evitar esta atrocidad cometida a Selena ... Siempre lo pensaré ... Viviré obsesionada con ese pensamiento hasta el último día de mi vida ... Moriré pensando que algún día Selena volverá para hacernos felices y viviendo su vida, esa vida por la que luchó tanto, esa vida que se merecía más que nadie...

No quiero pensar en el mañana ... Sólo pienso en que esa vela no se extinga jamás, como esta triste noche ... No sé si podré despedirme de Selena ... No sé si podré verla en ese estado ... No quisiera tener que dedicarle unas palabras, mi saludo y mi llanto ... No sé si Selena querría eso, que presenciáramos un espectáculo del cual nunca imaginó que iba a protagonizar ... No ... No sé si podré hacerlo ... Me aferro a esa vela y más que unas palabras de despedida pienso en un deseo ... Miro el cielo nublado en el que se abre un pequeño resquicio en el que se ve sólo una estrella ... Sonrío y cierro los ojos fuertemente hasta poderlos sentir ... Sólo le pido a Selena que jamás apague mi llama, que jamás me haga vivir un día sin ella, que me siga acompañando, que siga siendo mi guía, mi camino y mi destino ... Sólo le pido eso ... Que siga viviendo su vida ... Que ofrezco la mía aunque ella nunca no la acepte ... Abro los ojos y miro la llama con una sonrisa ... Observo de nuevo el cielo y ya no está la estrella ... Sólo me queda esperar, esperar que mi vela nunca se apague, que el mañana nunca se produzca o que el mañana la tenga a Selena de nuevo conmigo ... Cierro los ojos con fuerza, con mucha fuerza ... Ya no los volveré a abrir .. No querré ver el mañana ... No miraré el sol ... No escucharé a nada ni a nadie ... Sólo esperaré una señal, una voz, un sonido, y las palabras de Selena para que me diga que ya no tema, que ya puedo abrir los ojos, que ya puedo ver este mundo, porque ella está de nuevo a  mi lado y que lo de hoy es cosa de ayer ... lo de hoy sólo fue una pesadilla, una cruel y absurda pesadilla de la que no querremos vivir jamás ...Dejo a un lado la vela y me apoyo en los brazos de mi madre ... Espero que mañana esté feliz en los brazos de Selena...

(La esperanza es lo último que se pierde ... El que ama a Selena se levanta cada día esperando que lo que ha vivido en los últimos años sin ella haya sido un mal sueño, una cruel pesadilla que terminará el día que vuelva a ver a Selena ... Tal vez pensemos que el destino fue cruel con ella ... Pero deberíamos rebelarnos contra ese “destino” ... Selena creía que cada uno era forjador de su propio destino ... Y dudo mucho que Selena trabajara tanto para tener ese final tan cruel e inconcebible ... Tal vez sea hora de que cada día trabajemos por nuestro destino y no esperar nada de los demás ... Si lo logramos, hemos dado un gran paso para nuestras vidas y para la humanidad ... Y tal vez, cuando llegue ese día, nos despertaremos y tendremos a Selena nuevamente con nosotros y su eterna sonrisa de satisfacción por el deber cumplido ... Espero que algún día ese deseo se haga realidad, por el bien nuestro, del mundo ... y de Selena)

Tú eres mi destino, Selena ... Y sé que pronto, muy pronto estaré contigo...

Te quiere mucho...

Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)



Sólo un acto de sinceridad, Selena...



Miranda terminó aquel concierto y fue directamente a su camarín. No quiso recibir ni a su familia ni a sus fans. Se sentía estafada y, peor aún, sentía que había estafado a muchos en los últimos tiempos. Hubo algo en ese concierto que le revotó en su mente y no se lo pudo sacar en toda la noche. Aquel grito de una fan en el que le ventilaba sus supuestos amoríos con Brian, un joven actor de moda, y que le recriminaba el abandono de su anterior novio, John, fue el indicativo para Miranda de que ella estaba en el camino equivocado y de que todo era una farsa, una absurda farsa de la que ella formaba parte. Sintió que había cantado pésimo esa noche, pero que sólo ella lo había notado, ya que sus fans igual deliraban o le gritaban cosas que no tenían nada que ver ni con el concierto, ni con su música, ni con lo que ella hacía o era realmente. Ahora podía entender, salvando las distancias, lo que sentían Los Beatles cuando hicieron aquellos conciertos de la “Era de la Beatlemanía”, sobre todo en Estados Unidos, en el que nadie los oía porque todos gritaban algo que ellos no entendían y que no tenía nada que ver con lo que querían mostrar, pero sintiendo que en toda esa locura ellos tuvieron que ver siguiendo ese juego, el juego de la bendita fama. “¿Pero qué hecho con mi vida? ¿Quién soy yo realmente? ¿Es esto lo que quiero mostrar? ¿Soy feliz mostrando lo que no soy?”, se preguntaba Miranda en la oscuridad del camarín, el lugar en el que ella se refugió y en el que ni siquiera quiso prender la luz por la vergüenza que sentía y por la impresión que le generaría si se mirara la cara en esas condiciones. “¡¡Vamos, Miranda!! ¡¡Abre la puerta!! ¿Te sientes bien? ¡¡Aquí te estamos esperando todos!! ¡¡Has logrado romper un nuevo récord de asistencia de público y muchos aún aúllan tu nombre!! ¡¡Vamos, sal de una vez que te estamos esperando!!”, le decía una voz mientras golpeaba insesantemente la puerta de su camarín. “¡¡Ya voy, padre!! ¡¡Diles que en un rato saldré!! Necesito descansar un poco...”, le dijo Miranda, más para sacar a su padre de encima y para que no insistiera con su llamado. Cuando él mostró su conformidad, Miranda pensó en que su padre, en su rol de manager y de protector de su imagen y de sus bienes desde que era pequeña, se había olvidado de lo que le había enseñado y que ahora sólo el aroma del dinero lo llevaba por caminos oscuros e insospechados ... Miranda aún recordaba las palabras de él cuando siendo niña la incentivó a entrar en el negocio de la música ... “¿Acaso no quieres ser como Selena? Ya has visto cómo cantaba, cómo actuaba, cómo la queríamos todos ... Si no tienes su nombre es porque nadie imaginó en darle un homenaje en vida ... Al menos casi nadie ... Pero veo lo que te gusta cantar, lo que te gusta actuar desde que has visto a Selena aunque sea en videos ... Si quieres ser como ella, ¡¡adelante!! ¡¡Yo te ayudaré!!”. Miranda miraba la puerta e intuía a su padre ansioso con su salida advirtiéndole lo que debería decir a la prensa ... “Ya sabes ... Recuerda decir que te llevas de maravilla con Nichole y con Catherine ... Que son tus grandes amigas de siempre, y tus compañeras de aventuras en la música y en la actuación ... y que tal vez hagas un disco o protagonices una serie o película con alguna de ellas ... Y enfatiza tu rivalidad con Ingrid y con Linda ... Sabes que eso le gusta a la prensa y a los fans. Y habla muy bien de tu novio ... ¿Sabes quién es tu novio ahora, no? Y muestra tu rencor por el anterior ... Sí, ya sé que nada es cierto ... Pero el ‘negocio de la música’ es así ... Espero que lo entiendas ... Ya verás el fruto de todo lo que estamos haciendo ... ¡¡Después podrás hacer lo que quieras!!”, intuía Miranda lo que diría su padre, y sintió una mezcla de pena y de rabia. Miranda ya estaba harta de eso y aquel grito de esa fan aún retumbaba en su cabeza. Miranda se incorporó y se abalanzó contra la puerta, la abrió y se encontró con una nube de micrófonos y de luces que la encandilaban y le impedían ver más allá de sus propias narices. Sintió que se había transformado en eso ... En una persona ciega en un mundo de ciegos ... En una figurita que sólo debía mostrar una sonrisa cuando no sentía alegría, que antes de abrazar a alguien debía preguntar si podía hacerlo y que debía posar con gente que le indicaban otros y que ella no conocía ... Su padre se sorprendió por la salida sorpresiva y sin aviso de Miranda, y cuando se apresuró a su encuentro para darle las últimas indicaciones, ella se adelantó y le dijo a toda esa gente que gritaba y que hablaba sin parar a su alrededor: “Lo siento mucho. Hoy no haré declaraciones. Salí yo misma a aclararlo para evitar especulaciones ... Creo que tuve una mala noche y agradezco a mis fans su tolerancia. Ya hablaré en su momento. Espero sepan comprender ... ¡¡Buenas noches!!”. Luego se fue en busca de su limousine perseguida por miles de periodistas, de fans, de cámaras, de micrófonos y de gente que la ametrallaban con las mismas preguntas de siempre, buscando las mismas respuestas de siempre y esperando los mismos gestos de siempre, como si no registraran lo que había dicho, como si no entendieran lo que había querido transmitir, y como si no comprendieran que ella quería tiempo, sólo tiempo, que la miraran a la cara y entendieran lo que le pasaba ... Pero Miranda sabía que eso no sucedería, que nunca sucedería ... Ella estaba metida en esto y la única que podía salir era ella, sólo ella ... Por lo pronto buscó al chofer de su limousine y en cuanto llegó a él le dio la orden de emprender rápido el camino a casa haciendo oídos sordos a los gritos de su padre tratando de que volviera sobre sus pasos ... Por lo pronto, especuló con que su padre no podría evitar frenarse para tranquilizar a todos con el fin de que nadie criticara a su hija en los portales de diarios y de internet, y de que los tuits no fueran tan lapidarios con ella ... “No se preocupen. Mi hija está con fuertes dolores de cabeza, está muy estresada y cansada, pero pronto volverá con ustedes y les dará todas las notas que quieran”, podía intuir Miranda que estaría diciendo su padre mientras ella se marchaba del lugar. Cuando la limousine partió de aquella locura, Miranda apagó el celular para evitar que su padre, la prensa o quien fuere la interrumpiera, y sólo contempló el cielo y las estrellas. “Hace tanto tiempo que no veo ese paisaje tan hermoso”, pensó Miranda, y pidió al chofer que se detuviera en un costadito de la costanera y que la dejara un ratito sola mirando las estrellas y el mar. “Supongo que muchas veces Selena debe haber estado en mi lugar sin necesidad de estar en esta farsa en la que estoy siendo y mostrándose tal cual era ... Ella se merecía todo y apenas pudo ver algo de su éxito ... Yo estoy por llegar a la edad en la que le sucedió aquel absurdo, llegué a la fama y al éxito antes que ella, y sin embargo me siento tan desdichada ... Y ella estaba tan contenta con menos que esto ... Estaba tan feliz siendo lo que era sin tantas mentiras, sin tantas falsedades, sin tantos inventos ... Al final todos la veneramos, pero en vez de seguir su ejemplo, seguimos el camino de su asesina”, se dijo Miranda. Se sentía triste y echó a llorar un buen rato, pero cuando pudo detenerse y se detuvo en una de las estrellas que protagonizaba ese hermoso cielo, la observó e intuyendo que en ella estaría Selena, le dijo: “No te preocupes, Selena ... Ya saldré de esto y no estaré más triste ... Te lo prometo ... ¡¡Te prometo que jamás nos olvidaremos de ti!!”. Miranda se incorporó y volvió a su limousine. El chofer le indicó que había llamado su padre y que quería hablar con ella urgente. Miranda hizo una mueca y sólo le dijo que le avisara que lo vería pronto en casa.  Mientras se acercaba a ella, se sentía temerosa y muy nerviosa, pero trató de mantener el temple ... Sabía que las cosas no volverían a ser como antes y que su padre debía entenderlo aunque no le gustara ... Cuando llegó a su hogar, su padre la estaba esperando enfurecido. Iba a decirle que debía disculparse, que debía hablar rápido con los medios para tranquilizarlos a todos, que debía confirmar su noviazgo y sus peleas, que debía ... “Recuerdas que empezamos esto por Selena, ¿no?”, le recordó Miranda. Su padre se quedó mudo con cara de no entender lo que estaba pasando ... “Sí, yo empecé a cantar y actuar, y tú me mostraste aquellos videos de Selena ... Fue allí cuando quedamos en que comenzaría mi carrera seguiendo sus pasos para llegar a la cima. ¿No habíamos quedado en eso?”. Su padre iba a decirle que sí, pero que eso no tenía nada que ver con todo lo que había pasado esa noche, cuando su hija le dijo: ¿Es que no entiendes o no quieres entender? Dime en qué me parezco a ella. Dime cuáles son los pasos que estoy haciendo para seguir su camino. No sé si canto mejor, si acaso mis temas son más o menos exitosos que los de ella ... pero es peor notar que a nadie le importa eso ... En mis comienzos como ahora parece que sólo importan las polémicas, con quién supuestamente soy amiga, con quién no, quién es mi novio, quién no, sacarme fotos que provoquen revuelo, meterme en proyectos que sólo mejoren mi imagen ... ¡¡y ni siquiera es cierta la mayoría de las cosas que estamos diciendo!! Dime ... ¿es esto lo que hacía Selena? ¿Selena llegó al éxito con estas cosas que me generan repulsión? Hoy fui un desastre. ¿Y sabes por qué? Porque los fans sólo gritaban por mis cosas personales, por mis supuestas declaraciones, por las fotos que me saqué, por lo que supuestamente le dije a mi “novio”, por lo que le dije a mi “ex”, si me peleé por tal o cual ... ¡¡Nadie me gritó aunque sea para mal por lo que estaba haciendo en el escenario!! ¿A ti te parece bueno eso? Antes me parecía divertido, ¡¡pero ahora no!! Yo sólo vi a Selena hablar de su “ex novio” cuando interpretaba la canción “¿Qué creías?”. Y sólo la vi actuar en la telenovela “Dos mujeres, un camino”. Pero fuera de esas actuaciones ella se presentaba como era en la vida. Siempre dijo que si tenía que actuar, debía ser interpretando personajes que se parecieran a ella misma. Cuando actuaba era Selena, tal cual como se mostraba con sus fans ... Siempre fue así ... ¿Por qué yo tengo que ser distinta a ella si Selena era el ejemplo de todos? Dime, padre ... Dime padre por qué ella triunfó y fue tan querida sin mentirle a nadie, sin dar una imagen tan distinta de ella. Yo me siento una desdichada y yo a Selena la veía tan feliz actuando, en su casa, en su boutique, en las entrevistas, con su vida ... A menos que pienses que su asesina tenía razón con las barbaridades que dijo de ella, sabes que Selena llegó al triunfo con trabajo, dedicación y siendo auténtica ... ¿Por qué no puedo ser cómo ella? ¿Por qué seguir con esta farsa? ¡¡Dime, padre!! ¡¡Dímelo tú, si puedes!!” ... Su padre se quedó estático ... Le había nombrado a Selena, y contra ello y contra ella no se podía hacer nada ... No tenía argumentos ... o al menos lo poco que le podía decir sería contraproducente ... “Pero, Miranda, hija mía ... Los tiempos han cambiado ... ¡¡Las cosas no son iguales que hace 20 años!! No sé si Selena podría lograrlo ahora como antes...”, intentó decirle su padre ... “¿Y por qué la gente la recuerda y la quiere? ... Y sobre todo, ¿por qué la gente la añora? ¿No será que la gente quería tener una artista como ella, quería a alguien que se mostrara como uno de ellos? ... Yo gano más que ella, hasta me sigue más gente ... ¿Pero sabes? No siento que la gente me quiera de esa manera ... Y yo no me muestro de la misma manera ... ¿Y sabes qué padre? Me pregunto si me mostrara tal cual soy sería tan popular como ahora ... Y me pregunto si es bueno ser tan popular con tantas mentiras y tantos inventos ...”, le dijo Miranda clavando su mirada en los ojos de su padre ... “Es que ... Eso es necesario, hija ... No se puede avanzar si no sigues ese camino ... Te puedo asegurar que Selena también debería seguir ese camino hoy día ... Hasta para mostrar una imagen diferente hay que hacerlo con estos parámetros o con imágenes que sean ya conocidas e inofensivas ... Ya has visto el cambio de Jennifer ... Se cortó el pelo, mostró fotos de ella desnuda, escupe en el escenario, apareció en revistas supuestamente más contestatarias y rebeldes ... Pero, ya sabes, es parte del negocio todo ese supuesto cambio de look ... Creció y la imagen angelical que tenía ya no le alcanzaba ... Pero ella, como todos, sabe que eso no afecta a nadie en la actualidad ... Si quieres, hija, puedes seguir ese camino ... Yo no lo cuestionaré ... Pero yo te recomiendo que sigas el de ahora ... La chica buena con guiños provocativos es aceptado por todos...”, trató de explicarle su padre ... “¡¡Pero al diablo con todo ello!! ¡¡Yo quiero ser yo, como era Selena!! ... Ni siquiera pretendo parecerme a ella ... Yo no tengo ni el talento ni el carisma de Selena, ¡¡pero quiero que el público me quiera y me aclame por lo que soy, no por lo que parezco que soy!! Detesto hablar de cosas que no me interesan y de hablar de mi vida privada, ¡¡que encima es inventada y redactada por otros!! Selena no hablaba de su vida ni mal de los demás ... ¡¡Yo vivo haciéndolo!! ¿Y para qué?...”, exclamó Miranda hasta que su padre la interrumpió: “ ¿Es que no entiendes, Miranda? ¡¡Tú no entiendes nada!! ¡¡Selena está muerta!! ¡¡La mataron!! ¿Y sabes por qué? ¡¡Por ser como era!! Creyó que podía lograr todo en este mundo siendo tan buena y auténtica ... ¿Y sabes qué, Miranda? ¡¡No se puede!! ¡¡Entiéndelo!! ¡¡No se puede!! ... ¿Si te estoy tratando de decir que este mundo es una mentira? ¡¡Sí, lo es!! ¿Que hay que ser falso y mentiroso? ¡¡Por supuesto!! ¿Que hay que esconder los sentimientos verdaderos? ¡¡No te quepa la menor duda!! ¿Qué crees que la gente sintió con su muerte? ¡¡Que habían perdido!! ¡¡Que su camino era inviable, que la humanidad te devora!! No, Miranda ... Te lo digo con todo el dolor del Alma ... Selena no ganó, Selena perdió ... Su ejemplo es lindo, pero queda en lo ideal ... Esto es así, Miranda ... Sé que está mal que te lo diga, pero para triunfar no se puede seguir los pasos de Selena ... Quédate con su música, quédate con su baile, quédate con lo que dejó con sus discos ... Pero no más ... Ya sabes su final ... Las cosas son así ... y son definitivamente así desde que ella murió ... Ahora las reglas son éstas y contra ellas no se puede escapar ... Espero que lo puedas entender, hija ... Algún día comprenderás...”. Su padre extendió sus brazos y Miranda se acercó dejándose abrazar sin dejar de tener sus ojos bien abiertos mirando la nada misma ... Sabía que no podía seguir discutiendo, que de nada serviría convencer a su padre y a todo lo que venía tras él ... “No te preocupes, hija ... Mañana será otro día ... Les diré a todos lo que tú me has dicho ... Que tuviste un mal día, que te disculpas de todo y que mañana les hablarás con más tranquilidad ... ¿Te parece?”. Miranda asintió en silencio ... “Ahora sé una buena chica y ve a descansar. Todos tenemos nuestras crisis. Ya verás que mañana te reirás de lo que pasó hoy”, terminó de decirle su padre. Miranda, acaso siguiendo su actuación de siempre, decidió darle su mejor sonrisa y abrazó a su padre para que se quedara bien tranquilo y que pensara que aquello era sólo pasajero ...Mañana sería otro día ... Sabía que debía seguir el juego que ella misma había comenzado ... Por eso pensó que debía descansar, y estar lo más lúcida posible para poder decirles a todos lo que le pasó y lo que iba a pasar ... Al fin y al cabo era una crisis, como dijo su padre, y que de las crisis se aprende y se supera ... Miranda subió a sus habitaciones y volvió a la oscuridad que la ayudara a meditar y reflexionar, a verse a sí misma y pensar en cómo quería verse al otro día. Cuando se acostó, sólo tenía en su mente aquel cielo estrellado y a Selena en la estrella más brillante. Miranda quería sentir al otro día la misma alegría que sintió en ese momento en el que estaba sola, bien sola lejos del mundanal ruido, y de ese mundo sin sentido y sin rumbo. Recién allí, Miranda se dejó llevar por el sueño esperando la llegada del otro día, le llegada del gran día...

Miranda sorprendió a su padre ya levantada cuando subió a despertarla ... Y no sólo eso ... Lo sorprendió cuando le dijo que había convocado a todos en su casa para lo que tenía que decirles. Su padre se tranquilizó al verla tan ávida por aclarar todo y tener su mejor semblante ... Al revés de Miranda, él no había dormido bien ... Estuvo largo tiempo chequeando las repercusiones en todas las redes sociales de su actitud a la salida del concierto y muchos eran comentarios lapidarios. También sabía que a los medios, sponsors y auspiciantes les inquietaba la salida poco elegante de Miranda y temía que ellos pensaran que fuera llevada por el mal camino. Igualmente, ellos trataron de tranquilizarlo afirmando que de última podía aparecer de nuevo como amiga de Jennifer con un nuevo look que ya demostraba tener muy buena repercusión y que todo podía seguir con el mismo éxito de siempre ... Cuando vio que llegaba su casa todo el mundo, miró a su hija y los pulgares en alto de ella lo hizo pensar que lo del día anterior efectivamente había sido un mal momento del que ahora Miranda lo iba a recomponer. Se encargó de recibir a todos en el amplio hall de su casa para que estuvieran cómodos al recibir las explicaciones de su hija. Cuando todos se acomodaron, las cámaras estaban fijas en ella y la expectativa estaban puestas en Miranda, ella empezó por agradecer su presencia, les pidió disculpas por su salida intempestiva del día anterior y les dijo: “Debo confesarles que ayer entré en crisis y reflexioné ... Reflexioné mucho ... No es fácil ser una artista exitosa y muy joven ... Y es más difícil transitar un camino que tal vez no sea el propio ... Ayer me di cuenta de que me estaban diciendo cosas que no tenían nada que ver conmigo, con lo que soy y con lo que pienso ... Y eso es responsabilidad mía ... Yo quería triunfar pero no al precio de dar una imagen que no es la mía ... Me encanta ser exitosa y querida ... No reniego ni renegaré jamás de ello ... Pero tal vez me encantaría ser exitosa y querida por lo que realmente soy, por lo que realmente pienso, por lo que realmente quiero transmitir ... Y si eso lograra, aunque sea menos exitosa, sería más feliz aún ... ¿Saben? Ayer hablé mucho con mi padre ... Y él me ayudó a pensar y a poder decirles lo que pienso hoy ... Ayer me acordé de Selena ... de Selena Quintanilla ... Creo que todos la admiramos mucho ... Los que la han visto como aquellos que, como yo, no la hemos visto en persona ... Yo soy artista gracias a ella ... Yo he querido cantar gracias a Selena ... Ella siempre fue mi referente y mi ejemplo ... Y seguí y me esforcé mucho pensando en todo lo que Selena había logrado con mucho esfuerzo, además de su talento natural ... Pero ayer me di cuenta de que le fallé, de que hice cosas que Selena nunca hubiese hecho, que Selena no hubiese accedido a hacer ... Selena fue admirada como artista y muy querida por lo excelente persona que fue ... Ella no inventó un personaje ... Selena era la misma persona auténtica dentro y fuera del escenario ... Y por eso fue tan amada y respetada ... Siempre dije que quería seguir su camino ... Ayer me di cuenta de que no lo estaba haciendo ... Eso quería decirles hoy ... No quiero que mi vida privada sea más importante que lo que ofrezco, quiero hablarles con la verdad y con lo que siento ... Yo no tengo ni amigos ni enemigos en el mundo del espectáculo ... Hoy no tengo novio y no es lo más importante si lo tendré mañana y quién es ... Hoy es importante mostrarles lo que soy y que me admiren por lo que les puedo mostrar ... Les prometo que me esforzaré más y más, que les daré lo mejor y que en todos los actos de mi vida esté presente la figura de Selena ... Sé que tal vez muchos de ustedes piensen como yo que Selena era una persona maravillosa, pero que por el final que tuvo tengamos que pensar que su camino no es el de los mejores para seguir ... Yo no lo creo así ... Yo sólo les quiero demostrar que su camino es posible ... Alguna vez leí que Selena había declarado que sólo quería que la recordaran con Amor ... Yo quiero lo mismo ... por mí y por Selena ... Es todo lo que tenía para decirles ... Espero que lo hayan podido comprender ... Muy buenos días ... Y que Dios los bendiga...”. Miranda pudo apreciar un silencio casi sepulcral ante sus declaraciones. Ni quiso mirar a su padre ... Se dio vuelta como para irse conteniendo el llanto, pero un fuerte golpe de palmas la estremeció y la detuvo ... Ese golpe de palmas muy lento al principio comenzó a ser cada vez más fuerte y rápido. Cuando Miranda se dio vuelta vio que el presidente de su discográfica era el autor de semejante aplauso. Ella lo miró, y el sólo le respondió con una sonrisa y un asentimiento en su rostro ... “Tienes mucha razón, Miranda ... Es hora de hacer que el sueño de Selena sea posible ...¡¡Yo te sigo en ese camino!!”, dijo uno de los ejecutivos de la más importante cadena televisiva y acompañó con otro aplauso. Miranda no podía creer lo que veía y escuchaba ... Uno a uno de los asistentes se sumaban al aplauso, a la aprobación y a la ovación ... Una de sus fans que se había infiltrado entre los asistentes, se abalanzó sobre ella y le dijo: “Siempre te quise, Miranda, y ahora te quiero mucho más. ¨¡¡Yo te voy a ayudar!!”. Miranda la abrazó y rompió en llantos. Todos se quedaron en sus lugares sin dejar de aplaudir y de gritar por la decisión de Miranda. Todos entendieron acaso que se había terminado ese mundo de farsa, y que nacía una era de Amor y de entendimiento, una época en la que por fin se seguiría el camino de Selena, algo que parecía tan admirado, tan evocado, pero también tan poco transitado ... El padre de Miranda se acercó ... Ella iba a pedirle disculpas por su “engaño”, pero él tapó su boca con el índice de su mano derecha ... “No tienes nada que explicarme ... Nos has dado una gran lección a todos ... Estaré siempre presente para ayudarte y sólo haré lo que tú me pidas ... Sé que lo que harás será lo mejor para ti y para todos...”. Miranda se abrazó a su padre en el medio del llanto y del agradecimiento ... Cuando pudo abrir los ojos pudo ver en el medio de las luces y de los flashes aquel cielo estrellado y en el medio de él a esa estrella gigante ... Ahora sí podía ver a Selena ... No era intuición ni esperanza ... La podía ver ... Ella estaba sonriendo ... La podía ver ... Selena también le estaba agradeciendo ...También le estaba dando su mejor aplauso ... Miranda pudo comprender que Selena ahora sí descansaría en paz ... sabiendo que su camino volvería a ser transitado ... que su camino de Amor, honradez, trabajo y verdad volvería a ser venerado y ser motivo de orgullo ... Ahora la humanidad volvería a sentirse orgullosa de ser como lo que siempre fue, con lo que Selena les mostró, con aquello que Selena supo sacarles con su mejor sonrisa y cariño ... Miranda supo que había hecho el mejor acto de su vida ... Ya nada volvería a ser lo mismo ... Y que todo lo que iba a venir, iba a ser mejor, mucho, mucho mejor...

(Siendo como uno es ... Viviendo y dejando vivir ... Transitando el camino de la verdad, del trabajo, del esfuerzo, de la justicia, del talento, del trabajo en equipo ... Transitando el camino de la honradez y de la autenticidad ... ¿Es imposible? No ... Selena lo hizo posible ... con Amor y siempre con una sonrisa ... Es sólo cuestión de querer transitar ese camino ... Es sólo cuestión de tener la valentía de hacer el camino más difícil para ser de éste un mundo mejor ... para ser de ésta una humanidad mejor...)
Siempre querré, Selena, que se te recuerde con Amor, con el mismo Amor que sólo tú pudiste dar...

Te quiere mucho...


Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)