Baila conmigo...

30 de septiembre de 2012


Qué hubiese pasado si…, Selena…

No hay verdades absolutas ... Muchas veces somos propensos a las grandes frases, a las grandes revelaciones que nos permitan darnos un camino, una solución a nuestras vidas, una alternativa para ser feliz ... Pero de nada sirven las grandes revelaciones, las grandes soluciones si no se tiene en cuenta el contexto y, sobre todo, a la persona. Muchas veces he escuchado y leído que en la vida hay que superar los malos momentos, dejarlos atrás, olvidarlos ... Que siempre hay que trazarse un nuevo camino, una nueva alternativa, que hay que seguir adelante, que no hay que preguntarse por qué nos pasó esto o aquello, que no se puede vivir del pasado ... Y nadie puede negarse a esas verdades … y a esas realidades ... También es entendible que se nos diga que no se puede seguir toda la vida preguntándose por qué pasó tal cosa, qué hubiese pasado si tal acontecimiento no hubiese sucedido, qué sería de nuestras vidas si el desarrollo de los acontecimientos hubiese sido otro … Y aquí me detengo, pues es necesaria una distinción. Mientras nuestras vidas tengan la posibilidad de un cambio, mientras nuestras vidas puedan ser reparadas es imprescindible tener ese pensamiento. Creo que nadie está exento de haber padecido muchos desencantos en la vida y no hay peor cosa que quedarse en la frustración y en el desánimo de no haber sido lo que uno hubiese querido y quedarse esperando un milagro para ver si esa suerte cambiaba … No … Allí, todas esas frases, todas esas revelaciones deben aparecer para hacer algo al respecto ... El cambio está en uno, si es que uno quien quiere cambiar. Uno puede quedarse en la frustración o salir de ella. Uno puede vivir renegando del mundo y de la humanidad por no haber logrado el camino de la felicidad. O a la inversa, uno puede buscar el camino para revertir esa frustración. En general, el ser humano es cómodo y conformista, aun en la mala. Somos más partidarios de la idea de que es mejor lo malo conocido que lo bueno por conocer. Y nos es más cómodo llorar porque no hemos logrado lo soñado, manifestar al mundo y a todo lo que nos rodea nuestra bronca y hasta nuestro odio por no ser felices que buscar intentar serlo siendo como quisiéramos ser … Si Selena hubiese sido como muchos de nosotros, seguramente estaría hoy en este mundo siendo una más destilando su tristeza por no ser lo que hubiese querido y llorando por su presente. Selena tuvo una vida llena de dificultades y frustraciones pero jamás se quedó en ella, ni le echó la culpa al mundo y a la humanidad por lo que le tocó vivir ... Al contrario ... Desde la niñez Selena intentó siempre superarse y lograr sus objetivos … Selena a los 6 años estaba muy cómoda siendo una niña que sólo jugaba e iba al colegio. La vida la puso en un reto, en una situación que no le agradaba para nada: cumplir el sueño de su padre de triunfar en el mundo de la música ... Siendo una niña, sólo deseaba divertirse y soñaba con ser diseñadora cuando fuera grande. Obviamente, no pensaba en otra cosa para ese entonces. La nueva situación la enfadó tanto a ella como a sus hermanos, pero eso para nada la amilanó. Se repuso a eso pensando en que tal vez si ella pudiera superarse, si pudiera dar lo mejor de sí y de ese modo lograr la gran meta de su padre de convertirse en una gran cantante internacional, podría lograr ser feliz haciendo lo que más quería … Ser una mujer, una simple mujer feliz con su Amor y con su vocación concretada de ser diseñadora. En eso estaba a los 23, casi 24 años, cuando era ya una estrella y querida por todo el mundo. En eso estaba con su esposo Chris en el diseño de su nuevo hogar para en el futuro tener hijos. En eso estaba con su disco en inglés para lograr el despegue internacional como cantante ... En eso estaba cuando una psicópata le quitó todo y le dio al mundo el peor ejemplo: que a veces con ser talentoso, bueno, honesto y responsable no se llega en la vida sino a veces todo lo contrario. Creo que todos los días deberíamos preguntarnos si es ése el ejemplo que queremos para nosotros, para nuestros hijos y para toda la humanidad… Por eso todas esas revelaciones dejan de tener esa efectividad cuando no hablamos de nuestras vidas sino de muchos que ya no están y que no tienen esa oportunidad de revertir una situación y que no la tuvieron porque alguien con total impunidad le quitó dicha posibilidad. No tiene fundamento que digamos que no tiene sentido preguntarnos “qué hubiese pasado si”, cuando es inevitable, al hablar de Selena y de su triste destino, hacernos dicha pregunta. No tiene sentido censurarnos y autoimponernos no hacer ese interrogante sabiendo que la partida de Selena tiene tantas preguntas sin respuesta, tantos problemas sin solución ... Cuando hablamos de Selena, cuando vemos a Selena, cuando apreciamos el enorme talento que tenía, nos es inevitable decirnos cómo pudo haber pasado, qué sería de Selena hoy, dónde estaría en la consideración mundial, hasta dónde hubiese llegado, cómo serían hoy sus diseños, en qué eventos hubiese estado, cuántos hoy seguirían su ejemplo de vida, de persistencia, de perseverancia, de superación, de dar siempre más, de no darse nunca por vencida, de aprovechar la vida hasta lo máximo para dar lo mejor de sí para sí y para los demás … Por eso me es muy difícil, en el caso de Selena, aceptar esas frases que me dicen que no tiene sentido seguir preguntándose “qué hubiese pasado si”, qué hubiese sucedido si Selena estuviera entre nosotros … No tiene sentido porque nos es inevitable lamentarnos que una mujer que había hecho todo para mejorar, para superarse, para ser feliz, se vaya de este mundo sin siquiera tener la posibilidad de enmendar un equívoco, de poder corregir el camino trazado. Tal vez nos es imposible aceptar el estatus quo simplemente porque en nuestro fuero más íntimo sabemos que otro mundo tendríamos si Selena estuviera entre nosotros. Lo que esa asesina hizo no fue sólo privar a Selena de su vida, de sus sueños, de sus más nobles anhelos. Lo que también hizo esa asesina fue privarle a la humanidad de que fuera feliz, de ver que un camino era posible, de convencerse de que todo se puede lograr si uno se lo propone. Viendo la realidad actual de este mundo, parece que todos nos quedamos y nos conformamos con lo que vemos hoy. A veces me asusta que cada vez más la gente vea en el hacer mal al otro el camino más fácil para canalizar sus frustraciones y sus iras. Me preocupa que haya cada vez más psicópatas al estilo de esa pérfida que le quitó todos los sueños a Selena entre nosotros copando todos los ámbitos de nuestras vidas y haciendo de su estilo lleno de odio y de frustración un modelo, un camino a seguir. La mayoría de esa gente ocupa lugares importantes en sus ámbitos de trabajo: son líderes, jefes, gerentes, autoridades y hasta presidentes de algunas naciones ... Y los demás, los demás, los honestos, los que van por la vida tratando de lograr sus objetivos con Amor, sin hacer daño a nadie, cumpliendo las reglas, sin odio, confiando en sus propias fuerzas y habilidades, están cada vez más relegados y casi resignados a aceptar las cosas como son … Hasta hoy y seguramente para siempre veremos las consecuencias de lo que esa pérfida hizo con Selena … Un mundo con los peores valores, un mundo con odio, un mundo en el que hay que ganar a como sea, un mundo en el que cada acontecimiento se vive como una guerra a ganar, un mundo que genera violencia justificándose en que son víctimas de las circunstancias … Un mundo tan alejado de Selena … Un mundo tan alejado de su Amor… Miro a mi alrededor y veo espantado lo que sucede ... Gente que se cree dueña de la verdad, gente que divide a la humanidad en buenos y malos, gente que cree que en la vida sólo hay blancos y negros, que no hay matices, que no hay colores, gente que cree que sólo hay que diferenciarse y no unirse, gente que vive difamando a otros con las peores mentiras y calumnias. Y lo que es peor: gente que acepta esas mentiras por miedo, impotencia y resignación. ¡¡Cuántas cosas terribles ha dejado la ausencia de Selena!! Odio, resentimiento, sed de violencia, sed de venganza, la guerra permanente y cotidiana, creación de enemigos inventados para justificar su existencia, amar relaciones de conveniencia para lograr los objetivos. ¡¡Hasta hay gente que comienza relaciones amorosas sólo para lograr sus objetivos de destrucción a tal o cual persona, a tal o cual grupo con ideas diferentes!! ¿Esto sería posible con Selena en este mundo? ¿Podría Selena tolerar esta situación? Con Selena presente, ¿hubiésemos llegado a esto? No … Seguro que no … Parece que ya ni nos molesta las cosas que se dicen, las cosas que se hacen … Los victimarios se declaran víctimas para justificar lo injustificable. Las víctimas tienen que dar explicaciones y hasta son señalados con la peor de las acusaciones sin prueba alguna. Los que antes se odiaban, ahora se quieren por conveniencia … ¿En qué mundo estamos? ¿Qué hemos hecho de él? Decimos querer a Selena pero se permite impunemente que la asesina una y otra vez siga disparándole con saña con la peor de las acusaciones … Acusaciones a una mujer que no se puede defender … Una mujer que no puede decir su verdad, la verdad … Una mujer tan querida por todos, una mujer tan buena, tan carismática, tan llena de vida … ¿Deberíamos permitir esto? ¿Deberíamos seguir dejando que pasen estas cosas? ¿Dejaremos con resignación que esa pérfida salga a la calle con libertad condicional en el año 2025, dentro de sólo 13 años? ¿Cuánto vale la vida de Selena? ¿Qué méritos hizo la asesina para que tenga la posibilidad de irse de la cárcel en poco tiempo si jamás, jamás, se arrepintió de nada? Yo no soy partidario de la pena de muerte por una obviedad: si condeno el accionar de esa pérfida, yo no tengo derecho ni justificación alguna a hacer lo mismo que hizo ella ni permitir que otros lo hagan … Pero sí tengo derecho a pedir algo. Dado lo hecho por la asesina no sólo el 31 de marzo de 1995 sino en todo el tiempo subsiguiente, lo mínimo que puedo pedir es que se cumpla la condena: prisión perpetua, que nunca más salga de la cárcel una persona así. Algún ejemplo tenemos que dar a la humanidad con este tipo de personas. Si no lo hacemos, estaremos condenados para siempre a merced de los psicópatas … Dará lo mismo ser un simple “ladrón de gallinas” que un múltiple asesino o un varón que queme a su esposa en la peor salvajada de violencia de género … Y no faltará alguien que diga que ambos pueden salir de la cárcel a los dos meses de ser condenados para “hacer tareas comunitarias” con el fin de reinsertarse a la sociedad … Si es así, los ideales de esa pérfida habrán triunfado y Selena estará lejos, bien lejos de todos nosotros… Es muy difícil en el caso de Selena ponernos a decir que aceptemos la realidad, que no nos preguntemos más “qué hubiese pasado si”, viendo lo que sucede y sintiendo aún la ausencia de Selena. Y la pregunta “qué hubiese pasado si” no es sólo por la Selena artista sino por la Selena persona. Tal vez lo bueno en estos últimos tiempos es notar que muchos empiezan a rescatar no sólo al mito, a la leyenda, sino a la mujer que soñaba, que sentía, que planificaba, que quería, que se alegraba, que se enojaba, que era persistente, que deseaba lo mejor para sí y para los demás …Y mientras tanto en muchos persiste el pasado: algunos siguen actuando como si aún estuviéramos en 1995 o 1997, como si nada hubiese sucedido, como si el paso del tiempo y ciertas evidencias no dejaran en claro quién ha dicho la verdad, quién ha mentido, quién realmente ha lucrado con la desgracia de Selena a base de mentiras y de calumnias a su persona, quién ha ocultado cosas, quién se ha olvidado de Selena para dejar las cosas como están sin alterar el orden establecido. Hace poquito uno se ha quedado perplejo, una vez más, con otro programa televisivo en el que se le hacía un nuevo reportaje a la asesina y al tristemente célebre doctor que antes decía no tener nada que ver con Selena y que extrañamente ahora dice que sí, en coincidencia con lo que dice la asesina, con quien antes decía “estar enfrentado”. Yo me pregunto si nos están tomando el pelo ellos y si la gente que aún le sigue dando espacios a esta gente tiene alguna credibilidad entre los televidentes… ¿Cuál es el motivo para hacer estas “nuevas revelaciones”? ¿El “rating”, el “morbo”? ¿Nos estamos dando cuenta de que con esto contribuimos a legitimar lo que se hizo y lo que se le sigue haciendo a Selena? ¿Por qué no se les da el mismo espacio a tanta otra gente que tiene algo que decir sobre lo que le ha sucedido realmente a Selena, y que quiere ofrecerle el mejor recuerdo y tributo? ¿Por qué no hacer un programa en el que expresemos nuestras certezas y nuestras dudas sobre lo que sucedió hace 17 años? ¿Por qué seguimos aferrándonos al pasado, a ese esquema dual que tenía sentido en aquellos años pero que ahora suena anacrónico e irreal? Veía los comentarios de la gente sobre lo que sintieron sobre ese programa y al menos me daba esperanza de que ya la mayoría no sólo repudia las declaraciones de esos impresentables sino a la gente que le sigue dando esos espacios. Ya la gente no utiliza el epíteto “Dejen a Selena descansar en paz” para justificar a la asesina y para atacar al padre de Selena. Ahora la gente utiliza ese latiguillo para que se deje de mentir sobre el buen nombre y honor de Selena, y para atacar a los medios de comunicación que justifican todo a cambio de rating y de dinero … ¿No es hora de empezar a escucharse más? ¿No es hora de dejar de recordar a Selena en base a cánones preestablecidos? Ya ha quedado más que claro que la asesina, además del deleznable acto cometido, sólo tiene para decir más y más mentiras, más y más calumnias para justificar su existencia en los medios y para seguir disparándole a Selena. Y la Familia Quintanilla sólo debería cumplir con lo que prometió no hace mucho: dar la versión completa sobre lo sucedido aquel nefasto 31 de marzo, porque como dijo el padre de Selena, la gente aún se pregunta por qué sucedió aquello y es bueno darles una respuesta, una explicación … Yo sólo les pido que no se encierren en lo suyo, que sepan escuchar a los que con buenas intenciones aportan datos, hacen lindos recuerdos o se preguntan cosas en forma noble por el dolor que les genera la partida de Selena ... Porque no es lo mismo esta gente que los otros que sólo difaman y dicen cosas horribles de Selena … Porque con sólo mirar el nuevo especial emitido por Univisión ha quedado más que claro que Cristina Castrellón tenía razón en su versión sobre las intenciones de la asesina, del doctor impresentable y de su ex asistente … Todos luchaban y se peleaban por tener mayor influencia sobre Selena, todos querían tener ese lugar de privilegio para así “monitorear” a Selena, sacarla de la influencia de su familia y atarla a sus esquemas de ambición. Y es más que interesante esa teoría de Castrellón no tanto porque sea una verdad revelada sino porque nos obliga a pensar, a ver más allá de lo que nos han dicho y nos han hecho creer en todo este tiempo ... A la hora de recordar a Selena, nadie es más que Selena … Ella es la única protagonista de su historia … Si queremos saber lo que le sucedió a Selena, si aún nos duele su ausencia, deberíamos sabernos escuchar más y separar la paja del trigo. Podemos estar más o menos de acuerdo con lo dicho o con lo escrito por alguien, podemos discutir y hasta pelearnos, pero debemos distinguir a las personas que quieren y respetan a Selena de verdad de las que no … Yo puedo rescatar muchas cosas de los que dicen muchos libros, pero a la hora de elegir, y aun con muchas discrepancias, no dudo en preferir el libro de Castrellón que el de Arrarás. Castrellón al menos respetó la memoria y el buen nombre y honor de Selena … Y eso no es un dato menor si se tiene en cuenta las cosas que algunos “prestigiosos” han dicho, escrito o especulado sobre Selena ... Y el libro de Chris Pérez es hoy en día el mejor homenaje que se le podía hacer a Selena … Recordarla a Selena por lo que era no sólo como artista sino como persona sin atarse a teorías preconcebidas, sin sentirse que debía quedar bien con tal o cual persona … A la hora de recordar a Selena hay que destacar a esas personas que intentaron recordarla con Amor, como ella misma quería, y no denostarlas por lo que se discrepa con ellas del mismo modo que se lo hacen con las personas que han manchado el buen nombre y honor de tamaña artista … Es hora de saber distinguir las buenas de las malas intenciones … Hay que saber poner las cosas en su lugar … Si realmente queremos a Selena, debemos destacar y felicitar a aquellos que aún contribuyen a su real legado, con la intención no sólo de referenciar lo que logró sino de lamentarse por lo que no pudo obtener … Sería una forma de responder a aquellas personas que nos dicen que mejor no nos preguntemos más por lo que pudo haber sido Selena y aceptemos la realidad con “resignación”… También sería bueno que la Familia Quintanilla comience a distinguir estas cosas. Antes era entendible que quisieran ellos mismos hablar en su nombre y no autorizar que otros lo hicieran sin su consentimiento. En su momento el padre de Selena decía que él esperaba, cuando alguien escribía algo sobre la vida de Selena, que al menos tuvieran la deferencia de hablar primero con ellos para que su palabra quedara reflejada. Yo entiendo que eso lo hicieran en su momento, cuando ellos tenían que defenderse de los que los atacaban y de los aprovechadores de turno que lucraban con las dudas del caso ... Creo que hoy tienen que tomar consciencia de que ha pasado el tiempo y de que ya muchos de los que han cuestionado a Selena y a ellos mismos han caído en el mayor de los descréditos. Toda la Familia debe tomar conciencia de que algún día ellos se irán de este mundo y que deberían asegurarse de que el recuerdo de Selena quede en buenas manos, de aquellos corazones de los que la quieren de verdad y de los que contribuyen cada día a su recuerdo… Es muy difícil olvidar, es muy difícil dar vuelta la página, es muy difícil no seguir preguntándose lo “que hubiese pasado si” o si tal vez en aquel nefasto 31 de marzo no hubiese sucedido lo que ocurrió o que no hubiese sucedido aunque sea algo de lo que pasó, y que con eso se hubiese alterado el orden de las cosas … Es muy difícil pues se trataba de Selena, una mujer encantadora que cambió la vida de tanta gente, incluso en su ausencia, como fue en mi caso … Hace poquito protagonicé un hecho muy lindo, de esos que sigue generando Selena … En mi trabajo en Buenos Aires, Argentina, me presentaron a una compañera de labores, que resultó ser de Centroamérica. Estábamos hablando de diversos temas hasta que ella me dijo que había algo que nos unía a pesar de nuestras diferentes culturas y vivencias. Yo la miré contrariado hasta que ella me señaló algo de mi escritorio. Miré y se trataba de una de mis fotos de Selena que tengo pegadas allí. Yo me quedé gratamente asombrado. Y ella, a pesar de su juventud, me decía que siempre había escuchado a Selena, que recién se dio cuenta de quién era esa encantadora mujer que la conocía a través de los discos y de escucharla por la radio cuando se enteró de su suerte, y me afirmaba que para ella como para todos Selena es su ideal, su parámetro, su cantante preferida. Yo le expliqué cómo había accedido a ella, cómo siendo de gustos musicales tan diferentes había quedado fascinado en cuanto la descubrí y cómo me había cambiado la vida … Me sentí muy feliz de compartir tan bello momento, fundamentalmente porque en mi país es como estar solo recordando a Selena, ya que aquí, sobre todo mediáticamente, no se la ha conocido como se debía, pero como ocurre con todo lo relacionado con Selena, su repercusión en la gente es mucho mayor de lo que todos suponen, y sigue generando ese Amor, esa pasión, ese encanto, ese sentimiento de orgullo de tener el corazón abierto a esa hermosa cantante y persona que no ocurre sin duda con ninguna otra artista y menos aun si esa artista está ausente … Es sentir eso y recordar la sorpresa que tenían aquellos cronistas de México y de Estados Unidos que fueron raudamente a cubrir el lamentable episodio del 31 de marzo y luego el funeral ... Todos, a pesar de que la mayoría conocía a Selena, la había entrevistado, y sabía de la popularidad y del cariño que le tenía la gente, no salían de su asombro al observar la cantidad enorme de gente que en Texas se movilizaba para despedirse de ese ser tan hermoso … Muchos de ellos no salían de su asombro y de su emoción. Muchos habían quedado shockeados y hasta se mimetizaron con el dolor de tantos jóvenes, adultos, niños y ancianos. Muchos de México no se imaginaban que Selena fuera tan popular en los Estados Unidos. Los de Estados Unidos no se imaginaban que Selena tenía tantos fans en todos los Estados y en otros países. A nadie de ellos se le ocurrió pensar que Selena no surgió el día en el que empezó a brillar en los medios y en el que comenzó a tener fans a través de su fama en el mundo ... A nadie se le ocurrió pensar que Selena venía luchando desde hacía 14 años yendo a dar conciertos de pueblo en pueblo a través de un bus, y que fue ganándose fans y adeptos con tantos años de trabajo, Amor y dedicación. Para muchos de los que la conocían desde muy pequeña Selena era su hermanita, su pariente que cantaba de pueblo en pueblo en busca de mejor suerte hasta que logró la fama y que los grandes medios la conocieran luego de tantos años, luego de tanto tiempo en el que tantas personas la comenzaron a apreciar y a querer … Éste fue el dato que muchos cronistas no tenían y por ello no salían de su asombro. Selena era más conocida de lo que ellos suponían. Selena había conquistado lugares en los que los medios en los que ellos trabajaban aún no habían llegado ni sabían que existían. Todo eso fue el fruto del talento, del Amor y de la dedicación de Selena. Selena estaba cosechando todo lo que sembró por años … Y eso no terminó con su partida de este mundo ... El Amor de Selena siguió sembrando en lugares en los que ni Selena imaginó que iba a conquistar y que aún hoy se siguen viendo sus resultados asombrosos … Hoy se sigue hablando de Selena como en sus mejores tiempos y en lugares muy lejanos ... Hoy se sigue hablando de Selena como si nunca se hubiese ido ... Hoy se sigue llorando a Selena porque no se puede entender que ese ser tan encantador se nos haya ido como agua entre las manos… Tal vez por eso mismo, porque no es bueno que nos olvidemos de Selena, porque no es bueno dejarla sola nunca por todo lo que vivió y padeció, porque sí es bueno recordar todo lo que nos dejó grabado en nuestras Almas y en nuestros corazones, tal vez por eso debamos seguir haciéndonos esas preguntas, debamos seguir preguntándonos qué hubiese sucedido si todo hubiese sido distinto, qué sería de Selena hoy, que sería de este mundo con Selena entre nosotros. Porque en la medida en que nos permitamos soñar, nos permitamos decir y pensar que todo podría ser distinto, imaginarnos hasta dónde podría haber llegado Selena con su propia voluntad, Amor y talento, podremos revertir la historia y hacer de éste un mundo mejor. Como siempre he dicho, no hay peor cosa que la resignación. A Selena no le gustaban las injusticias, las mentiras, los engaños, la prepotencia, la desilusión. Tal vez haya sido víctima de todo ello, pero seguro que si Selena estuviera entre nosotros algo habría hecho al respecto y su accionar se hubiese tomado como un camino a seguir. En su libro Chris recordaba que en una oportunidad se presentó una mujer ante Selena con tan mala manera que le tiró un papel sobre la mesa en la que ella estaba almorzando con su familia y a la exigencia de “fírmala” la conminaba a que se lo autografiara en ese mismo momento. Selena, sin perder la calma, le dijo cortésmente que esperara a que terminara de comer para acceder a su pedido. También recuerda Chris en su libro que por ello tuvo una discusión con su padre, que le pedía que aun en esos casos debía complacer de inmediato a la admiradora … Creo que en estos momentos hay que seguir aquel ejemplo de Selena. Sin perder la cortesía, sin perder el cariño ni la admiración por Selena, hay que ponerse firmes e imponerse frente a todos aquellos que con la misma malicia y oscurantismos que la asesina pretenden imponer el odio, el temor, la connivencia y la complacencia como únicas maneras de seguir viviendo. Hay que volver a esas viejos y utópicos tiempos en los que se podía enfrentar un arma con una flor e imponerse con el corazón, pero sin caer en la ingenuidad … Del mismo modo que hizo Selena con esa maleducada persona … No tendremos a Selena, pero tenemos su Amor y su corazón, y también su voluntad y tenacidad. Si nuestro recuerdo y homenaje a Selena no sólo lo dejamos en las palabras sino que lo pasamos a los hechos, entonces un mundo será posible, un mundo que Selena soñó, una vida que Selena anheló. Si lo logramos tal vez podamos dejar de hacernos esas preguntas y Selena podrá sonreír donde quiera que esté. Porque esa vida y ese mundo que tanto soñó Selena serán realidad y allí estará Selena tan viva como siempre, tan cerca de nosotros, viva, siempre viva en nuestras Almas y en nuestros corazones… Creo que la mejor forma de recordar a Selena es seguir su ejemplo, luchar por sus ideales hasta las últimas consecuencias y siempre esbozar una sonrisa ante tanta mala onda reinante. Pero no una sonrisa ingenua, tonta y vacía de contenido … Una sonrisa de alegría, una sonrisa que reflejen las ganas de vivir, una sonrisa contagiosa que enfrente al odio, al resentimiento, a la resignación … Una sonrisa, una carcajada eléctrica, nerviosa, una risa que se oiga y que contagie … Una sonrisa que cambie este mundo. Una sonrisa, una risa, una carcajada de las que profería constantemente Selena … Si llegamos a lograr eso, sé que Selena volverá, porque el mundo habrá cambiado, un mundo será realidad con el Alma, con el Amor, con el espíritu y con la voluntad que sólo ella podía dar y que ahora lo podrá seguir todo el mundo … Si logramos tan noble objetivo, no habrá más preguntas y Selena jamás se sentirá sola … Jamás… Y hasta el día que me muera, haya o no más preguntas, tú vas a ser mi Amor, Selena… Te quiere por siempre y para siempre… Sergio Ernesto Rodríguez (Buenos Aires, Argentina)

Aquellas grabaciones que me dejaste, Selena…



Cuando escuché a mi hija en esas grabaciones me puse a llorar. Lloré por mucho tiempo, lloré como pocas veces, lloré del modo en el que no me lo permitiría hacer en público, lloré porque no podía abrazar a Selena … Es muy difícil describir la pérdida de alguien a quien uno quiere, mucho menos si éste es joven y es el hijo … Es muy difícil comprender que alguien a quien uno quiere tanto, a quien ayer nomás reía contigo, hablaba contigo, reflexionaba contigo, ahora está reducido a una cinta, a unas grabaciones que muestran apenas un atisbo de lo que estaba haciendo, de lo que iba a hacer, de todo lo que iba a lograr, de lo que era como persona ... Lo que más me apena es que hayan quedado como últimos registros aquellas canciones que daban cuenta del potencial de mi hija, de lo que estaba haciendo, en la artista que se estaba convirtiendo. Las canciones que dejó y que las escucho una y otra vez son tristes, melancólicas, como si fueran un aviso, un alarma, como si Selena estuviera diciéndonos algo, como si se despidiera … Sé que no es así. En todos estos casos la gente piensa lo mismo y cree en esos mensajes, en esos avisos premonitorios … Y a pesar de que no creo en eso, entiendo que uno se aferre a esos mecanismos. Es que cuando las cosas escapan a nuestro entendimiento, cuando alguien tan joven se nos escapa como agua entre los dedos, sólo podemos seguir viviendo creyendo en esos pensamientos mágicos … Escuché miles de veces aquel día las canciones “Dreaming of you” y “I could fall in love”, y sentí pena, tristeza, bronca, frustración. Lo que más me apenaba era que la gente sólo se quedaría con la imagen de Selena como cantante hispana, como la “Reina del Tex Mex”, como la “Reina de la Cumbia”, como el ejemplo de los artistas latinos que vinieron a conquistar América … Y no es que yo reniegue de ello … Valoro y me da gusto que la gente la haya puesto en ese pedestal … Lo que sucede es que Selena era mucho más que ello y lo estaba comenzando a demostrar … Yo siempre soñé con que lo iba a lograr, con que iba a conquistar el mundo … Lo supe el día en el que la vi cantar por primera vez siendo tan pequeña … Uno cree que tiene que pasar mucho tiempo para ver lo que serán sus hijos, lo que harán y si lo lograrán lo que se proponen … Uno cree que la personalidad recién toma forma cuando ya somos grandes, cuando ingresamos a la primera juventud … Nada más errado … Vi a Selena ese día con un libro de canciones que resultaba ser mío, y comenzar a sorprenderme con su voz, con su entusiasmo y con su carisma para darme cuenta de que ella estaba dispuesta a todo para lograr lo que ella se proponía … Y Selena era una niña que quería ser feliz y hacer feliz a los demás ... Tal vez ello lo reparé en toda su dimensión después. En aquel momento sólo pensé en que mi hija iba a ser irremediablemente una artista internacional de envergadura y que mi misión era facilitarle ese camino .... No voy a mentirle a nadie. Para mí esto significaba el regreso al mundo de la música, que paradógicamente dejé cuando empezaron a venir los hijos … Al principio, acepté la realidad por mi familia pero no me había resignado nunca a la idea de seguir siendo músico. Por más eficiente que fuera, no me gustaba para nada hacer tareas rutinarias en un ambiente de oficina. Siempre soñaba con que algún día saldría de la petrolera en la que trabajaba y que volvería con Los Dinos … Nunca me imaginé que lo lograría de la mano de mi hija …Tal vez en aquella época tampoco reparaba en algo que comprobaría con todas las letras después … Selena era más terca que yo y no pararía en lograr todo lo que pasaba por su mente … como pasó aquel día … Selena quería seguir siendo el centro de la casa al pensar que sería desplazada por A.B. y su bajo al que yo le estaba enseñando a tocar y lo logró … ¡¡Vaya si lo logró!! Pero ella jamás pensó que esa decisión cambiaría radicalmente nuestro modo de mi vida. Y a pesar de que a Selena mi decisión de armar una banda en función de ella le parecía una locura, aceptó el reto y siguió para adelante … Nunca pensó que ese cambio de vida alteraría su visión de las cosas y lo que quería para ella en el futuro. Sólo se adaptó a los cambios para hacer factible la concreción de sus sueños…

Sé que he sido duro y persistente. Sé que para muchos soy un ogro y que he sido despiadado. Pero esa imagen dista mucho de ser la real. El ser humano es prejuicioso, y muchas veces cree lo que quiere ver y opina de acuerdo con sus intereses. A veces el ser humano no se deja llevar por la verdad, por lo que le dictan sus corazones y sus almas. Nadie me vio llorar como aquel día que volví a escuchar a Selena cuando ya no la tenía conmigo. Apenas si vieron que se me escapaban unas lágrimas por debajo de mis anteojos en algún programa de televisión … Y sé que muchos deben haber pensado que actuaba. Me dolía que no me creyeran pero no me podía permitir detenerme por ello. Cuando tuve que despedirme de mi hija asumí que debía sostener el ánimo de todos … Me sentía responsable. Más de una vez me dije: “¿Por qué los metí en esto? ¿Por qué no me quedé con mi trabajo en la petrolera, y que mis hijos fueran como todos y llegaran a la universidad, así Selena llegaría a ser una diseñadora que sólo se haría conocer por sus creaciones?”. Pero yo no me podía permitir sentirme culpable. Haya actuado bien o mal, yo quería lo mejor para mi familia y para Selena … La culpable era esa pérfida que no tardó en difamarnos en cuanto supo que no pudo salir enteramente con la suya, que era no sólo quitarme a Selena sino salir del juicio declarada inocente para enrostrarnos su “triunfo” en la cara … Siempre me costó creer que esa persona nos podía hacer semejante cosa. Sé que es muy difícil de comprender y sólo espero que el paso del tiempo haya hecho que la mayoría de la gente me entienda ... Comprendo que la gente no pueda entender que si yo la denuncié en su momento, no haya tomado todos los recaudos para evitar un mal mayor. Entiendo que la gente se pregunte cómo no imaginé que podía lastimarnos luego de que la acusara y de que diera órdenes de tenerla lejos de nuestra compañía. Comprendo que la gente se pregunte por qué siguió trabajando para nosotros a pesar de todos estas alarmas que nos daban cuenta de que las cosas no iban para nada bien … Yo los comprendo … Pero también espero que ellos me entiendan a mí … Esa persona fue una empleada de confianza de muchos años ... Hasta para Selena y para tantos otros era una amiga y formaba parte del círculo íntimo de la familia y de la banda al que pocos accedían … Yo la tomé para que fundara un club de fans que a nadie se la había ocurrido crear porque tenía buenas ideas, y porque hacía lo que nosotros le pedíamos con total amabilidad y dedicación ... Todos la vimos hacer su tarea correctamente al punto de dejarla que maneje los negocios de “Selena Etc.”. Ella cubrió agujeros que nosotros ya no podíamos cubrir a medida que aumentaba nuestra fama y nuestras obligaciones ... Cuando empezaron los problemas yo traté de que estuviera lejos, pero pensé que no era necesario llegar a extremos. Opté por evitar algún escándalo que dañara la imagen de Selena porque me daba cuenta de que esa mujer podía decir y hacer cualquier cosa si se la tenía en la vereda de enfrente … Pero jamás imaginé que llegaría tan lejos … No se trata de ingenuidad o de exceso de confianza … Simplemente no se nos pasó por la mente que pudiera urgir un plan tan macabro … No trato de deslindar responsabilidades … ¡¡Claro que me equivoqué!! Supuse que lo tenía todo controlado, supuse que ella no se atrevería siquiera a contestarme, supuse que estando yo en mi lugar de manager y de director de mi compañía nada podía suceder … Y sucedió lo inimaginable para todos … Aunque no me crean, hasta que pasó lo que pasó, ni a mí, ni a Selena ni a toda mi familia se le ocurrió pensar en que alguien de nuestro entorno podía ser tan mala persona y podría cometer semejante acto atroz ... No estaba en nuestras mentes la maldad, la mentira, la falsedad, la hipocresía ... Nosotros, bien o mal, siempre fuimos con la frente bien alta por la vida, nos propusimos lograr el mayor de los objetivos con el talento de Selena, con la verdad, con honestidad, con sacrificio, cumpliendo con nuestro deber … Sorteamos obstáculos en nuestras vidas que eran casi imposibles de superar con trabajo, y con fe en nuestro Señor y en nosotros mismos … Tuvimos que enfrentar miles de problemas y a personas difíciles de abordar … Después de vivir épocas tan duras, de haber superado vallas tan altas y estando en ese momento en pleno éxito y con el camino de la fama allanado, ¿cómo imaginar que esa persona de apariencia tan frágil y tan servicial nos haría semejante afrenta? Nunca imaginamos que lastimaría a Selena. Nunca se nos ocurrió pensar que podía hacernos semejante daño, que se le ocurriera dañarme de la peor forma que era sacándome a mi hija antes que matarme a mí … Supo dónde podía pegarme del peor modo … Pero en aquel momento yo no podía pensar que era capaz de hacernos eso … Con el tiempo di cuenta de lo que es ser un psicópata, y que esa clase de personas puede estar más cerca de lo que se piensa y mostrar más de una cara, o en realidad, una sola, que es la de una persona buena, amable, simpática, siempre dispuesta, siempre servicial, y ser lo contrario, totalmente contrario a esa imagen y mostrarlo en el momento menos pensado, con un acto en el que para uno sea tarde, muy tarde, reaccionar e impedirlo ... Debí reparar cuando ella hablaba mal de tal o cual persona, y con su aire de víctima nos señalaba que alguien le quería hacer un mal … Debimos haber reparado más en los problemas que se generaban con ella en “Selena Etc.”. Debimos atender a esas personas que nos señalaban los problemas que generaba con su presencia y el malestar que había entre los empleados con sus absurdas indicaciones … Debí reparar más en esos llamados desesperados a Selena para que fuera a su encuentro haciéndose la víctima … Es curioso .... Semanas antes de lo ocurrido yo la acusaba a esa mujer por lo que nos hacía y quería echarla. Tan sólo unos días después la dejaba en nuestra organización y expuse a mi hija ante un monstruo. No me di cuenta de que la estaba dejando sola. Nunca pensé que la gente podía ser tan mala con nosotros. Si ni siquiera recibíamos maltrato entre la gente, sino todo lo contrario, sólo recibíamos afecto y cariño, ¿cómo imaginar este final? Siempre me sentí culpable por ello. Más de una vez desee que esa bala fuera para mí y no para Selena. Más de una vez lloré por no darme cuenta de todo antes. Más de una vez le imploré a nuestro Señor para volver el tiempo atrás con el solo fin de darle una nueva oportunidad de vivir a Selena. Más de una vez le ofrecí mi vida a cambio de la suya ... Sabía que no correspondía, ni cumpliría mis sueños, pero le quería explicar al Señor que sólo entendiera mi angustia, que sólo apreciara mi desesperación … Nunca me perdoné dejarla sola a mi hija con esa pérfida … Pero sabía que no podía quedarme en mi casa llorando con mi familia, que no podía darles el gusto a todos los que nos habían hecho tanto daño … Tuve que sacar la mayor de las fuerzas para seguir adelante con lo que me quedaba hacer el resto de mi vida … Dedicarme al recuerdo de Selena, de rescatar su figura y exaltar lo logrado. Yo sabía que Selena tenía todo por hacer y que su verdadera carrera, la que ella había logrado después de tantos años de esfuerzo, recién comenzaba, recién empezaba a dar sus frutos. Yo lo sabía. Todos lo sabíamos. Selena era un ser lleno de vida y con todo por hacer … Yo lo sabía … Pero no podía darme el lujo de mostrar esa debilidad ... No era el momento ... Sabía que aun con todo el dolor de la pérdida de mi hija lo peor no había pasado … Vendrían las épocas de las investigaciones periodísticas, del pedido de explicaciones de la gente cuando el llanto apaciguara, de las polémicas, del juicio a la pérfida y de lo que se develaría tras él. Se venía una dura tarea y no había tiempo que perder. Lo supe ese 3 de abril, cuando tuve que despedirme de mi hija … Recuerdo que me acerqué a mi esposa, la acaricié y le daba palabras de aliento … Yo no estaba en condiciones de consolar a nadie. Estaba peor que ella. Pero tenía que hacerlo. Medí mis fuerzas para emprender esa dura tarea, que era hacer frente a todo, de decir nuestra verdad, de construir la imagen de Selena como el “mito”, la “leyenda”. No era lo que yo quería hacer. No estaba en mis planes ... Menos en Selena ... Ella era tan joven … Pero la realidad me puso en esa situación. El Señor nos pone a pruebas que uno ni imagina y uno sólo tiene que superarlas. Así había sido nuestro paciente camino al éxito. Ir en pos del objetivo sorteando todos los obstáculos, superando cada dificultad con una sonrisa y con tenacidad. Era cierto que para nosotros nada era imposible, que todo se podía lograr … Nunca imaginé que a Selena se le negaran todos sus sueños, todos sus objetivos, todo lo que se le pasaba por la cabeza cada día, cada noche … Podía derrumbarme luego de ese día nefasto, podía dejarme morir … Pero no … Tenía que hacer algo más difícil que en su momento lograr que Selena triunfara. Tenía que abocarme a su recuerdo como podía, de lo mejor forma que pudiera, con Amor, como ella quería, sin imposibles, como ella solía decir…

Luego de reponerme del dolor de escuchar a mi hija en una cinta sin poder verla, sin poder escuchar su pegadiza risa, sin poder abrazarla, sabiendo y dándome cuenta de que Selena pasaba a formar parte de “lo que pudo haber sido” si la hubiesen dejado, tomé la decisión de sacar el disco de todos modos. No era lo que quería realizar pero lo tenía que hacer ... Un disco póstumo … El disco por el que se luchó tanto convertido en un disco inconcluso. No era ni lo ideal ni nada que se le parezca. Sabía que dirían que queríamos lucrar con mi hija. No me importaba. Importaba mi conciencia y lo que opinaban mis afectos más  cercanos, y ellos sabían que si yo lucrara con mi hija hubiese puesto a la venta cosas que hasta los fans ignoran que teníamos y que nunca saldrán a la luz porque forman parte de nuestros recuerdos familiares más íntimos … Aún hoy fans de todo el planeta me viven pidiendo explicaciones porque no se sacó a la venta tal cd o tal dvd de tal concierto … ¿Quién los entiende? Me acusan de lucrar pero quieren que ponga a la venta todo … Igual los comprendo … Sólo espero que ellos me entiendan a pesar de que no coincidan del todo conmigo. El paso del tiempo me ha hecho reflexionar y a no prestarme a los juegos que me ponen mal. Antes entraba en cuanta pelea me ofrecían. Ahora no. Tal vez no entre ya porque me estoy poniendo viejo … Tal vez no entro porque en algún punto creo que la gente sabe que nosotros hemos dicho la verdad mientras los demás … Ya sabemos lo que han hecho y dicho los demás … Yo sé que no les dije … Ya prometí que en breve les daré a todos más detalles de las cosas que pasaron en aquel nefasto día. Me dirán por qué no las dije antes, por qué callé, por qué mentí … Mentir … ¡¡Eso sí que no lo hice!! … Hay cosas que es mejor no revelarlas, hay cosas que es mejor callar si es que uno quiere que ante tanta tragedia se mantenga la imagen de su hija tal cual era antes de toda esta locura. Nosotros sólo nos destacábamos por nuestra música. Selena era admirada por su voz y amada por lo que era como persona … Selena era, por sobre todas las cosas, una linda persona … De pronto todo cambió y pasamos a estar en la sección Policiales. Y por más que uno sea la víctima, por más que el afecto se mantenga y más aun aumente por la tragedia, uno queda expuesto a las habladurías, a las sospechas, al “qué dirán” … Fue vivir el temblor de la tierra por el efecto de un terremoto, y ver cómo se destruyen tu casa, tu familia, tu ciudad … Y en un instante, en ese instante en el que uno se recompone del cimbronazo, se abren bien los ojos ante la certeza interna de que en pocos segundos vendrán las réplicas y todo será peor, mucho peor … Lo sentí apenas di la noticia a los medios de lo que había sucedido con mi hija … Yo daba el anuncio entre lágrimas y desconcierto hasta que en el medio de mi relato, y al ver los cientos de periodistas y de policías que me rodeaban, me di cuenta de que se indagaría sobre Selena, sobre nuestras vidas, sobre la familia ... Allí desperté y supe que debía despojarme como pudiera del dolor y dar mi versión de los hechos. No debía dejar hablar a nadie primero. Si los dejaba yo no quedaba en la mejor posición. Iba a tener que explicar aquello que se diría de Selena, de mí, de mi familia. Iba a tener que responder a las calumnias, iba a tener que contestar a las injurias … No tenía tiempo que perder. No podía sucumbir en el dolor ni aun escuchando a mi hija en una cinta, aun cuando me quedaran un par de canciones que en otro momento quizá me las hubiese guardado para mí y para mi familia … Pero ése no era el momento. Yo tenía que mostrarle al mundo lo que Selena estaba haciendo, los planes que teníamos con ella, en la artista que se estaba convirtiendo sin que nadie nos regalara nada, llegando a la cima por mérito propio y empezando bien, bien de abajo … Por eso, y con todo el dolor, empecé a trabajar con la Emi en la salida del disco “Dreaming of you”. Fue difícil la elección de los temas y el terminar lo que estaba inconcluso. Costaba entender que tuviéramos que seguir sin Selena, que tuviéramos que terminar de armar un disco que distaba de ser lo que en principio habíamos imaginado y planeado … con ella como única protagonista …. Alguno me había propuesto completar el disco con temas en inglés grabados por Selena en vivo. A muchos productores no les parecía buena la propuesta, pues esa idea, que podía ser excelente al principio, en ese momento no lo era. Seguíamos viviendo las réplicas del terremoto … Nadie había reparado en lo latino en Estados Unidos, y quien lo hacía lo subestimaba. Y aun cuando muchos en el país conocían a Selena, el latino no era considerado tan en serio como lo es ahora … Y si ese ahora existe, si lo latino es tan reconocido en este momento, fue gracias, entre otras cosas, a Selena … Las ironías de la vida hicieron que con la partida de mi hija todos supieran del poder hispano … Lo que en un principio fue una decisión de la revista “People” de hacer una edición especial con fotos y recuerdos de Selena, terminó provocando la salida de “People en Español”, producto del agotamiento de dos ediciones enteras de la revista y de que todos se dieran cuenta de que el latino existía en mi país … Hoy hasta se dan los “Latin Grammys” … En aquella época el hispano sólo existía en un rubro al mejor disco latino en Los Grammys … y Selena aun con toda esa dificultad lo ganó igual … A mí me parecía que el disco debía salir enteramente en inglés pero mi obsesión por la perfección del sonido hicieron que desistiera mezclar temas en vivo con temas en estudio … Además, estaba la explosión de lo latino y de Selena … Salían a la calle miles y miles de jóvenes mujeres y niñas que querían ser como Selena … Chicas latinas, que sólo hablaban en inglés, que querían seguir el camino de mi hija Chicas que se sentían identificadas con Selena porque eran como mi hija … Ésa era la realidad que no imaginábamos vivir, cuando aún soñábamos con Selena triunfando y cantando en inglés ... Emi y yo concordamos en que tomaríamos los éxitos últimos de Selena y haríamos nuevas versiones con ritmos más compatibles con los temas que había llegado a grabar Selena en inglés. Sabíamos que hasta podíamos hacer una nueva versión mitad en inglés, mitad en español del tema “Donde quiera que estés” con los Barrio Boyz, que lo haría complementario con el tema “God's child (baila conmigo)”, que Selena había grabado con David Byrne, de los Talking Heads … Y así lo encaramos y así lo terminamos … Fue duro y fue difícil. Duro escuchar a Selena y no verla. Inentendible tener que completar un tema y hacer una nueva versión siendo nosotros los ingenieros, los creadores, jugando con la voz de Selena como si fuera un juguete extraño, algo lejano, distante … Como si Selena fuera sólo una voz, una simple cantante a la que nosotros … sí, nosotros, podíamos sacar la mejor versión … Recuerdo cuando Keith Thomas, productor del disco en inglés que Selena estaba haciendo, se me acercó y me dijo: “Aún no lo comprendo. Dos semanas antes vi a Selena decirnos ‘Hasta luego’ …  y ahora ya no está … Era tan simpática, tan talentosa, tan buena persona … Llenaba de vida este estudio cuando aparecía … Iba a ser una gran artista” ... Keith me abrazó y yo sólo le palmeaba la espalda como si el damnificado fuera él y no yo … Pero yo tenía que ser fuerte … Yo debía ser fuerte … Terminamos el disco y venía una etapa muy dura para mí … Tener que ir a los grandes medios para explicar lo que habíamos hecho y por qué … Ya solíamos ir a algunos programas amigos para dar nuestra versión de los hechos … Era difícil. No podía convocar a todos ... A veces llevaba a A.B. A veces a Suzette. A veces a Chris ... Tenía que decidir quién me acompañaría tal o cual día en función de quién estaba menos mal en ese instante. Yo muchas veces ni me podía levantar, pero yo era la cara visible en ese momento, la persona que estaba encomendada a llevar adelante el recuerdo de su hija contra viento y marea … Sólo no obligaba a mi esposa a que me acompañaba. Ella nunca lo pudo superar como todos nosotros y no toleraba exponer su dolor. La demostración pública de ese sentimiento ya era demasiado para ella y por eso la preservé de todo ese daño. Sólo le pedí con el tiempo que se presentara al programa de Cristina cuando ella nos fue a ver a Corpus Christi al cumplirse un año de la partida de Selena y en alguna ocasión especial como en los recuerdos que año tras año nos ha hecho la revista “People en Español” … Antes que eso no … En lo que a mí concierne, cada día veía imágenes de Selena, veía videos caseros suyos en casa, miraba sus conciertos, escuchaba sus discos … Y contrariamente a lo que se podría pensar, eso me daba fuerzas, fuerzas para seguir, fuerzas para levantarme y hacer algo por ella. No es que no he llorado, no es que no me preguntara una y otra vez por qué, por qué y por qué .... Pero el ver a Selena tan llena de vida y cómo había llegado a ese lugar privilegiado por su exclusivo mérito, más allá del esfuerzo de todos y del trabajo en equipo, me hacía incorporar y luchar para que su imagen no se borrara nunca y para decirle al mundo entero que Selena lo había logrado, que a pesar de todo mi hija había cumplido sus sueños … Sabía que Selena recién empezaba a jugar las grandes ligas, pero no podía rendirme ante lo que decía la asesina en ese momento a través de su familia y de algunos periodistas, y de las habladurías de tantas malas personas. E hice todo lo que tenía a mi alcance, aun cuando muchas de las cosas que tuve que hacer no las hubiese hecho jamás…

A veces cuando miro hacia atrás y veo lo que hice entre 1995 y 1997 me cuesta comprender que lo haya hecho … Pero así fueron las cosas ... Mientras íbamos a los programas de televisión para difundir “Dreaming of you” y ante la cercanía de la fecha del juicio a la asesina surgió la propuesta de hacer la película sobre Selena. Yo no dudé en aceptar aunque propuse como condición de que se hiciera un casting público para elegir a la persona que interpretaría a mi hija. Cuando recuerdo que pasamos de sacar el disco de Selena a asistir al juicio y sentencia a esa pérfida, y a estar en los castings viendo a miles y miles de muchachas vestidas como mi hija pienso en la locura en la que estábamos metidos, pero esa locura es la que me permitió seguir. Difícilmente alguien hubiese sobrevivido con el dolor sin hacer nada en casa y menos si quedábamos expuestos e indefensos ante ataques tan despiadados de tanta gente. Sí, tuve que “hacer de malo”, pelearme miles de veces con muchas personas, pero lo tenía que hacer … Ya para cuando estaba por iniciarse el juicio a la asesina, Cristina Saralegui me pidió por favor que asistiera a su programa. Yo no quería ir pues me molestaba que hubiera gente que se sintiera con derecho a opinar sobre lo que había pasado, aunque lo que dijeran fuera a favor de  mi hija. En aquella oportunidad estaba más que molesto con que estuvieran presentes unas chicas que habían sacado un libro sobre Selena. No me molestaba su contenido pues sabía que no era ofensivo, pero no toleraba que alguien sacara un libro sin nuestra autorización. Sé que sonaba duro, pero tenía más que buenos motivos para actuar así. Yo quería que antes de que hablaran de mi hija tuvieran la deferencia de preguntarnos por ella a nosotros en primer lugar … Yo tenía que estar dando la cara por mi hija a la que le habían quitado todos sus sueños de la peor manera, tenía que soportar que cualquiera hablara de mi hija como si la conocieran de toda la vida y sabía que en Houston estaba una periodista que estaba cubriendo el juicio como cronista en la cadena Univisión mientras secretamente estaba haciendo tratativas con la asesina para que le diera una entrevista exclusiva luego del juicio. Pero no lo podía decir pues no tenía pruebas y yo tenía que mirar con impotencia cómo salía a dar su informe “objetivo” sobre la marcha de las preliminares del juicio en el programa de Cristina. Estaba tan molesto que ni siquiera avalé las palabras que Martín Gómez profiriera en favor de Selena y en contra de la asesina. Tampoco quise saludar a José Behar ni quise quedarme en dúplex hasta el final de la emisión del programa de Cristina. Yo sé que fui muy duro pero debía serlo. En ese momento estaba viviendo aquello que más temía, que era la exposición a lo peor de la condición humana, la exposición a la mentira y a la falsedad, la exposición a algo que nunca imaginé que iba a vivir. Estaba en Houston y veía abogados, jueces, periodistas, miles y miles de personas gritando, cantando y llorando, y recordé que apenas unos 6 meses atrás Selena daba un concierto maravilloso en la misma ciudad y que pocos olvidarían … Era el comienzo de una nueva era en la carrera de Selena … Yo estaba seguro de que ese concierto marcaba un antes y un después en la vida artística de mi hija y que por ello sería recordado cuando Selena se hiciera famosa en todo el mundo … Pero en las preliminares del juicio a la pérfida supe que ese concierto sería recordado por ser el último propio y en grande que hiciera Selena más allá de los festivales y de los conciertos multitudinarios compartidos con otros artistas … Ahora veía a Houston tan lejos del Amor de Selena y tan cerca de tanta miseria humana que quería aprovechar la desdicha de mi hija para tener su “minuto de fama” … Yo estaba indignado y no podía disimularlo … Pero yo tenía que seguir, seguir a pesar de todo, seguir por el buen nombre y honor de Selena y de toda la familia Quintanilla…

Cuando terminó el juicio nos retiramos en silencio. No teníamos mucho que decir ... Comprendíamos la euforia de los fans que al menos querían ver que se había hecho justicia con Selena ... Pero para nosotros nada de lo que se decidiera allí nos devolvería a nuestra hija … La condena a la asesina era lo menos que podía pasar … Pero yo sabía que aún lo peor no había pasado. Sabía que la asesina saldría a descalificar pronto a nuestra familia y sobre todo a mí. Por eso empecé a colaborar asiduamente en la confección de la película. Era el productor general y tenía que moverme mucho. Incluso convencí a toda mi familia para que participara directamente en los castings para designar a la protagonista. Sigo mirando atrás y sigo convenciéndome de que era una locura lo que estábamos haciendo. Cuando veo fotos o imágenes en las que nosotros estábamos junto a chicas que en algunos casos eran literalmente iguales a mi hija se me eriza la piel. Cuando veo a mi esposa siendo saludada con alguno de esos clones, cuando veo a Chris tocando la guitarra mientras participaba del evento, cuando yo mismo estoy observando a todas esas mujeres para elegir quién sería la elegida, tengo que recordar bien el contexto en el que nos situábamos para comprender esas imágenes que por sí solas sólo generan incredulidad y pavor … Y aun así tuve que ceder en muchas cosas para que la película fuera posible. Yo tenía a la que para mí debía ser la protagonista, que era una joven que más que ser igual a mi hija tenía un aurea que representaba muy bien lo que ella era … Pero el estudio pensó que a la hora de elegir era mejor optar por alguien que al menos fuera conocida, por poco que fuera. Y por eso consideraron que la ideal sería Jennifer López, que tenía la ventaja, además, de ser cantante y actriz. Entendí la posición, pero les pedí que al menos respetaran la voz de Selena cuando fueran a interpretar sus canciones … Y una decisión puede ser determinante para la vida de las personas. Mientras la chica que yo había elegido tuvo un final totalmente desgraciado, como si su destino fuera el de vivir en carme propia el mismo final que Selena, Jennifer López comenzó una carrera de éxito mundial con un recorrido que seguramente hubiese hecho Selena … Y pensar que por esa época en Estados Unidos Selena era más conocida que JLo … Pero supe que ella iba a triunfar en cuanto la vi sonreír frente a nosotros … Fue curioso … Al verla tan bien predispuesta con nosotros riéndose con esa risa tan particular, sentí como si mágicamente hubiese recibido de Selena su sonrisa, como si al interpretarla Selena le hubiese regalado su risa para que JLo la represente al menos en algo de lo que ella dejó … Y es como si Jennifer López lo supiera en todo momento y viajara por el mundo para recorrer ese camino al éxito para cumplir aquel sueño que Selena no pudo concretar  … Supongo que por eso no quería que la película tuviera mención a lo sucedido, que sólo se dedicara a hablar y mostrar lo que hizo Selena y del legado que dejó. Pero un día pidió hablar conmigo el director de la película, Gregory Nava, que a su vez era el guionista, y me dijo que no podía obviar ese hecho, que yo debía decirle al mundo lo que sucedió con mi hija, que aunque no dijera todo, debía dejar un mensaje a los que asistieran a ver la película, la conocieran o no a Selena … Terminé comprendiendo la situación y lo acepté, pero poniendo otra condición … Que no se dieran detalles, que con una sucesión de imágenes mostraran la mayor expresión de dolor … de final, de un final que marcara que en un minuto, sólo en un minuto una perversa te puede quitar el trabajo honesto de tantos y tantos años, que sólo en un minuto alguien aduciendo ser víctima se convierta en el peor de los victimarios, que sólo en un minuto puedes pasar de la mayor de las felicidades a creer que ya no tiene más sentido vivir … Tan sólo en un minuto…

Tal vez sea cierto lo que dijo un periodista mexicano luego de ver la película “Selena” … Él decía que después de mirarla ya no se la podía ver a Selena como el mito, como la leyenda … Él pensaba que en la película se la veía como una chica más, con sus miedos, con sus sueños, con su alegría, con sus enojos … Él pensaba acaso que luego de ver la película ya no sería lo mismo ver a Selena, pues ya  no era aquella artista que se la veía desde lo alto, con gran magnificencia, como se ve a una gran estatua, como se ve a esos enormes, impresionantes, pero fríos edificios … Tal vez no se haya dado cuenta, pero aquel periodista, sin decirlo y tal vez sin saberlo, daba cuenta de que había que empezar a aceptar la partida de Selena, que comenzaba un largo camino que no terminaría nunca en el que debíamos transitarlo sin Selena … Una vida sin Selena, un mundo sin Selena ... Eso era lo que tal vez todos comenzábamos a sentir sin darnos cuenta, al menos conscientemente. Habían pasado muchas cosas que habían ocupado nuestras vidas y que nos permitían vivir en la ficción de que Selena aún estaba entre nosotros … El disco, el juicio, la película … ¿Y después que quedaba? … Vivir, seguir viviendo pero sin Selena … El vértigo había pasado. Las aguas se calmaban … El  mundo seguía andando, insólitamente andando sin Selena … Empezamos a entender que había una vida, una vida sin mi hija. Seguimos como pudimos, aun cuando jamás pudimos aceptar seguir sin ella. Tanto A.B. como Chris tardaron cuatro años para hacer un proyecto nuevo. Suzette se alejó de la música, y yo seguí produciendo para otras bandas y con el recuerdo de mi hija … Hice todo lo que pude, como bien lo dice Chris en su canción de recuerdo a Selena, tuve que admitir que la asesina no era sólo una empelada de nosotros sino una mujer de confianza que sabía, sabía demasiado de nosotros … Fue muy difícil seguir ese camino, fue costoso poder transitar ese momento de nuestras vidas. A mi alrededor podía ver cómo ese despertar de nuestro letargo nos hizo pasar del dolor al enojo, de la tristeza a la indignación. Vi cómo pasaban épocas en las que nos distanciábamos y enojábamos entre nosotros ... Varias veces tuve que aceptar que A.B. estuviera molesto conmigo y me reprochara muchas cosas. Yo lo entendí y dejé que lo expresara. Tarde o temprano lo entendería y me agradecería que haya actuado de ese modo. A A.B. le costó horrores aceptar la partida de su hermana. Creo que aún no lo acepta pero sabe que hay que convivir con ese dolor, como nos pasa a todos, y si lo entiendo es porque yo tampoco lo he aceptado. Apenas si lo puedo entender … Resultará curioso pero recién en aquel homenaje que se le hiciera a Selena por los 10 años de su partida en Houston sentí con dolor pero con entereza que mi hija se había ido definitivamente y que jamás volvería … Lo sentí porque ya podía mirar esas imágenes y sostener la mirada sin llorar, mirar a Selena y ponerme contento por lo que era como artista y como persona … Recuerdo mirar seriamente esa pantalla gigante mascando un chicle y poder soportar ese dolor … Empezaba a notar el paso del tiempo … “Diez años -pensaba-. Han pasado diez largos años y pasará más tiempo sin poder siquiera decirle a Selena que la quiero y la extraño tanto…”. Veía esa pantalla enorme que me devolvían esas imágenes de Selena cantando “Como la Flor” en el Houston Astrodome mientras en el escenario un coro enorme de niños la acompañaban con su canto … Era curioso … Era una pantalla enorme y sin embargo veía a Selena pequeña, muy pequeña y lejana … Era curioso. Nosotros éramos unos pigmeos en comparación con Selena y sin embargo yo veía a mi hija como cuando tenía 6 años y me cantaba por primera vez generándome mi primera gran emoción como cantante … Habían pasado diez años en aquel momento. Allí supe que una larga etapa había terminado … Una etapa de asimilación y aceptación de la realidad … de una realidad que la tenía tan presente y a la vez tan distante … Empecé a entender que era época de desempolvar viejas grabaciones y hermosas imágenes de Selena … Era hora de empezar a entender que Selena había entrado en el pasado y que había que trabajar por este presente, este presente que la tenga siempre aunque mi hija cada día se aleje más y más, y las nuevas generaciones sólo sepan su nombre y recuerden alguna que otra canción mientras escuchan a otros artistas y viven con ellos lo que no pudieron vivir con Selena … y viven y sienten aquello que Selena toda su vida soñó con poder compartir y disfrutar con los que la han querido tanto…

Yo sólo espero que me entiendan. Ya no pido que coincidan en todo conmigo. Sólo les pido por Selena que la sigan queriendo a pesar de mí. Cuando leía el libro de Chris entendí que aún me reproche algunos comportamientos míos y que no entienda algunas cosas que le he hecho a él y a Selena, sobre todo en su etapa de noviazgo … Pero él sabe que yo nunca quise hacerles daño … Sólo quería el bien de todos, aunque a veces en el nombre de ello me haya equivocado tanto … Porque a pesar de mis rabietas y de mi temperamento siempre acepté las críticas, la opinión y la decisión de todos … No soy tan malo como parece … Yo quiero que mi familia esté bien y los defenderé siempre a pesar de todo … Yo sé que hoy me reprochan que haya permitido el cierre de “Selena Etc.” … También en vez de ello podrían haberme ponderado que la haya sostenido por tanto tiempo cuando podría haberme deshecho de ella apenas se fue Selena. Fue muy triste sostener un lugar en el que se representara como nadie los sueños de Selena, los sueños truncos de Selena … Y aún así lo sostuve, y si al final lo vendí fue por defender a mi familia, para no tener que soportar las consecuencias del obrar de otra persona que se ha aprovechado de nuestro dolor … No iba a cometer el mismo error como aquel nefasto día … Prefería desprenderme de algo material que sólo tendría un gran valor si estuviera mi hija que alguien de mi entorno estuviera solo y pagara las consecuencias de ello … No … No lo iba a permitir … No iba a tolerar una desgracia más en mi familia, máxime teniendo la oportunidad de impedirlo…

No me falta mucho para irme de este mundo. Por eso estoy preparando todo para dejar mi mensaje final. Sé que habrá mucha gente de mi familia que seguirá contribuyendo al Legado de Selena, pero lo que más espero es en aquella gente que tanto quiere a Selena, en aquella gente que la tiene en su corazón aunque no la hayan visto nunca, como ocurre en los últimos tiempos … Yo espero y deseo que a la hora de recordar a Selena piensen que ella dejó todo hasta el último día, y que lo dejó evidenciado en aquellas grabaciones que me tocó escuchar como su último mensaje. Yo sólo espero que sepan que Selena sólo quería ser feliz y hacer feliz a los demás. No piensen en mí, ni en nadie de mi familia a la hora de recordar a Selena … Sólo piensen en mi hija, que fue la única protagonista de su historia … Y recuérdenla con Amor, como ella quería, con el Amor que sólo ella podía dar…

(Si uno quiere de verdad, sabe escuchar, si uno quiere de verdad da sin esperar, ni mide las consecuencias de sus actos de Amor. Si uno quiere de verdad sabe entender aunque no perdone ni justifique muchos actos … Este mundo exige hoy que sepamos escuchar y mirarnos a la cara … y comprender, sólo comprender … No son tiempos de enojos ni de reprocharse por lo hecho en el pasado … Son tiempos de mirar atrás y ver lo que hemos hecho y qué hacer para mejorarlo … Es hora de querer y expresar sin ninguna vergüenza nuestros sentimientos, esos sentimientos que son parte de nuestra identidad. Es hora de no escondernos ni de pedir disculpas por lo que es si, si eso es genuino. Es hora de que los que amamos a Selena demos todo sin esperar nada a cambio, de mirarnos a la cara y sonreírnos, como lo haría ella, como lo hizo siempre sin ninguna condición. Es hora de que seamos como Selena como la mejor demostración de nuestro cariño, de nuestro afecto y de nuestro recuerdo…)

Selena: tú diste sólo Amor, ese Amor que ahora recibes como fruto de lo que has sabido sembrar…


Te quiere con toda el Alma…