Cuando despierto...

30 de junio de 2014

El sueño de todos los días, de todos nosotros, Selena...



Aquel “viejo sueño americano” ... Es curioso ... El otro día escuchaba a alguien que hablaba de una artista que con sus canciones criticaba ese modo de vida y que le gustaba ese tipo de cantantes atormentadas ... Yo me pregunto por qué nos gusta ese modo de entender las cosas, por qué preferimos a la gente que se muestra triste y melancólica por la “tortura de vivir” o por los problemas que nos condicionan la felicidad ... Mira, Selena, si tú hubieses sido así ... si le hubieses mostrado al mundo que no hay futuro, que no se puede dar una sonrisa ante la adversidad, que no se puede salir de los peores momentos trabajando, siendo honestos, auténticos, positivos, que no se puede emprender cada objetivo en la vida teniendo fe, paciencia, esperanza, ganas y convicciones ... Vivimos equivocados ... Creo que no hemos entendido nada  en los últimos años ... Creemos que debemos abandonarnos a la depresión, al abandono o a la resignación para superar los males de este mundo ... O creemos que debemos vendernos al sistema, y lucrar con la artificialidad, disfrazarnos de complejos, vivir de la polémica, de la pelea, de la falsa tristeza, de las declaraciones conflictivas ... Creemos que no debemos mostrarnos tal como lo que realmente somos, que no nos conviene ser felices exponiendo nuestros verdaderos pensamientos, siguiendo nuestros valores, vivir sabiendo el valor de cada cosa, superarse para poder enfrentar todos los obstáculos y lograr todas las metas ... Yo también creí que no había salida, yo también me hundí en la melancolía, yo también viví con rabia y con bronca por las injusticias de este mundo, yo también vivía deprimido y no quería salir de ese estado ... hasta que te conocí, Selena ... Y si bien tu historia, y sobre todo tu final, me podrían haber llevado a profundizar mi tristeza, mi desconcierto y mi desazón, con sólo verte me di cuenta de que había un camino por andar, un modelo para seguir, un valor que defender contra viento y marea, aunque uno viva peleando contra los molinos de viento, aunque la realidad te indique que es una causa perdida, que tu partida de este mundo es el mejor ejemplo de que no hay forma de triunfar en la vida siendo bueno, honesto, responsable ... Que es más fácil lo otro ... Y si no es lo otro, es más sencillo rendirse y vivir atormentado o disfrazado haciendo de atormentado ... No hay peor cosa que abandonarse, no hay peor cosa que dejar una imagen patética en la vida cuando uno cree que hundirse en el abandono es lo único que le queda a los que no soportan seguir con aquello que se nos ha impuesto, el mundo que se nos ha ofrecido, los modelos que no encajan con la forma de ver las cosas que tiene cada uno ... Pero muchas veces pienso que muchas de esas personas que eligen ese camino no han vivido las necesidades extremas, no han vivido en el límite de supervivencia y sí tal vez tuvieron la oportunidad de elegir qué hacer, qué camino elegir ... Esas personas seguramente no tuvieron que padecer lo que tuviste que vivir tú, Selena ... Tú no habías elegido tu destino ... Un día tuviste que tomar un micrófono a los 8 años y tenías que encantar a un público a quien no conocías, con canciones que no sabías y cantando en un idioma que ignorabas. Tú, Selena, tampoco sabías cuál sería tu destino, seguramente más de una vez pensaste que no tenías futuro, sobre todo cuando tu familia quebró, se quedó sin casa, sin trabajo, sin un lugar en el cual vivir, sobreviviendo en la casa de tus tíos en una ciudad que no conocías y sin saber por mucho tiempo si tendrías algo para comer ... ¿Mira, Selena, si hubieses tenido tiempo para deprimirte, para jugar de artista torturada, para dejarte abandonar por tu destino, para llevarte por un camino de perdición? No, Selena ... Tu desidia, tu derrota era el abandono ... La derrota de cualquier integrante de la familia era la derrota de todos ... No, no había tiempo para dejarse estar, no había tiempo para deprimirse ni para dedicarse a las malas prácticas ... Había que trabajar, luchar duro, hacer frente a la adversidad, salir del pozo con dignidad, demostrando que se puede salir de un modo limpio, que se puede perder, pero también que se puede ganar siguiendo ese noble camino ... Y tú, Selena, lograste ese objetivo con creces ... Hiciste posible el sueño americano, sin criticarlo ni alabarlo ... Simplemente lo hiciste posible ... Demostraste que se podía y que se lograba apelando a las mejores armas, que se podía sonreír, que se podía soñar, que se podía lograr todo siendo positivo, que se podía convivir con honestidad aun ante un mundo tan deshonesto y tan corrupto. Tú lo hiciste posible, Selena ... Lo hiciste posible siendo como eras, sin vender imágenes falsas, esperando que te quieran por hacer todo lo posible para alegarle la vida a la gente, dándoles un lindo mensaje, ofreciéndoles una guía, un ejemplo. Les diste Amor y recibiste Amor, no hablaste mal de nadie y obtuviste respeto, no hiciste del escándalo un modo de triunfo y lograste que te valoraran como artista y como persona ... Les mostraste a todos que aun en tu mejor momento no te sentías más ni mejor que nadie, que eras una persona más que hacía lo suyo, que no te sentías ni una iluminada ni un ser superior ... Saliste del pozo, de ese agujero interior siendo diferente, trabajadora, talentosa y perfeccionista ... Les mostraste a todos el valor de trabajar en equipo, el valor de aprender de otro, de estudiar para no quedar rezagada. ¿No podías hacer tus estudios normalmente por estar de gira? Te recibiste por correspondencia ... ¿No hablabas el idioma español? Cuando comenzaste a ser famosa lo aprendiste y sorprendiste a todos con tu facilidad para hablarlo ... Para ti no había cosas imposibles ... Era cuestión de proponérselo y tener ganas ... Era cuestión de cumplir con cada sueño, de no detenerse nunca, de vivir cada día con un objetivo a cumplir, con ganas de no perder tiempo ... vivir cada día como si fuera el último ... Hiciste posible el sueño americano sonriendo todos los días, aun en aquellos momentos en los que eran más para llorar que para reír ... Sabías cómo era el mundo pero no te permitiste rendirte a un destino gris, sin futuro y sin perspectiva ... No te rendiste ni pretendiste vivir de esa supuesta rendición ... Lo enfrentaste y lo superaste ... Aún recuerdo aquel concierto de Tamaulipas, México, cuando tenías sólo 16 años, en el que tenías una figura de niña, no te conocían y no hablabas una palabra en español ... Y veía como gritabas, cómo arengabas al público para que participara con tu clásico “manos arriba, todo el mundo” ... Y veía cómo invitabas a tu hermano A.B. a bailar “La bamba” para encantar a todos ... Te veía allí, Selena, y veía a la Selena más famosa de unos años después ... y veía a esa Selena saludando a cada uno de los asistentes a sus conciertos con la misma sonrisa, con la misma dedicación ... Te veía a ti, Selena, y veía tu historia ... Porque tu vida, tu necesidad, tu mandato, tu misión en la vida estaban puestos en juego en cada concierto, en cada presentación ... Podías ser famosa, podías haber ganado miles de premios, podías tener una disquera que te apoyara, podías emprender tu carrera de diseñadora, podías ser reconocida en todo el mundo, podías tener un futuro ... pero en cada presentación estaba en juego que pudieras alegrar a cada asistente ... En cada concierto estaba en juego que pudieras tener un plato de comida a la vuelta de él...

Pero pasó lo que pasó e imagino que esas huellas que has dejado no se borrarán por más que pase el tiempo, por más que el mundo vaya cambiando, por más que cada año que pasa tu recuerdo en los medios sea cada vez menor y con menos valor ... Pero las cosas no pasan porque sí y las consecuencias de tu ausencia, Selena, están a la vista, todos los días, en nuestra vida cotidiana, en los actos más trascendentes, en el futuro de este mundo, en los valores en los que transita hoy la humanidad ... La gente ya no valora ser feliz, no valora el valor de un abrazo, no valora la sonrisa, no valora la entrega, no valora el dar sin esperar, no valora ser positivo, no valora ser auténtico, no valora ser trabajador, no valora superarse, no valora ser solidario ... Nada es casualidad, Selena ... Por más que muchos te valoren, todos en sus consciencias -y en sus subconscientes también- saben cuál fue tu destino y pensarán que al final no es el tuyo un buen camino a seguir ... Porque siempre ganan los malos, porque siempre triunfa la hipocresía ... Porque siempre gana el que es más vivo, el que esconde su verdadera personalidad, el que sabe de todos para utilizar la información a su favor, el que vive de otros, el que vive hablando mal de los demás, el que explota a otros, el que maltrata, el que discrimina, el que atemoriza, el que promulga la artificialidad como método de triunfo, el que pone precio a todo, el que vive lucrando, el que vive manipulando, el que vive difamando, el que vive estafando ... ¿Acaso con tu final y con ver qué clase de persona es tu asesina no queda claro lo que ha triunfado, que ha quedado en el inconsciente colectivo de esta humanidad, quiénes son los supuestos ganadores y perdedores de esta historia, Selena? Lo vemos todos los días ... El honesto ve cómo triunfa el estafador ... El trabajador ve cómo triunfa el que roba, el que miente, el que duerme viviendo del trabajo de los demás, el que manipula, el que hace política ... El espontáneo ve cómo padece la humillación de los hipócritas que no toleran que muestra su verdadera condición ... El que vive feliz ve cómo lo presionan lo que no toleran su felicidad ... Los que viven su mundo ven cómo son presionados por psicópatas que no soportan que alguien no esté bajo sus dominios ... Son otros los valores, tan distintos a ti, Selena, tan distintos a tu espíritu, a tu mensaje, a los valores que siempre quisiste transmitir ... Aún recuerdo cuando decías “Yo sólo deseo que me quieran” ... Hoy todo es tan distinto ... Lo que más me preocupa es que haya tanta gente joven que actúan con odio, con resentimiento, con derrotismo ... Esas cosas yo las veía antes en gente mayor, en gente que pegaba la vuelta, en gente que se sentía resignada por no haber logrado nada en la vida, por no haber cumplido alguno de sus deseos, por sentir que ya no tenía tiempo para revertir su destino sin ninguna perspectiva ... Hoy esos síntomas lo veo en gente joven, en gente que tiene la edad que tenías tú, Selena, cuando partiste de este mundo ... ¿Qué nos pasó en este tiempo para llegar a esto, cuánto ha tenido que ver lo que te pasó, cuánto incidió que tus valores no se hayan seguido por ser para muchos inviables, perdedores, idílicos, no aptos para este mundo, imposibles de cumplir con esta humanidad? No hace mucho una chica hizo algo insólito al recibir el regalo de cumpleaños de sus compañeros de trabajo. Dijo que sabía y lamentaba que participaran muy a su pesar personas que tal vez no la toleraban pero que lo hacían para no quedar mal con ella o por presiones de otro ... Tal vez en otro contexto hubiese entendido esa actitud, pero en esa situación, ¿para qué diría eso?; ¿cuál es el mensaje que quiso dar?; ¿qué pretendió decir?; ¿cuál fue su objetivo? Y a mí, que me gusta comprender la conducta humana aun en las situaciones más inconcebibles, se me ocurrió pensar que a esa persona le gustaba estar en una situación en la que fuera rechazada y hasta odiada por muchas personas, y que esas mismas personas, a pesar de sus sentimientos, tuvieran que hacerle un regalo ... Siendo que esa persona está tan desesperada por tener un cargo jerárquico y desempeñarlo con un látigo en la mano, supongo que gozaría de ese momento en el que las supuestas víctimas tuvieran que tener un detalle aunque la odiaran ... ¿Entiendes a lo que me refiero, Selena? Apenas te he dado un ejemplo de lo que uno vive todos los días ... A pocos les gusta ser amados, a pocos les gusta ser queridos ... A la mayoría le gusta pelear, les gusta confrontar, pertenecer a bandos, vivir en la guerra y en el odio, y llegar a lo más alto pisoteando a los demás y disfrutar de ver a sus enemigos obligados a rendirle pleitesía ... ¿Entiendes, Selena? ¿Te has dado cuenta a qué hemos llegado? ¿Tú hubiese podido vivir en este mundo en el que priman estos valores? ¿Tú crees que estando tú presente y triunfando por todo el mundo se seguirían esas insólitas conductas? ¿Ahora entiendes las consecuencias de tu ausencia de este mundo? El mundo parece que no sigue tus valores ... La humanidad ha creído que es mejor seguir el camino de esa psicópata que te quitó todo ... El mundo ya no quiere ser querido, como lo pretendiste tú, Selena ... Y hoy padecemos las consecuencias de ese acto cruel, de ese acto cruel del cual tú fuiste la víctima y nosotros los grandes perjudicados de las consecuencias de un mundo sin Amor, de un mundo sin tu Amor, Selena...
Lo irónico de todo es que al decirte esto, Selena, debería llegar a la conclusión de que no hay futuro, de que debemos resignarnos, de que debemos quedarnos en casa deprimidos no esperando nada de nadie ni generando cosas para cambiar este destino de destrucción de la humanidad ... Pero no ... Ése no es mi mensaje ... No es eso lo que quiero transmitir ... Siempre supe, siempre dije y siempre he escrito que la mejor forma de recordarte con el paso del tiempo es tratando de seguir tu ejemplo y de exhibir tu figura en todos los ámbitos en los que uno se mueve en la vida ... Por eso, en cada lugar en el que estoy, sea en casa, en el trabajo, conmigo mismo a donde vaya, está presente una foto tuya. Siempre le mostraré al mundo, te conozca o no, que hay alguien que te recuerda con cariño, con admiración y, sobre todo, con Amor, como tú lo querías ... Que hay alguien que te toma como ejemplo, como guía, como camino a elegir aun con ese destino tan cruel ... Que hay alguien que te considera lo más importante, más importante que cualquier cosa, más importante de lo que uno dice y afirma todos los días ... Pero no es sólo eso ... No es sólo recordarte con “fotos y recuerdos” ... También recordarte en la práctica levantándose con alegría, teniendo una meta y cumplirla, superarse, aprendiendo, poniendo una sonrisa ante la adversidad, tratando de alegrar a los demás, ayudando, salir del rencor, del odio, del desamor y de la depresión haciendo algo, lo mínimo que sea, para ser mejores personas, para llevar tu modelo, Selena, a la más alto posible, para demostrar que tu ejemplo es posible, que se puede lograr todo siendo trabajadores, honestos, auténticos ... Demostrar que se puede hacer de éste un mundo mejor con sólo recordarte, con sólo revivir tu sonrisa, con tener tus ganas de vivir, con no dar nada por perdido, con no hundirse en la resignación ... Tú, Selena, hiciste de mí una mejor persona ... Estoy seguro de que si todos siguiéramos tu camino, seríamos mejores personas ... Siempre pensé que si nos propusiéramos seguir felices siendo como quisiéramos ser nos sentiríamos mucho mejor ... Por eso sé que el día en el que esta humanidad sea como tú será mejor, feliz, no habrá más pena ni olvido y veremos al final del camino el paraíso, en ese paraíso en el que estarás tú, Selena, esperándonos con una sonrisa ... Y sé que algún día eso sucederá ...

(Siempre me planteo hasta cuándo podré escribirte, Selena ... si tengo un límite, si algún día me quedaré sin nada para escribirte, para evocarte ... Mientras sienta que hablando de ti mantengo las ganas, esas ganas de recordarte con pasión, con alegría, con entusiasmo y también con tristeza por tu destino, nunca llegará ese día ... Mientras tenga ese sentimiento, ese sentimiento de orgullo por tomarte como modelo, como estandarte, de alegría por lo que me has dado y por reivindicarte por el daño que te han hecho, nunca llegará ese día ... Hasta que no vea que la gente siga tu ejemplo, hasta que la humanidad no se lamente, como yo, por lo que tú no pudiste disfrutar de aquello por lo que tanto tuviste que trabajar y esforzarte, y que busque recordarte con Amor siguiendo tu camino, yo no me detendré ... Y si alguna vez ese día llega, es porque estaré de nuevo contigo, para que nos abracemos, nos alegremos y no nos sintamos tan solos...)

Te quiere con toda el Alma...


Sergio Ernesto Rodríguez
(Buenos Aires, Argentina)